Los días pasaron rápido, seguían en su burbuja de colores donde el suyo predominara, el hermoso amarillo.
Hasta podía exagerar, estaba flotando.
Si, siendo Alfa y mayor, seguía siendo muy enamoradizo y hasta inmaduro, pero en el momento en el cual sus colmillos encajaron en la piel del menor, se sintió jodidamente bien, que bien, perfecto.
La compatibilidad de cuerpos era tan precisa que hasta miedo daba.
Desde ese día, podía sentir a su pareja a pesar que esta no estaba al lado, cuando sonreía, cuando se entristecía, por medio del lazo que los unía y se mantenía firme entre la invisibilidad, era capaz de mandar buenas vibras a su pequeño.
Era el tal esperado y hermoso lazo llamado "Marca".
Y las horas se hicieron minutos, los minutos días y dos semanas ya fueron cumplidas.
-Yoonie estas medio ido ¿Todo bien?. -preguntó, mientras por debajo de la mesa acariciaba con las yemas de sus dedos las manos pálidas.
-Si cariño, solo que aún estoy impresionado. -sonrió y llevo su nariz al cuello del Omega, para satisfacerse del suave aroma, que bailaba por los vientos e iba directo a él, para curar las penas habidas y por haber.
Estaba seguro que al tener la dichosa marca, el aroma de JiMin se intensificó tanto que, aunque sonara extraño, podía verlo, en este caso era un azul vivo, alegre, lleno de energía, tenía un color.
Era tan JiMin.
Quizás la oxitocina en su cerebro era tanta que lo llevaba a alucinar, pero en estos momentos es cuando sabía que el príncipe a su costado era especial, de hecho, siempre lo fue.
Con la sonrisa capaz de alegrar al más muerto.
Simplemente era así, porque era JiMin.
Porque la curiosidad invadía al menor, las travesuras formaban parte de su vida pero no lo hacían un niño, se atrevía a decir que el Omega lograba tener momentos de madurez, tales, que lo dejaban asombrado, sonriente y con ganas de darles efímeros besos en todo el rostro.
Ahora, que el aroma de JiMin este combinado con el suyo, era tan magnífico que aceleraba su corazón y estremecía su cuerpo.
Si, quizás estaba enfermo.
Quizás no lo estaba.
Solo se había enamorado tanto, que todo ese sentimiento desbordaba por cada poro en su cuerpo.
🌸
Ante un perdido YoonGi que lo miraba tanto que no caía en cuenta que ya lo había notado, se dedicó a sonreirle, rememorando los sentimientos de la noche en donde lo marcó.
Una boba sonrisa lo invadió, mirando el suelo con un sonrojo.
Desde ese día, lo sintió más, como si mientras ambos se movían en un vaivén con las estocadas, tejían o creaban, no sabía la palabra exacta, un lazo que solo era visible por ambos.
Pudo reconocerlo como uno de los cambios que lograba la marca.
De niño su madre le decía; Es irreal y varía, pero la firmeza del lazo siempre se basa en la confianza, depende de ustedes, pueden irse hasta los polos del mundo pero sentirse cerca, aquí querido, en el corazón.
Y era cierto, nunca se sentía solo, la calidez lo consumía cual bebé y su Alfa lo llenaba de amor desde lejos.
Entonces ambos se miraron con cariño, se dieron un beso corto, sencillo y tranquilizador, no les importaba si sus padres y amigos los vieran, pues siempre estarían felices de su felicidad, son familia después de todo.
🌸
No era incómodo, pero si los llevaba a ponerse nerviosos.
Ese día era el primero en el cual compartirían cama, esa misma cama en donde días atrás hicieron el amor.
Oh, de tan solo pensarlo se emocionaban tanto que desviaban la mirada y jugaban con sus dedos.
-Bueno, deberíamos cambiarnos por nuestras pijamas, Minnie. -hablo bajo, mientras con una sonrisa se acercaba al menor y lo abrazaba por atrás.
La diferencia de estatura no era gigantesca, solo eran unos cinco centímetros máximo, por ello no le dificultó reposar la cabeza entre el espacio del cuello y hombro.
-Estoy nervioso, Yoonie. -admitió, pues una de sus tantas promesas era; No mentir ni ocultar los problemas e inquietudes.
-Yo también. -confesó-. Pero hagamoslo juntos cariño.
Ambos se miraron y no desistieron a darse unos besos más.
Poco a poco soltaban sus feromonas, para que la habitación fuera llenada por sus olores y crearan uno propio, su combinación.
Al sentirse relajados, tanto ellos como sus animales internos, tomaron las prendas que necesitarían y la colocaron en la cama.
JiMin fue el primero en atreverse a quitarle la camiseta color negro, para darle unos cuantos besos en el cuello y reemplazarla por la parte superior de la pijama.
Ahora era turno de YoonGi, a diferencia del menor, empezó por desnudar las piernas y dejarlo a su merced.
Lo sentó en la cama y acarició, delineó y beso sus muslos, como si de la joya más hermosa se tratara.
Y lo era, JiMin era su joya más hermosa.
Todos sus actos en esa noche tenían un propósito, conocerse, no de manera sexual, simplemente era formar esa sensación reconfortante cuando sus pieles chocaban, los estremecian y sonreían.
Querían crear su ambiente.
¿Me extrañaron? Porque yo sí.
Bueno, como deben haberlo leído, son pequeños fragmentos de lo que pasó en las 2 semanas.
¿Qué se viene?
Creo que ya lo saben -inserte risa de maléfica-
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Nacido Para Un Min |YM|
Fanfiction-Entonces es un trato, Park JiMin es de Min YoonGi. ¿Que pasaría cuando se enterara que desde la cuna tenía alfa? •Contenido homosexual. •No adaptaciones sin mi permiso. •Primera historia de su humilde escritora. •Omegaverse. •Todo comentario negat...