Pasó esa mañana y ellos regresaron a la casa. Coraline se comenzó a reír de pronto mientras posaba sus manos en su barriga, Jaque la miró un tanto dudoso y ella le dirigió una sonrisa, le tomó su mano y la posó sobre su vientre. Se podía sentir un ligero movimiento. Jaque se asustó, pues eran más fuertes que en tiempos pasados, y se quedó con los ojos como platos sintiendo aquello, sin evitarlo soltó una sonrisa nerviosa mientras la castaña le miraba con cierta felicidad y calidez. El licano no soportó mucho y la abrazó mientras se sonreía. Coraline también le abrazó y luego él le besó. A la chica le sorprendió aquello, pues hacia realmente tiempo que no se topaban los labios, pero sólo pudo sonreír y volver abrazarse a él.
(...)
Todo iba bien, Gabriela le daba ricas comidas a Coraline, con lo necesario para que el embarazo no la fuera a descompensar a Coraline y evitar a toda costa problemas que a veces eran inevitables debido a la condición de la chica. Pero sólo una vez tuvo complicaciones graves, pero gracias a los rápidos auxilios de Gabriela pudieron atenuarlos. Coraline después le dijo que no podría ayudarle demasiado a la anciana, y ésta le ofreció que le ayudase con algunos cuidados de la casa para evitar riesgos y seguirla teniendo bajo vigilancia. Mientras que Jaque seguía haciendo algunos trabajos que Gabriela le pedía.
Realmente Coraline le había tomado aprecio a la señora, le veía como a una especie de abuela que ella no pudo disfrutar por mucho tiempo en la niñez y la viejecilla también se había encariñado a Coraline y Jaque: que a veces estaba "de malas". Conforme pasó el tiempo, Coraline prácticamente sólo iba a la casa de Gabriela a estarse con ella aprendiendo mas recetas de cocina ricas para el embarazo y después de éste. Algunos tips que le daba para cuando se aliviase o cuando tuviera las nauseas y mareos que a veces se hacían muy frecuentes. Le mostraba nuevas formas de tejer y cuales hilazas eran las ideales para el bebé. Además de que le daba apoyo médico y aportaba para los chequeos. Podría decirse que la señora Gabriela adoptó a Coraline como a una nieta que tenía mucho por aprender.
Por medio día, "Jaque" terminó con el tejado y bajó a la casa un tanto fastidiado. Coraline le sirvió agua y él se sentó sobre el sofá grande y cómodo de la sala de Gabriela mientras echaba su cabeza hacia atrás en el sofá. Poco después llegó Coraline con un refrigerio para él y se sentó a su lado con Gabriela frente a ellos.
La anciana seguía creyendo que era uno de los días en que Jaque se levantaba de mal humor, pero Coraline sabía que era Caín a quien tenía enseguida. Él miró a la castaña y le hizo una seña con los ojos, ésta comprendió y, soltando un suspiro, le dio trocitos del jamón con queso en la boca. Bien él podía hacerlo, pero estaba demasiado fastidiado por ser obligado a trabajar por algo que no le era de importar y Coraline le seguía el juego como agradecimiento. Por otra parte, Gabriela les miraba con cierta indiferencia mientras le daba de comer, literal, a "Jaque" en la boca. La chica terminó con ello y se recargó en el sofá mientras soltaba un suspiro. Caín le pasó el brazo por detrás y jaló hacia él mientras le daba un beso en la cabeza. Sólo con ella se había ablandado.
–A veces me da ternura el cómo se tratan. – comentó Gabriela mientras se sonreía. Coraline se sonrió también y Caín seguía indiferente.
–Muchas gracias, Nana Gaby– Coraline ya se había acostumbrado a llamarla de aquella forma.
Ellas siguieron hablando un poco hasta que se hizo más tarde de lo habitual y volvieron a casa.
–Caín, muchas gracias por todo lo que estás haciendo. Aun cuando no es tu obligación...
–Sólo no me fastidies. Odio estar bajo el sol y esa mujer me tuvo todo el día en el tejado. – respondió con cierta molestia y recelo... también con un poco de desprecio.

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Protegerla de mí...
WerewolfUna noche común de otoño, ella, pidió algo diferente para cambiar su vida. Algo que le hiciera ver las cosas de otro color, pero nunca creyó que esa petición se cumpliera. Mucho menos que fuera muy literal el "algo diferente que me cambie la vida"...