Mafia |EDITANDO|

~Capítulo 18~ Una bala

Me recoste en la cama hospitalaria de Charlie y compartí una mirada con él, había demasiadas cosas para decir, pero no sabíamos cuándo sería el momento adecuado y aún más importante cómo se lo tomaría nuestro hermano, Alex nos miraba cerca al marco de la puerta, con cara de pocos amigos, esperando las explicaciones que merecía, las líneas de cansancio ya se marcaban en su cara pese a que era aún muy temprano, debió envejecer unos cuantos años por el susto que habíamos vivido.

Esta sería una larga noche.

-Cuando descubrí que Charlotte dormía con el italiano, perdí un poco la cabeza, lo sabes- se aventuró a verlo y su conexión como gemelos lo hizo bajar de nuevo su cabeza-entonces armamos una escena en los dormitorios intentando traerla a casa, tuvimos una pelea y cuando estábamos en el auto, comenzamos a bromear, me conoces hermano, no puedo mantener la molestia mucho tiempo- su mirada se veía triste y me sentía culpable por lo que pasó- el auto salió de la nada, venía justo hacia nosotros, y fue tonto, tuvimos que chocar contra un árbol, el auto quedó destruido, solo tenemos unos cuantos raspones-

-Claro- hizo una pausa antes de hablar-¿Porque tu estas en una cama de hospital entonces y no fuiste a la escuela?- demasiado perspicaz mi hermanito Alex, Charlie me envio una mirada nerviosa, pude ver como sus mejillas se ponian rojas, se veia adorable, no podia solo exponer que ambos eran unas gallinas.

-Al principio solo estaba inconsciente por el accidente, luego cuando llegamos aquí estaba bien, pero cuando comenzaron el proceso de desinfección de sus heridas- mire hacia el suelo-no pudo soportarlo, así que le aplicaron unos somníferos y relajantes musculares para que pudiera descansar-

Una risa inundo la habitación, Alex entendió que Charlie era efectivamente un cobarde.

-No te rias-intento sonar serio, pero estaba apunto de reír, levantó un poco su cabello dejando ver unos puntos ocultos- me cogieron varios puntos y duele como el fregado- eso hizo a su gemelo reir mas fuerte, tomo asiento en una silla junto a la cama donde antes estaba un guardia-desperté cerca de las once, como ya no tenía sentido ir a la escuela, decidí pasar el tiempo viendo algo de televisión, y los rusos me entretuvieron-

-Deacuerdo, de acuerdo, pero eso no explica porque me mintieron a mi- esta vez ambos gemelos me miraban con interés.

-Bien-dije con algo de fastidio-antes que cayera inconsciente Charlie, hablamos sobre decírselo a los demás, y decidimos que contárselo a nuestros padres no era un opción, no queríamos que pasaran de nuevo por lo de Noah-todos asentimos- no pude decírtelo, porque no eres buen actor, la idea era mantener un perfil alto, y te abrias saltado todo por ir por Charlie, así que estaba esperando poder llevarlo a casa en la tarde, así hablar todos juntos-

Nuestro hermano más noble y hogareño nos miró ceñudamente, no estaba feliz con que lo hubiéramos excluido de esta información, pero pareció pensarlo viendo a su gemelo tambien,al final adquirio una expresión de resignación, él tampoco podría permanecer molesto mucho tiempo.

-Sois unos idiotas- reímos aliviados- la próxima vez que me dejen fuera cabrones, no les perdonaré nada, ¿entendieron?- dimos un asentimiento y la risa se apoderó de todos en la habitación.

Un ruido de los guardias, hizo que Alex y yo nos pusiéramos nerviosos, había que recordar que Dimka aun no aparecia, Antón estaba esperándome y Itzae aun no me daba una respuesta.

-¿Quien me va a decir qué pasa?- exclamó charlie a media risa de ver nuestras caras pálidas.

Cuando Alex me dio una mirada cómplice, buscaba que yo confronta a Charlie, pero no era capaz de tal cosa, me daba miedo pensar cómo podía reaccionar, él era tan volátil y en este momento se necesitan nervios de acero, para no resultar muerto, negué con la cabeza, pero este gesto no se le pasó a mi hermano, el cual volvió a exigirnos una explicación.