Mafia |EDITANDO|

~capitulo 22~ Disparame

PUV Charlotte
Se podía corta la tensión del ambiente con un cuchillo.

-Tal ves deberías hacerlo- me acerqué como el lo habia hecho- pero ambos sabemos que cuando Itzae lo sepa te matará, matará a todos los aquí presentes y no será de forma agradable- me aleje girando para que todos me vieran - no estamos aquí para iniciar una guerra, pero dejaré en claro que amenazar mi vida y la de mi familia es una ofensa que debe ser remediada,yo no afectó sus negocios y espero no lo hagan con los míos- dio una mirada ensombrecida cómo había visto a Itzae hacer.

En este momento me siento mafia, en toda su plenitud, pero tenía miedo de los resultado de todo, el miedo era  parte del instinto de supervivencia, me alegraba de aún tener algo, para no tomar decisiones tan imprudentes.

- y como nadie va a disparar- baje mis armas -deberiamos tomar un trago y pueden plantearme, a donde planean que desaparezca, los detalles y demás-opte por una solución diplomática.

Disperse el círculo para llegar a la barra, todos se veían muy sorprendidos, tardaron un tiempo en comenzar a volver a lo que hacían antes, Antón se sentó a mi lado.

-estoy feliz con que aceptaras mi propuesta- era una mentira, pero si era demasiado intrépida podía morir- sería una lastima matarte-

El cártel no iba a perdonarme la vida.

Pero tampoco se los pondría tan sencillo, mis padres no habían criado una idiota, así que debía resistir mientras las cosas se nivelan, mi hermano estaba de pie a mi lado, su arma estaba en su mano, lista para asesinar a quien nos amenazara.

¿Alex y mis padres estarán a salvo?

-¿Porque mandaste a matarme en la escuela?-
-Nadie hablo de matarte-
-Yo se lo que escuche-

Me dio una mirada que solo se le daría a una niña.

-Debes practicar tu español, claramente no dijo matar-

No me gustaba que me tratará de aquella forma condescendiente.

-Suponiendo que sea cierto, ¿porque?-

Su expresión adquirió muchos matices, de veía molesto, triste y ¿Decepcionado?

-Era necesario que nos acompañaras, y ciertamente no fue mi idea-

En nuestra estratégica amistad, habían habido muchas cosas, pero nunca terceras intenciones, no permitamos que más personas se entrometieran entre nosotros, si debíamos arreglar las cosas a golpes lo hacíamos, pero era cosa de un para de minutos solamente.

Había algo que no estaba bien.

-¿Quién es ella?- debía ser una mujer, para meterse en su mente y mezclar sus lealtades, el era un pilar del círculo, era imposible que alguien lo hiciera cambiar de opinión o hiciera cosas sin su autorización.

¿Sería parte del cártel de Juárez? Lo estarían presionando para que los ayudará, sabía que en las calles la guerra por el dominio de la zona eran duras, ¿Pero venderse por que? ¿Por más dinero? ¿Por un mejor puesto? Si Itzae sabía que me habían hecho algo lo lamentaría con su vida.

Eso me recordó que había olvidado mi móvil en el auto.

Hice un gesto para que mi hermano se acercara, hablé directamente en su oído para que fuera por mi móvil, y revisara como iba nuestro plan de huida, si es que aún existía, esa explosión era demasiado peligrosa.

Sabía cómo debía verse, cuando mi hermano se puso delante mío para que le hablara, debía sentir que estaba justo por hacer una jugada, pero le di una sonrisa de comercial dental, el ruso se situó a mi lado respaldandome.