Su piel estaba caliente, poco a poco se iba cubriendo de sudor, más una punzada en su parte baja que lo hacía estremecerse y doblar su espalda.
Despertó con la respiración agitada, su pecho subía y bajaba y comenzaba a sentir una punzada cerca de su miembro.
Cerró los ojos queriendo prohibirse a su anatomía a tener una erección en plena madrugada.
Aunque, era imposible pues un Omega con olor exquisito impedía sus deseos.
Mordió sus labios, no recordaba cuando fue que se había dormido, tampoco qué es lo que había hecho en la tarde, nada, solo despertó.
Suspiro hondo, miró a su esposo que dormía en lo profundo de sus sueños, con el cabello desordenado, la camisa del pijama revelando su blanca piel de las clavículas bien marcadas, aquel cuello donde anteriormente había mordido y dejado una marca que quedaría para siempre, los ojos cerrados adornados por las largas pestañas negras, después, su nariz de botón respirando con tranquilidad.
Fue entonces que su vista se enfocó con la pasión misma, los labios de su amado, aquellos rellenos, suaves y rosados belfos entrecerrados, lanzando pequeños suspiros.
No pudo contenerse, ahora sí tenía un problema entre el pantalón.
Aunque le culpaba a JiMin ¿Quién lo mandaba a ser dulcemente sexy? Con esas piernas largas y muslos perfectos para tomar entre sus dedos. Con aquel vientre plano y finamente marcado. Con ese trasero que, por la Luna, lo llamaba a ser tocado, a ser mordido, lo que sea.
Y pensar que todo eso estuvo entre sus brazos y le pedía por más.
Ahogo un ronco gemido de la excitación, su pene palpitaba y dolía.
Con fuerza cerró sus ojos para no deleitarse y torturarse a la vez con el cuerpo de su esposo.
Pero su mente era traicionera, dándole los recuerdos de cuando JiMin estuvo bajo suyo, con la mirada llorosa, los labios rojos, la respiración irregular mientras movía sus caderas.
Después, cuando el menor en su momento de travesuras lo montó y decidió ser "el que manda", para dar saltos cada vez más rápido con su miembro dentro, mientras se apoyaba en su pecho y lo miraba con esos juguetones ojos.
-Mierda... Esto no va nada bien.- Se dijo a sí mismo.
Decidió alejarse del menor, no quería aprovecharse muy a pesar que el cuerpo del Omega pedía a gritos por ser tocado.
Con mucho cuidado y tranquilidad, que no tenía, comenzó a salir de la cama.
Levantando sin provocar ruido alguno las sabanas, a un paso de salir.
Pero JiMin lo atrajo hacía él, abrazándolo y rodeándolo con esa feromonas, que como droga cegaban su raciocinio.
-Bebé, no me hagas esto.-Susurró mirando al techo, rogando por misericordia.
No tuvo más remedio, en silencio llevo su mano hasta el comienzo del pantalón y lo bajo hasta que podía ingresar a su boxer y tocar su pene, que prácticamente ardía.
Retuvo los sonidos que querían escapar de sus labios, intentando en vano tranquilizar su respirar.
Cerró sus ojos y rememoró los sucesos de hace dos semanas, pensando que era no era su mano, sino, la del Omega travieso.
Los deseos tan vulgares llenaban cada extremo de su mente.
Unos donde su esposo llevara esa boquita hasta su miembro y comenzara a lamerlo.
Si, eso, quería que se vuelva realidad.
No sabía si era por su repentino calor, sus pensamientos indecentes, pero se sentía real.
Entonces abrió los ojos y bajo su mirada.
-Ji... JiMin... ¿Qué... - No pudo terminar, pues era verdad, el Omega le sonreía mientras entre sus pequeños dedos sostenía su miembro y se lo llevaba a la boca para dar unos cuantos besos en el glande y bajar hasta sus testículos- Uhm... Ah, bebé.
Su cordura era tan inestable que no lo pensó más y decidió disfrutar de las acciones de su Omega.
Como jugaba mientras lo masturbaba, reía y gemía a propósito.
Sentía que su amado veía a su miembro como una paleta, pues daba lamidas por todo el cuerpo y se detenía para rodear el glande.
Sus deseos se hicieron realidad, alabada sea su divinidad, pues JiMin estaba sonrojado, con los cabellos alborotados, la piel perlada y con los labios abiertos, rosados y una fina línea de saliva escurriendo de ello.
Poco a poco sintió que estaba cerca del clímax.
Aunque le estaba haciendo un oral, quería más, aquella boquita dulce podía esperar.
Sonrió y tomó entre sus manos al menor, para ponerlo bajo suyo mientras se acomodaba entre sus piernas.
-Muy travieso, bebé, pero necesitas un castigo ¿No?- Acarició su mentón y lo acercó a él.
-Uhm.. Si, por favor.- El Omega comenzó un beso sencillo, donde sus labios se encontraban y sus lenguas danzaban.
Ahora YoonGi podía palpar el cuerpo de su esposo, acariciarlo y morderlo.
Lo comenzó a desnudar poco a poco, mientras daba algunos besos en su cuello y olía su peculiar aroma.
Ambos aprovechaban para crear nuevos recuerdos, sintiendo la calidez ajena y adorando cada parte de su pareja.
Todo era natural, no lo pensaban, lo hacían como si sus cuerpos tuvieran vida propia y ellos eran simples cómplices.
El silencio de la habitación era perturbado por sus gemidos, sus suspiros y llamados.
YoonGi al terminar de preparar a JiMin, llevó su miembro y lo alineó para entrar en esa entrada rosada que estaba mojada por el lubricante que salía del interior.
Se miraron a los ojos cuando todo el cuerpo del pene estuvo dentro, aferrándose a la cadera del Omega comenzó sus movimientos lentos, buscando ese punto que deleitaba de puro placer a su príncipe.
Cuando lo encontró, siguió dando estocadas con más rapidez, más profundidad e intensidad.
Su esposo se aferraba a su espalda mientras abrazaba su cintura con sus piernas y gemia cerca de sus sensibles oídos.
Ambos sintieron el cielo avecinarse, siendo testigos de como mortales llegaban a un punto del placer irreal y eran abrazados por la lujuria misma.
YoonGi se corrió dentro del menor mientras JiMin entre sus vientres.
Sonrieron agotados, cansados pero plenos y felices.
-Te amo.
-Te amo más.
No necesitaron palabras, solo besos hermosos y caricias tímidas.
Ambos nuevamente cayeron dormidos.
¡Sorpresa! A que no se esperaban doble actualización °^°
F por mí que me tuve que leer sobre la anatomía del pene XD
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Nacido Para Un Min |YM|
Fanfiction-Entonces es un trato, Park JiMin es de Min YoonGi. ¿Que pasaría cuando se enterara que desde la cuna tenía alfa? •Contenido homosexual. •No adaptaciones sin mi permiso. •Primera historia de su humilde escritora. •Omegaverse. •Todo comentario negat...