Nacido Para Un Min |YM|

17

YoonGi despertó temprano para cocinar el desayuno, aunque mala idea para alguien que en su vida tocó los utensilios de cocina.

-Aver, Min YoonGi, un café y unas cuántas tortitas.

Ordenó su mente en pasos que debía cometer.

Primero, tomar los granos de café y agua caliente.

Listo.

Segundo, crear la masa con agua, harina y huevo. ¿Cómo se veía la harina? Blanca, muy blanca, se autorrespondió.

Tenía que salir todo perfecto, no decepcionaría a el omega que dormía plácidamente abrazado a una almohada o a lo menos no lo envenenaría.

Lamentó no haber observado a los cocineros, después les pediría ayuda urgente.

Mezcló todo los ingredientes y los comenzó a amasar. Esto era más difícil de lo normal.

Empezó a freir las tortitas, una por una, teniendo ya en un plato unas 15, suficiente para ellos.

Tercero, hacer la crema. Necesitaba claras de huevo, azúcar y una batidora.

Así lo hizo, la crema quedó muy bien.

Fue hasta la mesa de comer y en medio colocó la jarra de café y las tortitas con un plato lleno de crema.

Asintió, orgulloso de hacerlo por su cuenta, ahora tenía que despertar al bello durmiente.

Se encaminó hasta el cuarto principal y observó con cariño la bolita que era JiMin entre las mantas, aferrado a la almohada como todo un bebé.

Sonrió acariciando los cabellos de su menor y besó su frente.

-Mi niño, ya son las 9 a.m. ven a comer.

Lo destapó lentamente.

-Mm, un momento más Yoonie.

Sonrió y negó con la cabeza.

-Ya es tarde y tenemos que ir a las 11 a.m. a casa de nuestros padres.

El menor comenzó a abrir los ojos lentamente, observandose a si mismo.

-¿Cuándo me cambiaste el traje? -Dijó al notar que estaba en pijama.

-Cuando dormías, tranquilo, no vi nada que no debí ver, lo juro.

-Yah.

Bostezó y miro al mayor.

-¿Qué?

-¿Y mi beso de buen día?

Sin más ambos labios fuerón unidos nuevamente, en ese toque sincero y hermoso.

-Vamos a comer, bebé.

Agarrados de la mano bajarón hasta sentarse uno enfrente del otro.

-¿Lo preparaste tu Yoonie?

-Si, espero sea comible.

Ambos rierón y comenzarón a comer.

-Esta muy bueno Yoonie, no sabía que cocinabas tan bien.

El mayor rascó su nuca, agradeciendo por su suerte.

-Tengo demasiadas sorpresas, JiMinnie -Sonrió de medio lado, guardando su orgullo.

Entre charlas y toques de mejilla terminarón su desayuno.

-Gracias por la comida.

-JiMinnie...

-¿Si?

-Tienes crema en los labios -Se enderezó y acercó sus largos dedos a los belfos rosados y gruesos del menor, pasó su pulgar por la mancha, limpiando el rostro del omega, llevando su propio dedo a su boca y lo lamió.

-Listo, estas limpio.

El menor que estaba más rojo que de costumbre asintió sin salir de su trance.

-Gra-Gracias..

YoonGi le lanzó un guiño y sonrió coquetamente.

-Creo que es hora de cambiarnos.

-Si...

Que tierno, pensó Min.

《°•○○•°》

-JiMinnie, no quiero mentir pero si no lo hacemos tendremos a nuestras madres encima de nosotros -Dijó antes de llegar a la gran puerta de su castillo.

-Tranquilo, nos creerán, estoy bañado en tu olor, literalmente.

-Suerte bebé -Le acarició las mejillas y ambos entrarón, encontrandose con la mirada expectante de ambas omegas mayores.

-Oh, trágame tierra.

-Te quiero JiMinnie -Dijó antes de ir con los alfas que también los miraban.

-Ho-Hola mamá, señora Min.

-Acompañanos, tienes que contarnos todo, exagera si quieres.

-¿Ah?

-Vamos, no seas tímido.

Y solo pudo sentir como era jalado por ambos brazos.

Por otro lado, con YoonGi.

-Espero que hayas sido bueno con mi hijo, Min YoonGi -Fue entonces que sintió una corriente eléctrica, su suegro lo miraba con dagas cortándole su garganta o a lo menos así lo sentía.

-No se preocupe, JiMin esta en buenas manos suegro.

Se sintió analizado, por primera vez intimidado.

-Te creo.

-Uff -YoonGi soltó todo el aire que no sabía cuándo comenzó a aguantarlo.

-Obvio que estará bien, mi hijo es un alfa respetable, yo mismo le eh enseñado.

-¿Así? No quiero hacerte recordar esos tiempos cuándo mirabamos a las omegas de la academia, a esa tal Tara.

-Shhh, ya lo sabe Sully, pero creo que Nora no sabe de la gemela de Tara, Sarah ¿Verdad?

-Esto se llama traición, la decepción, hermano.

Y entre más confesiones fue que pasó el rato el alfa desafortunado, por saber datos de su padre que no tenía que conocer.

En cambio JiMin parecía un tomate, tuvó que crear una historia caliente de como fue su primera vez, para que las mayores lo dejarán tranquilo.

-Yah, omma, no me dolió, fu-fue amable.

-Gracias a la Luna, si te dañaba yo misma le cortaba las bolas.

-Y yo también -Dijó la propia madre de YoonGi.

Sin duda los mayores no eran como pensaban.

Lo siento por el relleno bebés :c después se viene lo importante.

Y bueno, esta es mi primera notita ^^ espero les este agradando mi historia.

Los amo y hasta el siguiente capítulo.