Capítulo 6

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Liam

Podía sentir sus pechos pegados a mi cuerpo. Me estaba retando de nuevo. Mierda.

Pestañeó un par de veces sus grandes ojos verdes, luego se puso de puntillas hasta rozar el lóbulo de mi oreja con sus carnosos labios.

- Pues no debe hacerlo tan bien, Reeds.- Se burló antes de alejarse con una gran sonrisa en sus labios.

Había conseguido enfadarme. La cogí de las muñecas y las sujeté contra la pared, sobre su cabeza. Pegué mi cadera a la suya y vi como sus pupilas se dilataban y su respiración se entrecortaba. Genial, esta era la respuesta que estaba buscando y me excitaba sobremanera ver como me miraba. La notaba ansiosa, estaba ansiosa por mí. Me reí de ella, como si me resultara patética y no me hubiera excitado tanto.

- Ya quisieras tú poder comprobarlo.- Susurré demasiado cerca de sus labios antes de alejarme.

Esperaba que se fuera hecha una furia, pateando fuerte por todo el pabellón como la cría que era, pero simplemente me dedicó una sonrisa de medio lado y se fue con su paso lento.

No sabía cómo había conseguido envolverme en su juego, pero llegaba a ponerme demasiado esa niñata. No parecía para nada una cría, tenía un cuerpo de mujer que conseguía sacar el hombre primitivo que llevaba dentro. ¿Qué diablos había hecho?

Después me iréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora