- Gracias- dijo, solo sonreí, viéndolo acomodarse a mi lado.
- ¿Por qué las gracias?- pregunte y me encogí de hombros...
- Tienes razón, debería sacar la lista de todas las cosas que te tengo que agradecer...- sonrió- lo primero es el abrazo... sabía que lo necesitaba, pero hasta recibirlo valore ¿Cuánto?... por ayudar a SOFIA, por cuidar de ALEXEY...
- ¿YURI?
- Dime...
- Está bien, ya entendí y no es nada, siempre que pueda estaré a tu orden, no me molesta hacerlo... sabes lo que significan para mí.
- Igual gracias, que no te moleste hacerlo no desmerece el mérito, también son gracias de parte de ellos, SOFIA se encuentra bien, pregunto por ti, sabe que te vi en la mañana, le he dicho que estas tan bella como siempre- sonrió con un gesto extraño, era como pena lo que reflejaba- y ALEXEY... hable con él durante un largo rato, otra vez gracias por prestarnos tu casa, necesitábamos un tiempo a solas...
- Si vas a seguir dándome las gracias, llegara la salida de KIM y tu aun estarás en lo mismo, ademas una vez me recriminaste por decirla varias veces indicando que tenias un amplio vocabulario, contando con que eras ruso- dije tranquila, aunque por dentro estaba temblando, su cercanía después de estos días alejado era para no estar quieta, sentía aun esas ganas de tirarme encima de él, pero mamá tenía razón debía hablar primero que cualquier cosa que pudiéramos hacer...
- Lo siento... las cosas han quedado claras entre mi hijo y yo, fue muy importante para él la conversación que tuvo contigo, no me dijo de que fue, solo que gracias a ello, había entendido muchas cosas y quería pensar con calma, que nadie se ha equivocado a propósito y que es importante para ambos, me refiero a su madre y a mí. Ahora está hablando con ella.
- Deseo que todo salga bien entre ellos, soy madre y estar molesta con un hijo o peor que un hijo este molesto con una es realmente desesperante... me disculpo, por haber provocado en gran parte esta situación...- susurre.
- No, tú no has provocado nada, nuestra relación familiar no tiene bases sólidas...
- Y yo fui la brisa que sopló para que implosionara- dije con pesar porque así lo sentía...
- No, moya lyubov', eso no es así y lo sabes... hemos vivido remendando las cosas, nunca sanamos nada, no hasta ahora... ayer hable con ella- se colocó bien en el banco con la mirada hacia el frente- le hice ver que no puede mezclar su relación con ALEXEY con la que lleva conmigo, no es como un anexo a la nuestra, no funcionamos como pareja, pero estamos obligados a funcionar como padres.- suspiró.
- Hace tiempo que olvide cómo amarla- continuo- como respetarla, como considerarla... ahora solo la tolero por él, muchas veces buscando fastidiarla a ella lo dañe a él...- bajo el rostro a sus manos que sostenían sus llaves y pose una sobre las de él, levanto el rostro y me miro.- Te quiero a ti, moya lyubov', solo eres tú en mi mente, en mi corazón y en mis ganas... amo a mi hijo, pero, por el amor que le pregono no le puedo dar una familia desechable, que cumple la función solo por momentos y luego se va a la basura...
- No sé qué decirte YURI.
- Dime que me perdonas haberte ocultado cosas importantes, dime que aún me quieres, dime que lo que siento es de ida y vuelta, porque te sientes un poquito igual que yo...
- ¿Lo dudas?- pregunte.
- No, pero estoy desesperado por escucharlo de ti, estoy desesperado porque sientas la misma necesidad que yo, estoy desesperado porque me digas que a pesar de mi estupidez no te perdí... sin ti soy solo eso... un desesperado...
ESTÁS LEYENDO
ME GUSTA EL RUSO
RandomCuando lo cotidiano es digno de contar, cuando la simpleza representa cosas interesantes. Samantha Cabrices quiere vivir tranquila y le tocara amar en otro idioma... con una altura imposible de disimular, un hombre llega a desordenarle las ganas...