Capítulo 90

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- ¡Rápido, chicos! -dice Remus abriendo la puerta de par en par-. Tenemos que irnos.

- ¿A dónde? -dice Víktor confundido.

-A Hogwarts. Acabamos de recibir un mensaje de Aberforth Dumbledore, Harry, Ron y Hermione están en su casa y pretenden ir a Hogwarts. Necesitan nuestra ayuda.

-Vamos -digo levantándome de la cama seguida de los gemelos.

-Oye, espera -dice Víktor deteniéndome antes de salir de la habitación.

-Dime -digo volviéndome hacia él.

-No estoy seguro de esto -dice negando con la cabeza-. Pienso que es mejor que te quedes aquí, allí estallara una guerra de la que no podre protegerte.

-Víktor, voy a luchar -digo poniendo mis manos en su pecho-. No pienso quedarme al margen de todo cuando todos los que me importan luchan allí. Lo sabes.

-Ojalá hubieras continuado en Madrid con Malfoy, por lo menos allí sabía que estarías bien -dice suspirando y cerrando los ojos para que no viera que estaba a punto de llorar, pero lo conocía demasiado bien.

-Víktor, mírame -digo poniendo mi mano en su mejilla y el niega con la cabeza sin abrir los ojos-. Mírame -le vuelvo a pedir y se me quiebra la voz.

El abre los ojos y una lágrima resbala por su mejilla.

-Estaremos bien -le prometo.

-Si te pasa algo... -dice frunciendo el ceño.

-Ya no soy la niña pequeña que se tropezaba con sus propios pies al correr -le digo con una media sonrisa.

Él sonríe también al recordarlo mientras me limpia una lágrima.

-Siempre tenía que ir detrás de ti con un botiquín para curarte -dice riendo-, porque por muchas veces que te pasaba tu seguías igual.

-Porque sabía que tú siempre estarías ahí para cuidarme -le digo con cariño-. Gracias por haber sido el mejor hermano mayor que podía tener.

-Y mira que no me lo ponías fácil -dice bromeando.

Yo me rio negando con la cabeza y el me da un beso en la frente.

- ¡Vamos! -nos vuelven a gritar.

- ¿Preparado? -digo separándome de él y tendiéndole mi mano.

-Siempre -dice aceptándola.

Ambos bajamos al salón, donde se encontraban solo nuestros padres con Remus y Arthur.

-Quedáis vosotros, coged Polvos Flu -dice mi padre.

- ¿Dónde vamos? -pregunta Víktor.

-A Cabeza de Puerco -informa Remus.

Yo hago una mueca al recordar el sitio, y tras Víktor, me meto en la chimenea.

Una vez todos allí, Aberforth nos fue colando en grupos reducidos en Hogwarts a través de pasadizos secretos que por lo visto existían.

Una vez todos en Hogwarts, nos reunimos con Ginny. Ella se encargó de informarnos del plan de Harry y decirnos que debíamos hacer, lo que nos lleva a este preciso instante. Con toda la orden frente a las puertas cerradas del gran comedor a la espera de la señal para poder entrar.

-Ahora -dicen los gemelos y, con la ayuda de Ginny, abro las puertas del gran comedor y entramos. Víktor permaneció a mi lado y me sujetó fuerte de la mano cuando mi mirada se posó en Snape.

Seguía sin poder comprender como pudo matar a Dumbledore. Y seguía doliéndome que realmente fuera uno de ellos. No como me hizo creer que era, un espía para la Orden.

Melody ¿Krum?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora