37. El bisne man.

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Jungkook cuando se percató que ese era Jung Hoseok, el nieto de Esperanza (que nieto más hermoso, Esperanza. Estoy para robárselo) que iba hacía el como toro enfurecido en una corrida.

-Oh, hyung... -balbuceó Jungkook nervioso mientras daba unos pasos hacía atrás. El papel que tenía en la mano lo estrujo al cerrar el puño.

El chico de pelo rubio confundido y sin entender ni pinga, se interpuso ante Hoseok cuando ya estaba cerca de el Guayabito de oro. Y lo empuja, va a empezar a formar chusmería.

-¡Eh, asere! ¿Qué pinga contigo? -preguntó el hombre.

-No te importa, necesito hablar con él -lanzó una mirada a Jeon.

¡Eh, cómo anda el caballo!

El chico miró a Jeon y le preguntó si lo conocía. Este afirmó con un gesto.

Al ver que si, se apartó y lo dejó acceder a Jeon. Pero le puso mala cara, él hombre tenía deseos de formar la desagradable. Yo creo que a él se le va a quitar cuando vea a las portras y yeguas del caballo. Son bravas.

Ya les digo, no se metan con el ganado de Hoseok.

Bueno, sin perder tiempo (ni preguntas escritas) Jhope fue directo a ver a su compañero.

-Primero te vas de la casa por gusto, te pierdes y te buscas un guardaespalda. Vaya, Jeon Jungkook que rápido.

Le puso mala cara al mayor. No le gusta que le regañen porque él es un adulto hecho y derecho. ¡Cuidado qué se molesta si le recuerdas que Ironman se murió! Ay, espero que no me haya escuchado.

-En primera: no me fui de la casa por gusto. ¡Me arruinaron mi nuevo récord de Piano Tiles! En segunda no me perdí, soy capaz de volver a la casa por mi cuenta. Y en tercera, no es mi guardaespalda. Él es dueño de un estudio de producción y me estaba invitando a trabajar con él.

Jhope se quedó más perdido que Martí en el bosque. Cuidado, que mira lo que paso a Martí.

-¡¿Qué?!

-Eso es lo que hay. Tengo pensado aceptar, así puedo matar el tiempo mientras volvemos a Corea -, comentó con mucha seguridad. Estaba muy dispuesto hacerlo.

Los rasgados ojos de asiático de el mayor casi se le caen.

Comenzó a tomar aire para calmarse y que no le diera algo aquí mismo. Que él no sabía si su seguro médico servía aquí.

-Jungkook, ¿para qué? Ya lo tienes todo. No necesitas trabajar con otra empresa ni nada.

-Eso es porque no has escuchado la tentadora oferta -se acercó más, poniendo su mano en el hombro del mayor -Por favor, escucha tal vez pudiéramos formar un dúo o algo así.

Hoseok realizó un brusco virao' de ojo. Ni yo cuando no me quieren comprar un paquete de datos.

Jungkook llamó al chico para que le explicara la tentadora oferta que le había ofrecido a él.

-Dime, asere.

-Él pudiera hacer un dúo conmigo. Sabe rapear y es muy buen bailarín.

Bangtan cubaneandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora