Hasta el fin del mundo.

Capítulo 13

Elizabeht.

Hechos: Becca ha dado 4 besos en toda su vida, fue en un lapso de una semana y a 2 personas diferentes.

Incógnitas: ¿cómo carajos me ha besado tan bien si es su cuarto beso y los 3 anteriores seguro fueron un fiasco?

Respuestas: 1. Ha dado más de 4 besos en su vida, cuando se fue con Zeus él le enseñó a besar.
2. Estoy muy enamorada como para notar sus falencias.

Con sinceridad, no sé cuál está peor. Tomo mi plato de comida para tomar asiento junto a mis amigos. Mario me ha visto con los pómulos rojizos y me ha dicho que hablaremos en la siguiente sesión que tengamos.

—La comida no está nada mal —comenta Santi, solo intenta animarnos. Todos sabemos que la comida apesta, no sabe nada bien.

—¿Quieres de la mía? —le ofrezco, él niega con la cabeza sin disimulo haciéndonos reír

—Oye, ¿cuándo crees que podría agradecerle a Rebecca por lo que hace por mí?

—Cuando quieras, Ka —digo riendo— Becca es una persona normal, bueno, casi.

—Mírala, ahí va —interrumpe Santi. Volteo a buscarla en el comedor.

—Casi te desnucas —se burla Ka.

—La voy a invitar a que coma con nosotros —se anima Santi— ¡Becca!

La encuentro al lado del fastidioso de Zeus ¿por qué tiene que estar todo el día a su lado? Debería estar a mi lado todo el tiempo.

Tranquiliza tu posesividad, Eli. Ella es libre de estar con quien le plazca.

¡Claro que es libre de estar con quien le dé la gana! Siempre y cuando no sea con Zeus.

Becca y Zeus terminan sentándose con nosotros, Becca frente a mí y Zeus a su lado. Miro sus labios y recuerdo la sensación al tenerla rozando los míos. Quiero repetir. Quiero besarla frente a todas estas personas. Becca me mira por unos segundos que me dan vida, luego se sonroja y mira su plato.

—Rebecca —empieza a hablar Ka.

—¿Ustedes que vienen siendo? —pregunto hacia Zeus y Becca antes de que Ka empiece con su discurso, siento que mi amiga me patea por debajo de la mesa.

Zeus se atraganta con una papa frita y Becca me mira intrigada.

—¿A qué se debe tu pregunta? —responde Zeus— ¿Sigues celosa?

Lo miro arqueado una ceja desafiante. ¡Claro que estoy celosa! Pero no se lo iba a admitir.

—No. Es claro que tú quieres algo con Becca más allá que una amistad, solo que no sé en qué página estás tú, Becca —la miro esperando una respuesta.

Elizabeth paranoia salió a la luz. ¿Y si solo me besó por pesar? ¿Y si está jugando conmigo? ¡¿Y si me cambiaron a Becca por alguna gemela perdida y no lo noté?!

—Entonces es claro que tú y yo estamos en la misma página, Liza —me expone Zeus, ruedo los ojos porque eso es más que obvio.

—Amigos —responde encogiendo sus hombros y siguiendo con su comida.

—¡Toma esa friendzone, amigo! —me burlo de Zeus riendo.

—Becky, ¿tú y Elizabeth qué son? —pregunta Zeus.

—Amigas —responde rodando los ojos.

¿¡Cómo ha dicho!?

—¡Ups! Lo siento, amiga —ataca Zeus.