Enamorada del hijo de mi profesora❤Justin Bieber y tú❤

Capítulo 33❤

Narra ____:

Justin me sorprendió bastante, pensé que sería sólo una salida casual con él, pero estando con mis amigos, ésta noche apunta a que va a ser la mejor.

Justin y Ryan entraron con nosotras, sujetándonos de la mano dulcemente. La música estaba retumbando en nuestros oidos, nos adentramos en el lugar y nos fuimos a sentar a una zona dónde estuvieramos más cómodos.

-Bebé, vamos por unos tragos, ahora volvemos-me dijo mi Justin al oido, luego me dio un beso en la mejilla cerca del oido. Mi piel se estremeció, y yo le sonreí nerviosa.

El se fue con Ryan hacia la barra, Leslie y yo nos sentamos, me sonrió, quise platicar con ella, pero con tanto ruido sería imposible.

Paso un rato, estaba con la mirada perdida y Justin no regresaba, Leslie habia ido a dar una vuelta por la pista para ver el ambiente, y yo estaba ahí en el sofá, sola sin nada que hacer. Cuando de pronto siento una respiración cerca de mi oido, sonreí inmediatamente pensando que seria Just, pero esa sonrisa se esfumó, cuanso una mano toco mi hombro, no era quién yo creía.

Volteé tan asustada, mi corazón estaba acelerado, y Justin seguía sin aparecer. Enfrente mio tenia a un joven de más o menos unos 28 años, guapo, con barba y el cabello algo chino y los ojos cafés. El tenía una sonrisa estúpida en el rostro, y yo queriendo que Justin o alguien apareciera en algún momento.

El tipo no estaba tan ebrio, pero igual olia a alcohol, se sentó a lado mio, y yo quería morir en ese momento.

-¿Qué hace una chica tan hermosa aquí solita?-se acercó a mi oido para que pudiera escucharle perfectamente, debido al gran volumen de la música. Sentí su aliento chocando con mi oreja de nuevo, pero esta vez sentí asco.

-¡Déjeme tranquila por favor!-supliqué con nerviosismo.

-Claro que no, ¿cómo te llamas preciosa?

-Por favor, le ruego que me deje en paz.

-Está bien, vamos a hacer una cosa, me iré si me dices tu nombre, si no, no me iré- lo pensé si le decía sólo mi nombre me dejaría tranquila, pero por otro lado, ¿por qué tendría que darle mi nombre a un desconocido?

-Cómo sea, mi novio-remarqué esa palabra, para que funcionara de algo- llegará en cualquier momento.

-Jajaja, ¿novio?-se rió sarcástico- pues al parecer no le importas lo suficiente cómo para dejar a una chava tan linda a la vista de todos los hombres.

Decidí no contestarle, rogando en mi mente que Justin llegara. El tipo se comenzó a acercar más a mi. Quería salir corriendo pero no podía, no tenía fuerzas, me estaba derrumbando por dentro. ¿Por qué maldita sea Justin no llegaba?

-¡¡¿Qué mierda?!!- ¡Gracias Dios! Esa voz, la necesitaba oir- ¿tu quién eres y por qué estás cerca de mi novia maldito?-el tipo ese se rió.

-¿Novia? Por lo qué ella me dijo está aquí sola y no podia desaprovechar una oportunidad cómo ésta-me señaló y me guiñó un ojo.

Cuando menos lo esperé, todo fue tan rápido, parpadeé dos segundos cuando Justin ya tenía al tipo agarrado de la camisa, y estaba golpeándole repetidamente en el rostro, la sangre del tipo escurria por toda su cara y su cuerpo hasta el suelo, su nariz ya estaba rota o eso supongo, y su ojo morado, el resto de su cara ya estaba roja e hinchada de todos los golpes. Se retorcia del dolor del cuerpo, Justin pegaba demasiado fuerte, ni siquiera sabia que golpeara de tal manera, no sabia que asi se ponia cuando se enojaba. Yo quería pararlo, pero todo era inútil mis brazos frágiles no podían detenerlo, en un intento por jalarlo para atrás y que detuviera la pelea, me empujó. Quise mejor alejarme, no quería que con la rabia que traia dentro me lastimara o algo. Ryan quiso intervenir pero igual que yo, no lo lograba, fue entonces que la seguridad del lugar intervino y el tipo ya estaba casi muerto, y no es una exageración. Justin no recibió ningún golpe, fue algo como el boxeador y el saco de boxeo, sabía que él era celoso, pero jamás habiamos llegado a tales extremos.

Finalmente los separaron y Justin traía una cara de enojo que no podía con ella, respiraba pesadamente, gotas de sudor escurrian de su frente y sus nudillos estaban destrozados. Unas inmensas ganas de llorar me invadieron, verlo de esa manera me rompía el corazón, pero aún más verlo herido de sus manos.

Entonces hicimos contacto visual, y vi sus ojos por enésima vez, pero esta ocasión era la primera en que no lo reconocía, no sabía quién era, ¿ese es mi Justin? ¿el Justin del que me enamoré? ¿el romántico que se emociona por qué  combinamos conjuntos de ropa?

No lo reconocía en absoluto, y si, sé que ese tipo estaba de acosador, pero para dejarlo casi muerto, no sabía qué Justin era ese.

A estas alturas mis ojos ya estaban llenos de lágrimas, ya no quise verlo más, vi a Ryan y a Leslie que me miraban con pena.

Salí corriendo a dónde me fuera posible.

Básicamente en mi cabeza sólo rondaba el pensamiento de que talvez había sido muy apresurado ser novia de Justin sin conocerlo realmente...