Infinite Rose

Vacío

La semana había pasado volando, después de ella los meses, para Sakura la vida había perdido el sentido, no es que estuviese deprimida al punto en que de una manera patética ya no consiguiera la vida sin su eterna espera por su "Sasuke Kun", no, ahora había caído en la etapa de las "preguntas existenciales", su vida y todo lo que le había dado sentido alguna vez estaban siendo cuestionadas y en ese punto se había dado cuenta de que se había preocupado por cosas tan tontas que en ese momento ya nada tenía ese no sé qué, eso que te hacía querer seguir viviendo en esa perspectiva. Cansada de las miles de vueltas de su cerebro dejó salir un profundo suspiro mientras se recargaba en el espaldar de su silla, sus ojos viajaron por toda la oficina y de repente se sintió realmente asfixiada, tanto que tuvo que pararse para sacar su cabeza por la ventana, su vida estaba de cabeza tanto como su interior, pensó que podía soportar y que en algún momento se haría más llevadera la carga pero mes a mes seguir el proceso del embarazo de Karin como la espectadora había cobrado una fatal factura, en las noches solía llorar y en las mañanas deseaba no despertar para volver a esa lenta agonía.

Respiró hondo dejando que la primaveral brisa llenase sus pulmones y refrescase su alma, miró la belleza del paisaje de la aldea pero esta vez no sentía nada de emoción o anhelo y eso la hizo temer, se recargó en la ventana perdiéndose en sus pensamientos nuevamente, estaba en el sexto mes del embarazo de Karin, Sasuke aunque no lo mostraste mucho estaba realmente emocionado, podía sentirlo, a pesar de su agónica tristeza y vacío existencial se alegraba de ver que gracias a eso él había salido de esa cadena de autodestrucción y venganza, era lo que ella quería lograr pero que al parecer nunca estuvo ni cerca de alcanzar, ella jamás fue de mucha relevancia para el Uchiha así que jamás hubiese tenido oportunidad y con esa nueva conclusión se sintió aún más patética, tantos años detrás de algo que nunca se daría para solo lograr sentirse en el infierno... Tres golpes en la puerta la sacaron de sus pensamientos, agitó su cabeza para cambiar su semblante y con un suave "adelante" dejó pasar a quien fuese que estaba pidiendo permiso mientras se sentaba en su lugar.

Ten calma... Nada dura para siempre

- buenos días Sakura - San, espero que no seamos inoportunos- una sonriente Karin ingresó en el lugar, la maternidad le había hecho maravillas pues brillaba con luz propia, aquel vestido azul cielo resaltaba sus facciones y aquella pancita se mostraba orgullosa, la verdad era que Karin le agradaba demasiado como para culparla de su falla, eso sería realmente estúpido y ella no era de ser así, pero se sentía culpable a veces por desear lo que ella si tenía, vaya contradicción.

-bienvenida Karin - san, pasa, no son molestias yo encantada además también estoy ansiosa de saber que es - le regaló una sonrisa mientras se levantaba de su lugar caminando hacia la camilla dónde todo estaba preparado para la ecografía, Sasuke no habló solo hizo un movimiento con la cabeza en modo de saludo y ella agradeció eso, la verdad su voz aún hacía estragos en su ser y no quería eso.

Ayudó en todo a Karin hasta que la ecografía inició, el feto estaba perfecto y paso a paso le describió a los orgullosos y felices padres lo que veía, todo estaba bien y realmente se sintió muy feliz por eso hasta que vio el sexo del bebé, una niña, se sintió realmente irreal aquel momento dónde Karin lloraba feliz y Sasuke miraba con ternura aquella pantalla, ella se mantuvo muy profesional, grabó todo en la cinta para después limpiar el vientre de la chica. Karin fue un caso realmente difícil, había sufrido un desprendimiento de placenta que por poco acaba mal, fue estricta con su cuidado y por meses se había dedicado a cuidarla pues Sasuke solía salir frecuentemente de misión para solventar los gastos, claro que ahora todo valía la pena a pesar de su estado anímico pues como médico sabía que la vida de un inocente era lo más valioso en ese momento.

- bien Karin - san, todo ha salido bien hasta ahora, no cambies ni tu dieta ni tu estilo de vida para evitar algún susto, la placenta está perfecta así que nuestros esfuerzos han dado frutos, pero no debemos confiarnos - volvió a levantarse para regresar a su escritorio, Sasuke ayudó a su esposa para que se acomodara el vestido y se ubicara en la silla frente a Sakura.