1. Suspenso.

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Voy saliendo de la universidad

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Voy saliendo de la universidad. Es bastante pequeña con mucho sacrificio las personas del pueblo la lograron hacer para que los hijos de los campesinos como yo, tuviéramos la oportunidad de estudiar.

Es mi primer año de Diseño Gráfico. Amo dibujar, es mi pasión. Desde pequeña me recuerdo haciendo trazos en muchos de mis cuadernos. La mayor parte del tiempo mientras estudiaba mi secundaria me dedicaba hacer dibujos en plena explicación de clase. Me aburrí de ir a parar a la dirección.

Recuerdo que un día de tantos mi maestra de Biología Rose, estaba explicando una clase sobre las bacterias y yo en vez de prestar atención me dediqué a dibujarla mientras explicaba. El dibujo fue una verdadera maravilla, a pesar de que mi docente quedó encantada con él, termine yendo a la dirección y fue otro llamado de atención más a mis padres quienes estaban consientes de mi talento y nunca me privaron de él.

De lo poco que me daban para comer en mi receso me dedicaba a guardarlos y muchas veces aguantar el hambre con tal de ahorrar para comprar lápices para dibujar. De sus lavadas y planchadas mi madre también me daba para comprar hojas y cuadernos.

Muchos de mis compañeros a veces me ponían a realizar dibujos para sus novias o las chicas que les interesaban. Nunca les cobré, eran igual de pobres que yo, y sería una estafa cobrar por un dibujo que se que no van a poder pagar. Así que solo pedía los materiales.

Fue entonces cuando descubrí que yo había nacido para dibujar mi arte.

Me encontraba interesada en un chico de la universidad que estoy segura no se había dado cuenta de mi existencia. Me gustaba mucho su forma de ser, aunque nunca me había acercado a él.. pues mis padres siempre decian; "Aisha tienes que prepararte primero, el amor llegará después" así que me había clavado tanto eso en la mente que mis intenciones no eran mostrarle lo que sentía.

Camino a casa el cielo empieza ponerse oscuro, va a llover pienso mientras volteó a ver a mis zapatos que había pintado con chinola pues ya estaban bastante gastados y rotos de algunas partes. Si llueve el color se saldrá y me manchara toda. Tengo que darme prisa,
—me digo mientras acelero el paso—.

Me encuentro a una cuadra de mi casa cuando me percato de una preciosa camioneta 4x4 y dos más parqueadas frente a mi casa. Inmediatamente pienso que debe de ser el señor Robert Becker —jefe de mi padre— es un señor bastante serio, me provoca miedo, se ve bien malo, pero le debo estar agradecida pues le presto el dinero a mi padre para que pudiéramos salvar la vida de Zac —mi hermano menor— acelero un poco más el paso y abro la puerta.

Vaya susto el que llevo esta el señor Robert frente a mi padre, madre y mis dos hermanos quienes se encuentran incados ante él y cuatro de sus guardaespaldas les están apuntando en la sien.

Dios mío, que esta pasando aquí señor Robert porque le están apuntando a mi familia?.

Bienvenida —expresa en tono sarcástico— la que faltaba incate tu también. Ya tengo a la familia completa tal y como quería.

—no entiendo absolutamente nada—.

—Uno de sus guardas me empuja y me tira al suelo—.

—mi padre grita y suplica entre lágrimas—.
Señor por favor no lastime a mi familia, tomeme a mi.

Ahora si suplicas?. Te dije que no te iba a dar esa cantidad de dinero y que hiciste?.

—interrumpo—.
De que habla padre? Tu dijiste que el dinero te lo había prestado.

Y encima le mentiste a tu familia Jhon.
—expresa Don Robert—.

Mi madre y hermanos lloran a más no poder yo me encuentro demasiado asustada sin embargo me impongo y no me dejo vencer por el temor de morir o de que lastimen a las personas que más amo y a lo único que tengo en la vida verdaderamente valioso.

Si usted nos hace algo las personas de este pueblo ya vieron su camioneta y van a ser testigos de que es el responsable de este crimen.

—Don Robert se burla—.

Aisha hija mía no digas nada calla.
—Suplica mi padre—.

No seas ingenua Aisha, ojalá lo que tienes de linda no lo tuvieras de ingenua. La ley aquí soy yo, y nadie de este pueblo dira una sola palabra.

¿Quién quiere morir primero? —pregunta—.

Señor por favor no, yo le pago con trabajo, mi esposa también con trabajo, pero no les haga daño. El dinero lo tomé por una gran necesidad. Patrón discúlpeme. —vuelve a suplicar mi padre—.

La deslealtad no se perdona John, a menos de que tengas algo más que ofrecer.
—desvia su mirada hacia mi—.

Señor juro por Dios que le pagaré todo.

Ay por favor eres un pobre hombre ni con tu vida te alcanzaría para pagar.

¿Quien quiere morir primero?. —vuelve a insistir con la misma pregunta—.

Señor tenga piedad.
—expreso con una lagrima en mis ojos—.

Bien John hagamos un trato.

Que trato señor?.

Tu hija a cambio de la vida de ustedes cuatro.

No señor, mi hija? A penas cumplió 17 años es solo una niña. Tome mi vida a cambio de la de ellos.

—Desenfunda su arma—.

Tu hija o nada.

—mi padre me queda viendo—.

Si yo me voy con usted, perdona a mi padre y se salda la deuda?. —pregunto—.

Si, así es. Tienes mi palabra Aisha.

No hija. —grita mi madre entre lamentos—.

No Aisha. —expresa mi padre—.

—me quedo callada unos segundos—.

Don Robert Interrumpe;

Estoy perdiendo el tiempo aquí. Tienen 10 segundos para elegir. O su hija o morir los cinco...

 O su hija o morir los cinco

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Completamente Tuya.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora