-Tu máscara –dice Snape dándomela bruscamente.
Yo la cojo y me la pongo torpemente. Después me pongo la capa y me subo la capucha.
-En marcha –vuelve a decir Snape para después aparecernos a la vez en el callejón Diagon.
-Buscadlos y si alguien os retiene, matadlo –indica Snape y todos los mortífagos salen disparados en distintas direcciones-. Malfoy, ¿acaso estás sordo?
Yo parpadeo varias veces y me pongo en marcha. Tenía que encontrarlos antes que ellos.
No fue difícil ya que los mortífagos de aquella misión eran bastante incompetentes.
-Malfoy –dice Harry mirándome con odio.
-No hay tiempo para esto –digo poniendo los ojos en blanco-. Tenéis que iros, hay mortífagos por todo el callejón buscándoos.
- ¿Y por qué deberíamos creerte? –insiste Ron.
-Ronald por el amor de Merlín corréis peligro –insisto frustrada. Entonces se empiezan a escuchar gritos por toda la posada-. Intentaré retrasarlos todo lo que pueda, pero no os podéis quedar aquí.
Dicho eso salí, chocándome con Daniel Nott. Esto era incómodo.
- ¿Nada? –pregunta alzando una ceja.
-No. No hay nadie aquí –me apresuro a decir con el típico tono orgulloso de los Malfoy.
Parece convencerse porque da media vuelta. Entonces Harry abre la puerta de par en par y el señor Nott se da la vuelta.
- ¿Con que no había nadie? –dice con una sonrisa de superioridad-. Traidor...
La había liado muchísimo.
-Desmaius –dice Snape apareciendo por detrás de Nott, el que cayó al suelo inconsciente-. Obliviate.
Me volví para mirar a Harry, pero ya no había nadie en la habitación. Habían huido.
-Ven aquí –dijo Snape furioso cogiéndome ferozmente del cuello.
Se desaparece conmigo y volvemos a Malfoy Manor.
-Snape –digo intentando zafarme, pero es imposible.
Me lleva hasta la habitación de Draco y la abre con facilidad, metiéndome dentro de un empujón y siguiéndome rápidamente.
Cerró la puerta con un hechizo y se encaró conmigo.
- ¡¿Cómo se te ocurre hacer esto, Melody?! –dice enfadado.
-No tengo porque darte explicaciones de nada –digo cruzándome de brazos y frunciendo el ceño.
-No me hables así, niña –dice furioso y se gira para mirar a Cissy quien nos miraba atónita sin interrumpir en la conversación-. Y tú, Narcissa, te creía más cuerda.
-Te hablo como te mereces. Eres un maldito mortífago –digo notando como las lágrimas se acumulaban en mis ojos.
-No sabes de lo que estás hablando –dice dolido-. Además, te recuerdo que él también lo es –dice mordaz.
-Él no es malo –digo segura-. Es mortífago para mantener a salvo a Cissy.
Ella abre los ojos sorprendida.
- ¿Te ha dicho Draco eso? –pregunta sorprendida.
-Te equivocas –me dice serio-. Ofreció su lealtad para asegurarse de que te mantenía a salvo. No es a ti a quien quiere el señor tenebroso, puedes darle las gracias a él –yo trago saliva bruscamente-. Que se tome esto, en media hora estará recuperado.
-Gracias, Severus –dice Cissy cogiendo el frasco y dándoselo de beber.
Yo me siento torpemente sobre la cama, al lado de Draco.
-Tengo que ir a decirle al señor tenebroso que Potter escapó. Luego volveré –después de eso me miro una última vez antes de salir de la habitación.
- ¿Es cierto? –digo con un nudo en la garganta-. ¿Se convirtió en uno de ellos por mí?
-Fue una de sus motivaciones –confirma Cissy-. Se hubiera convertido en uno de todas formas. El error de Lucius iba a pasarnos factura, pero Draco se ofreció a cambio de que tu estuvieras al margen.
Yo pongo una mano sobre la suya mientras que con la otra me quito las lágrimas que habían salido.
-Es raro ver a mi hijo al lado de mi hijo sujetando su mano –dice Cissy con expresión divertida-. Es como si su ego se volviera realidad.
Yo suelto una sonora carcajada con eso. Después lo miro melancólica.
-Hace tiempo que no veo a ese Draco altivo y egocéntrico –murmuro triste-. Todo esto le está pasando factura.
-Lo es –murmura Cissy del mismo modo.
Entonces Draco comienza a moverse ligeramente, centrando toda nuestra atención en él. Abre lentamente los ojos y mira a su alrededor hasta fijarse en mí, o en él técnicamente. Yo sin pensármelo demasiado me lanzo a besarlo.
Él me mira horrorizado y noto sus labios rígidos en una mueca de desagrado.
Me aparto divertida al darme cuenta de que no sabe que soy yo y Cissy se ríe a carcajadas de su expresión de horror.
-La poción dejara de hacer efecto en unos minutos –digo mirando mi reloj-. Soy yo, Draco.
- ¿Pero ¿qué...? –dice con la voz ronca.
-Poción multijugos –digo encogiéndome de hombros.
-Dime por favor que no has hecho lo que creo que has hecho –dice mirándome serio. Después mira a su madre-. Dime que no ha hecho lo que creo que ha hecho.
-Tuve que hacerlo –digo alzando los hombros.
- ¿Te has vuelto loca? –dice exaltado.
-Pues sí, ¡sí! –digo del mismo modo.
-Os dejo solos –dice Cissy caminando hacia la puerta.
-Draco, estabas inconsciente –digo intentando hacerle entrar en razón-. No quería que hubiera represalias para vosotros.
- ¿Sabes lo que te podría haber pasado? –dice furioso-. Si alguien te llega a descubrir...
-Mi padrino lo sabe –murmuro sin mirarlo. Estaba realmente enfadado.
Lo oigo suspirar pesadamente y se pasa las manos por la cara y el pelo rápidamente. Después, sin previo aviso, me abraza pegándome a él.
-Si te pasa algo me muero –dice en un susurro-. No vuelvas a hacer nada así. Ni por mí ni por nadie, aunque haya represalias.
Yo apoyo mi frente en el hueco de su cuello respirando hondo.
-Te quiero -murmuro sobre su cuello.
-Y yo a ti -responde del mismo modo acariciando mi cabeza.
Yo levanto la cabeza para darle un casto beso en los labios.
- ¿Qué has tenido que hacer? -pregunta sentándome sobre sus piernas.
-Pues digamos que has salvado a Harry -digo con una pequeña sonrisa-. Me han mandado en una misión para capturarme a mí misma
Él suelta una pequeña carcajada.
-Solo yo puedo capturarte -dice burlón rodando conmigo sobre la cama para ponerse sobre mí.
-Que bobo eres -le digo poniendo mi mano en su mejilla.
Draco sonríe, pero después se pone serio de nuevo.
-Prométeme que nunca volverás a hacer algo así -me pide.
-Te lo prometo -le digo juntando nuestras frentes.
Aunque fuera falso.
ESTÁS LEYENDO
Melody ¿Krum?
Fiksi PenggemarA estas alturas ya no se ni por dónde empezar, así que seguiré el consejo de la abuela Krum y comenzaré presentándome. Soy Melody Potter, melliza de Harry Potter; pero conocida como Melody Krum, hermana de Víktor Krum. «Capítulos cortos»