Rencor, Determinación y Ostracismo

Toda la furia. Parte 11.

Cuando Orochimaru y Danzo, junto los ambus, llegaron a su laboratorio donde estaban escondidos temporalmente, dejaron a los dos capturados en el suelo y los procedieron a encadenar. A Sasuke, lo encadenaron derecho en una pared con unas esposas anti-chakra. Naruto, por su parte, fue puesto en una especie de mesa algo grande, también encadenado a los extremos con esposas anti-chakra, desde las cuatro extremidades a los cuatro extremos. Este se hizo para proceder a la extracción del kyuubi.

Ambos fueron despertados a petición del halcón y la serpiente, con una balde de agua fría. Cuando despertaron, se miraron a sí mismos, y después a los dos, con muchísimo odio.

Sasuke: ¡Malditos!

Orochimaru: Sasuke-san, me dolió mucho cuando te fuiste, sabes... -dijo fingiendo pena-.

Sasuke solo veía al susodicho con una mirada que casi derretía. Intentó pensar en algo pero se dio cuenta de que las esposas no le dejaban acceder a su chakra. Lo bloqueaba. Esto le molestó bastante. Naruto, por su parte, no dejaba de reprocharles lo malditos que son, todo lo que le habían hecho. Era un muchacho muy enérgico, y eso estaba cansando a Danzo.

Danzo: Deberías sentir orgullo, pasarás de ser una bestia a una arma de Konoha. Deberías alegrarte por esta oportunidad que te estoy dando. -le decía Danzo-.

Naruto perjuraba e insultaba a los dos, les prometía en vano que algún día tendrían su merecido, pero claro, esto era algo irreal dicho en la situación en la que estaban. Esta es una más de todas las historias injustas que se han podido dar a lo largo de la historia shinobi. Algo que Naruto jamás aceptaría.

Sasuke sin embargo, estaba más calmado que Naruto, pero no por ello preocupado. La marca de Orochimaru fue extraída por su hermano después de que estos hablasen y sincerasen. Sabía que si Orochimaru quería, y podía, conseguiría su cuerpo y sus ojos (cosa que él sabía). El chakra no fluía bien por su cuerpo con estas esposas, y un experimento de Orochimaru en esta situación, era demasiado peligroso. Pero se tensó cuando el depravado quiso acelerar las cosas.

Orochimaru: Bueno como seguramente, a nadie de los que esté aquí les guste esperar, será mejor empezar con lo nuestro, ¿no? -decía con recochineo la serpiente ahora mirando a Naruto-.

Esto lo tensó. Después se vio como Kabuto entró a la sala con diferentes instrumentos quirúrgicos en dirección a su maestro, que cuando fueron vistos por los dos amigos, no les auguraron nada bueno. De hecho, Naruto se estremeció un poco al ver la cantidad de agujas e instrumentos filosos. Sasuke solo bajó la mirada resignado. No se le podía creer. Esto es algo que realmente, no le desearía ni al peor de sus enemigos. Bueno, sí, sólo a ellos dos; por pura venganza, pero sabía que eso no sería posible.

Por desgracia para él, los experimentos empezarían por él. Lo que Orochimaru llevaba tanto tiempo buscando, eran esos ojos rojos sobre los cuales tenía sueños húmedos por las noches. Esto fue peor para Naruto, ya que empezó a ver como le empezaban a sacar los ojos a Sasuke, mientras este gritaba muy dolosamente. Fue rápido, pero para Sasuke se sintió como una eternidad. Igual para Naruto. Estaban matando a su amigo, con el cual se acababa de reconciliar después de tanto tiempo. Intentó forzar sus ataduras pero era imposible, se retorcía mientras gritaba a esos dos malditos que veían sus sueños hacerse realidad. Para cuando acabaron, Sasuke se intentaba mantener despierto. Apretaba fuerte sus párpados vacíos con dolor, y su único pensamiento era que acabase esta tortura. Naruto miraba a su amigo con lágrimas en los ojos.

Orochimaru: Vamos, vamos, no te preocupes, ya llegará tu turno, se que estás emocionado. -se burlaba la serpiente albina-.

Naruto apretaba sus dientes casi al quiebre mientras las lágrimas rebosaban de sus ojos. Esos malditos.... No tenía ideas, y se adaptó a la idea de morir, aunque sea, junto a su amigo en los últimos momentos. Sasuke también acabó por compartir este sentimiento, además de preguntarse por su hermano.