–No... bueno si, lo intenté el Sr. Robert me dio un número al que podía llamarla, pero ella nunca me respondió, solo sonó y sonó. Aún guardo el número y durante todo este tiempo le había marcado y nada... hasta que hace un año me di por vencida y dejé de hacerlo.
–¿Qué fue lo que digo el Sr. Robert cuando regresaron de las vacaciones que les dio?.
–Que nos acostumbraramos a la ausencia de la Sra. Que había decidido abandonarlos por irse con un amante.
–Al inicio no lo creí. Bueno no, sabes que? es la fecha y no lo creo. Pero el Sr. Eso nos hizo creer. Y de tanta insistiera de mi parte fue que me dio ese número.
–Susan... me puedes dar el número?.
–Para que lo quieres mi niña? No te va a responder...
–Tu solo damelo, de lo demás me encargo yo.
–Esta bien. Mañana en la mañana te lo llevo a tu habitación.
–Perfecto gracias.
–Bueno. —busca las palomitas y las mete al microondas yo me quedo solo observándola—.
–Susan... una cosa más.
–Si, dime?.
–Por que las cosas del estudio las guardaste tú?.
–El Sr. Las quería votar. Y me dio pesar así que antes de que el entrara por ellas entre yo y las saque escondido. No sé que buscaba... pero el día que entró al estudio por las cosas fue una completa locura tiro todo. E incluso le dio vuelta a todas las cosas de la Sra. Y lo extraño fue que no dejó que lo ayudaramos.
–Y Jeycob no preguntaba por su madre?.
–Casi no, estaba como asustado. Después de que regresamos de las vacaciones el no me dijo ni una sola palabra. Solo los sueños que te conté que tenía.
–Ah entiendo.
–Aisha, por qué tanto interés?.
–Inquietudes Susan, es que no entiendo si amaba a sus hijos no los pudo abandonar. No lo crees?.
–Si, tienes razón. —se queda pensativa—.
–Susan, y como era la relación de la Sra. Jane, con el Sr. Robert?.
–Que te puedo decir; nunca discutían frente a nosotros, es decir el personal. Pero tú sabes bien que soy el ama de llaves de esta casa. Así que en muchas ocasiones cuando subía apagar todas luces escuchaba pleitos y en algunas ocasiones gritos de la Sra. El Sr. No soportaba escuchar llorar a Dominick eso lo estresaba. Así que intuí que por eso eran las discusiones.
–Entonces Jeycob dormía solo?.
–Si, mi niño empezó a dormir solo desde los 5.
–Ah, entiendo. Y esa siempre ha sido la habitación de Jeycob?.
–No,no la habitación de Jeycob era la que está junto a la del Sr Robert. Pero después de que la Sra se fue Jeycob quiso no volver a dormir más ahí porque tenía pesadillas. Y por esa razón se cambió a donde se encuentra ahora, que como puedes notar es muy alejada de la de su padre.
–Si, demasiado alejada. —afirmo—.
Entra Jeycob a la cocina.
–Aisha, Dominick no quiere iniciar la película sin ti. Puedes ir yaaaaa —gruñe—.
–Si vamos. —respondo y camino detrás de él—.
Llegamos a la habitación y nos acostamos en la cómoda y enorme cama de Jeycob a ver la película.
—minutos después, entra Susan con las palomitas, nos las da, junto con las buenas noches y sale de la habitación—.
Mientras vemos la película Dominick tira una que otra broma. A pesar de todo él es el más inocente de lo que está pasando, nada comparado a Jeycob quien esconde algo oscuro y tiene miedo de revelarlo y ese mismo miedo lo está consumiendo. Pienso que si el confiará en alguien y sacara todo lo que lleva dentro el dolor sería menos, y tuviera un hombro en el cual llorar, y sino lo hace pronto se va a terminar ahogando solo
No se como ayudarlo. He tratado de todas las formas posibles de que confíe en mi. Pero dice que si él me llegara a contar yo estaría en peligro. Y eso es lo que menos entiendo. Bueno, y también porque el Sr. Robert me compró para su hijo, si él me menosprecia tanto. No sé que quiere de mi. —analizó mientras los observo detenidamente— se les ve cuanto se aman y se apoyan. Estoy segura de que Jeycob lo daría todo por él y es también por Dominick que no se va de esta casa y lo ha soportado todo.
Horas después...
Dominick se queda dormido y Jeycob también. Apago la TV, el DvD y los cobijo. Voy a mi cama sofá que por cierto Jeycob ya me enseño como se usa. La abro y me acuesto ha sido un día demasiado agitado.Estoy durmiendo de lo más tranquila cuando siento que me están quitando la sábana, pero despacio... entre dormida y despierta me la vuelvo a subir me la habían bajado hasta las piernas ya. Y me muevo. Estaba acostada boca abajo y me pongo un momento boca arriba, pero odio dormir así y nuevamente me muevo para colocarme de lado.
Un par de minutos despues siento un aire helado, tan helado que logra que me aferre más a la sabana. Me entra un hielo en todo el cuerpo que no se como explicar.
Estoy bastante inquieta moviéndome hacia todos los lados. El hielo inmediatamente desaparece, así, de la nada. Y me estoy quedando de nuevo completamente dormida, hasta que nuevamente vuelvo a sentir aquel hielo, pero esta vez no es solo eso...
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Completamente Tuya.
Random¿Estarías dispuesta a sacrificarlo todo, a cambio de salvar la vida de las personas que más amas, incluyendo la tuya? Sin importarte el precio o todo lo que debas de soportar a cambio de su bienestar.