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Las madres estaban preocupadas, sus hijos no volvían desde la tarde y ya era la hora de la cena, lo cual las preocupo más, sus niños nunca faltaban, si, a pesar de que sean grandes seguían siendo sus bebés.

-Seguro han de estar en los jardines, a JiMin le encanta las flores -trato de buscar una respuesta- Sully no te preocupes, los jóvenes son así de desprevenidos ¿O acaso no te acuerdas de nuestros tiempos? Cuando te conocí el primer día nos escapamos a contemplar las danzas del centro, es normal.

-Si, supongo que me he preocupado de más -sonrió y suspiro, aun su YoonGi era su hijito adorado y nadie le haría cambiar eso.

Pero que chiste, mientras ellas se preocupaban por sus ya grandecitas crías, ellos dormían abrazados en el sofá del nuevo cuarto, donde hace 30 minutos JiMin terminaba de dibujar a su futuro esposo.

No querían separarse, el abrazo era firme pero cálido, desestresandolos de los preparativos de la boda.

Maldito frío que no les permitía seguir así, no ubicaban una manta y a este paso caerían en un resfriado, por ello el más pequeño decidió abrir sus ojitos y suspirar, admirando el bello rostro del alfa frente suyo.

-Oye amor, despierta creo que ya es tarde -susurró e hizo pequeños toques al cuerpo del adormilado joven- Vamos, creo que tengo hambre -hincho sus mejillas y no tuvo más remedio que darle un besito en los delgados pero rosados labios.

Al instante una risita malvada zurcó.

-¡Estabas despierto! Tramposo... -cruzo ambos brazos e indignado salió del abrazo.

-Ay, bebé te recuerdo que siempre debes despertar a tu príncipe con un beso -le guiñó y sonrió, comenzando a desperezarse- ¿Dormiste bien amor?

-Muy bien, pero mi mamá ha de estar preocupada y la tuya también Yoonie, vamos -le cogió del brazo y entrelazó sus dedos.

-Vamos, oh ¿No te llevarás tu obra de arte? A mi me ha encantado completamente.

-No, dejemos este cuarto como nuestro lugar privado para hacer travesuras -sonrió y antes de irse cerró con llave la habitación.

-Me fascina la idea -correspondió la sonrisita traviesa y entre pequeños chistes caminaron a la sala donde los mayores los esperaban.

-Pareciera como si se turnarán en llegar tarde -hablo el padre de JiMin, viendo como atrás estaba un Nam siendo jalado del brazo por Jin, esa escena ya era usual en su día a día.

-Disculpe la tardanza suegro -se reverenció y esta vez decidió sentar a su Omega en el centro de las reinas, quedándose al frente de él.

-No se preocupen, sabemos que como pareja joven necesitan sus pequeñas huidas, independientemente de su linaje.

-Es cierto, tu ya te has de acordar cuando salíamos siempre por las noches a contar las estrellas, amor -respondió Nora.

-Deben tener hambre, buen provecho- hablo acariciando las manos de su esposa y al instante las dos tardonas parejas asintieron.

Cuando las sirvientas posaron en la mesa rectangular los platos exquisitos no demoraron minutos en empezar a comer.

-He, NamJoon necesito tu ayuda -susurró para su amigo.

-Claro, dime YoonGi.

-Aquí no, dejemos un momento a nuestros bebés aquí y acompañame a mi habitación.

Ante la curiosa mirada de sus Omegas decidieron ir a "platicar cosas de Alfas"

-Me huele a gato escondido.

-¿Hum? Pero si no hay gatos en el castillo Hyung.

-Es una metáfora, inteligente.

El de cabellos castaños bufo.

-Oh, cierto Jinnie acompañame al salón, quiero que me des tu opinión acerca de una cosita -emocionado en menos de 3 segundos arrastró a su mayor hasta el salón.



( ̄(エ) ̄)



-Mi cielo, JiMin, esta hermoso -aplaudió muy encantado.

-¿Lo cree Hyung? ¿No hay algo malo?

-Tu... Pequeña rata con pies, esta perfecto ¿Bien? Cuando te vea ha de morir y revivir solo por ti -dijo muy seguro de sus palabras.

-Que bien, me alegro que le guste -sonrió ensayando una última vez, para no olvidarse de nada.

-Te veo muy emocionado, tu boda ya se acerca JiMinnie.

-Lo sé -mordio sus labios al terminar de estirarse por cuarta vez.

-Y te casaras antes que yo, me parece muy indignante.

-NamJoon Hyung seguro esta pensando en algo, no se preocupe Jinnie.


( ̄(エ) ̄)

-Oh por la Luna que abraza mis noches ¿Es verdad?

-Si, por eso te lo pido a ti, que eres uno de los amigos más cercanos de JiMin.

-No te preocupes, ayudaré -dijo pensando de inmediato los escenarios- ¿Puedo decirle a Jin? Será de mucha ayuda.

-Claro, él también es amigo de JiMin.

-Bien, muy bien, empezaremos mañana a primera hora -arregló sus lentes que pocas veces utilizaba- ¿Cuando piensas hacerlo?

-Pasado mañana -hablo sonriendo a la pequeña caja de terciopelo que reposaba en sus manos.

Esta vez quería decirlo con sus palabras, sus acciones y sin un documento tras su espalda.

Nacido Para Un Min |YM|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora