Infinite Rose

un rayo de esperanza

Sus ojos se abrieron lentamente, al principio todo fue borroso y solo veía borrones de colores, pero después de un momento fue consciente de su entorno, un preocupado Naruto junto a un inexpresivo Sasuke y un despreocupado Kakashi la miraban fijamente a los pies de la cama, ya sabía que esto sería algo largo así que se levantó con cuidado quedando con la espalda recargada en el espaldar de la cama.

— supongo que sabes que le paso a tu cuerpo Sakura, espero que no haya sido algo consiente porque no puedo permitir que sigas así - Kakashi no era de los que regañaba, no, su sensei era muy calmado por lo que al verlo así no pudo evitar sentirse mal por sus intentos patéticos de huir a sus propios demonios.

— si esto es por tu trabajo con Karin...

— ¡No!, No lo digas Sasuke - interrumpió a su compañero antes de que completara la oración. Soltó un gran suspiro mirando sus manos, no podía decir la verdad, no podía afrontar aún esos hechos frente a ellos primero debía aceptarlo y trabajar para mejorar, lo mejor era una verdad a medias así que levantó su cara para poder expresarse mejor.

— algunas personas del personal médico están de vacaciones y debido a un brote de un virus estomacal tenemos mucho trabajo y no sería correcto dejar a los demás y yo irme como si nada... Además, soy la encargada del hospital de niños... Lo que digo no es para excusarme pues lo hice conscientemente sino para que entiendan mi porqué - Naruto frunció un poco el seño pero después entendió, Hinata había hablado algo al respecto y quizás tenía razón.

— oh, ya veo, lo siento eso fue mi culpa, bien pues ese personal ya llega mañana así que te ordeno como tú Hokage que te tomes tus vacaciones, claro que sí Karin necesita algo podrás intervenir, pero solo por ese caso especial, tus vacaciones comienzan ahora así que chicos la escoltan a su casa - sin más que decir Kakashi salió de la habitación dejando un incómodo silencio entre los tres.

—Oye Sakura - chan sé que esto va a sonar raro, pero... ¿Es normal que tu cabello creciera tanto en una noche? - expresó el rubio mirando con curiosidad la cabellera de su mejor amiga, Sasuke levantó una ceja ante la duda, ¿Que Naruto era tan idiota como para creer que eso era normal?, Por su parte la pelirosa extrañada tomó su cabello para ver el largor.

— mmmm no que yo sepa... Pero buscaré la causa - les regaló una sonrisa mientras se levantaba con cuidado, se sentía extraña desde que despertó, aunque ya no se sentía ahogada ni en estado depresivo, fue como si alguien hubiese reiniciado su sistema dándole un descanso de su etapa de "dudas existenciales" era un letargo de tranquilidad y la verdad quería quedarse un poco en esa burbuja, aunque nuevamente tuviera que salir a enfrentar su dolor.

No te engañes más...

Se recargó en la puerta de su hogar después de despedir a sus amigos jurándoles que descansaría, bueno el caso fue que Sasuke se las arregló para llevarse a un sobreprotector Naruto que se había negado en dejarla sola, ¡Incluso ofreció su casa para que descansara! Totalmente exagerado a su pensar, soltó un gran suspiro mientras miraba su hogar, aunque su miseria no estuviera al límite necesitaba reconocer que lo que la estaba matando en vida era su desamor, perdió su propósito porque absurdamente estaba viviendo por otra persona, lo más injusto era que ni se había proyectado en que hacer después de eso... Todos sus sueños fueron por alguien más y...

— demonios, ¿Que hago ahora? Yo... No sé cómo continuar...- no lloró, solo bajó la mirada sin saber qué hacer y justo cuando se sentía ahogada recordó aquel aroma, aquella mirada paternal y fragmentos de lo que parecía un sueño, ¿Acaso eso era una señal?

Santuario

Había pasado ya un periodo de intensa búsqueda, Athena no perdía la esperanza pues aún en sueños aquella alma imploraba por su ayuda. Se detuvo a ver a su alrededor, era la celebración del cumpleaños de su santo de acuario, Camus había pedido cortésmente que no hicieran nada, pero por favor, ella no dejaría sin festejo a su santo, no señor, todo era tan alegre y ameno que incluso algunos de otras órdenes estaban ahí, mirando eso parecía que aquellas fatales guerras nunca hubieran ocurrido, a pesar de la alegría del festejo su mente estaba en otro lado...