Melody ¿Krum?

Capítulo 88

Habíamos enviado una carta a mis padres y hermanos diciéndoles dónde estábamos y que avisaran a Cissy, junto con una carta para Cissy que no podíamos enviar por miedo a que cayese en manos equivocadas.

Estábamos en un piso que decidimos alquilar en pleno centro y un día vinieron mis padres junto con mi hermano Víktor y Cissy para vernos. Draco se alegró mucho de saber que su madre estaba bien.

Desde ese día el humor de Draco mejoró bastante. Sonreía más, se le veía más vivo, disfrutaba todo más e incluso había mantenido en varias ocasiones conversación con muggles. Hoy incluso, se había propuesto sorprenderme con la cena.

- ¿Quieres que te ayude? -digo abrazando a Draco por la espalda.

-No. He dicho que hoy preparaba yo la cena y lo pienso hacer -dice frunciendo el ceño.

-Está bien -digo con una sonrisa.

Era nueva está faceta de Draco, le había dado por cocinar y se había involucrado más en todo lo relacionado con la casa, dejando de lado aquel niño mimado que no movía un dedo por hacer algo.

-Ve a sentarte mientras -dice dejando la cuchara de madera sobre un plato y girándose para darme un rápido beso-. Yo te aviso cuando esté lista.

Hice caso y fui a sentarme en el sofá del salón a mirar algunos álbumes de fotos que había traído Draco en su maletín hasta que me avisó para que me sentara en la mesa que había preparado ya para cenar.

-Voy a por los platos -dice con una sonrisa nerviosa yendo hacia la cocina para después aparecer con un plato en cada mano y dejarlos sobre la mesa.

-Mmm... ¿Qué es? -digo con una sonrisa mirando tiernamente como estaba de nervioso por haber preparado su primera cena.

La verdad es que no tenía muy buena pinta, pero no entraba en mis planes destrozar su ilusión de preparar el solo la cena. Era una especie de sopa transparente tirando a blanco con algo largo que parecía pasta. Además, flotando había trozos de carne.

-Pues es lo que los muggles llaman espaguetis -dice jugando nervioso con sus dedos.

Yo reuní todo el valor que pude para coger la cuchara que había puesto en lugar de tenedor e intenté coger algún espaguetis bajo la atenta mirada del rubio.

Cuando lo conseguí, me lo metí a la boca con la esperanza que supiera mejor de lo que parecía. Para mí desgracia era peor todavía.

Intenté no hacer ninguna mueca de desagrado y me lo tragué para después beber un poco de agua para que no notará nada raro.

- ¿Qué pasa? ¿No te gusta? Está malo, ¿Verdad? -dice agachando la mirada.

- ¡No! -digo cogiéndole la mano-. Está bueno.

Dicho esto, volví a repetir el proceso rogando a Salazar que esta vez fuera mejor. No fue así y Draco notó una leve mueca de desagrado.

-Mel, da igual. No hace falta que te lo comas -dijo intentando apartar mi plato.

-Draco, lo has preparado tú. Me lo voy a comer -digo sujetándolo.

Entonces fue él quien probó su comida para después escupirla sobre el plato.

-Oh, Merlín. Qué asco -dijo apartando su plato. Yo agaché mi mirada-. Dame que lo tire.

-No hace falta, yo puedo...

-No te vas a comer esto, Melody. Está asqueroso. ¿Cómo has podido aguantar el sabor? -dice abriendo mucho los ojos.

Yo me encojo de hombros.