Enamorada del hijo de mi profesora❤Justin Bieber y tú❤

Capítulo 64❤

Narra ____:

¡Wow! Hace casi un mes que no ando con Justin. No la estaba pasando nada bien, cuando creo que ya lo voy superando, llega alguien y me lo recuerda. En este momento, lo único que quería hacer, era llorar y estar encerrada en mi cuarto, ya no tenía ni el más mínimo interés en ir a la fiesta de Graduación, ya me estaba arrepintiendo, pero no podía hacerle esto a Jake. No ahora, no así.

Ya casi no recordaba a Justin, y eso era bueno o eso supongo, al menos para mi corazón le ayudaba a olvidarlo.

El día que lo vi en la escuela, no se me va a olvidar jamás, siempre voy a recordar cuando tocó mi rostro una última vez, y me dijo "Adiós". No he dormido en la noches recordando lo que sentí con el roce de su piel. Su tacto que siempre me estremecía, que me hacía sentir en las nubes. También jamás olvidaré lo que reflejaba su rostro, sus ojos estaban llorosos, y muy rojos, exteriorizaban una tristeza enorme.

He tratado de hacer mi vida lo más normal posible, pero no lo he logrado, al mínimo recuerdo, las lágrimas salen de mis ojos. Estoy en un momento de mi vida en el que hasta cierto punto ya me había cansado de tanto llorar. Lo cierto es que aunque tratara evitar el llanto, salía involuntariamente. Mi corazón lo sentía roto, me sentía frágil, tan frágil cómo una flor, una flor que alguien puede llegar a arrancar de raíz y pisotearla hasta que esté completamente muerta.

No importaba dónde o cuándo, Justin aparecia en mis sueños, mis pensamientos, lo que lo hacía aún más dificil poder olvidarlo. Creo que hasta cierto punto fue bueno terminar, para no seguirnos encariñando, pero claro, esto no me hacia sentir mejor, de igual forma me dolía.

En el amor no hay instructivo, no hay páginas de libros o páginas de internet que te digan lo qué en verdad tienes que hacer para no sufrir, de eso se trata la vida, de tomar riesgos y lo más importante; caer, para que una segunda vez no se cometan los mismos errores.

Pero cómo siempre he sido diferente; apesar de haber caído una primera vez, volví a enamorarme. Volví a enamorarme, incluso peor que la primera vez. Talvez aunque alguien me lo hubiera advertido, igual no hubiera hecho caso, al fin y al cabo son experiencias.

No me arrepiento de nada, fue bonito, más bien yo diría hermoso. Y no diré nada malo de mi relación con Justin, porque sería mentir. Igual valió la pena, valió cada minuto vivido con él, valió la pena porque mientras estuve a su lado me hizo feliz. Hecho de menos sus caricias, sus tonterías, sus simplezas, sus besos, sus abrazos, su aroma, la forma en que me hacía sentir única, lo hecho de menos a él...a mi Justin.

Pero cómo todo; las cosas tienen un final y parte de madurar es saber que lo dejas ir, tanto por tú bienestar y el de él.

¿Lo quiero? No. Yo lo amo, él fue el único que me hizo sentir especial, me hizo creer en mi misma, en mis virtudes y defectos. Me salvó la vida, y no literalmente, rescató mi corazón del gran golpe que había sufrido antes. Con su cariño me protegió, con sus celos me demostraba que en verdad le importaba. Le agradezco infinitamente que haya cumplido algunos de mis sueños, porque él fue el que me hizo creer en ellos, en que tienes que luchar y creer para que se vuelvan realidad. Recuerdo cada detalle, todos cómo si hubieran sido ayer, desde el olor de su piel, hasta su sonrisa, sus fuertes brazos rodeándome.

Duele que este perdido, pasamos tantas noches desvelándonos, peleándonos por quién amaba más al otro. Es díficil tener que aceptar que esto está perdido y olvidar cómo nos conocimos. Al final duele que la persona que amas no esté contigo, pero mi meta seria no llorar más. Sólo me quedaba desearle lo mejor a Justin, y decirle adiós. No era para mi nada fácil, pero era la única solución que veía. Y es que es ley de vida; las personas que más te aman, son las que más dolor te pueden causar, cuando se suponía que estarían siempre para ti para hacerte feliz.

Esto no significa que me estoy rindiendo, sólo es un ya es suficiente de mi parte. Un ya es suficiente de corazones rotos, un ya es suficiente de tantas lágrimas, un ya es suficiente de sufrir.

Psicológicamente; después de haber sido decepcionado repetidas veces, se comienza a perder la esperanza de todo.

Hay personas que están muy poco tiempo en nuestras vidas, pero dejan una huella imborrable y forman parte de nuestros lindos recuerdos. En esa categoría entraba Justin. De ahora en adelante sólo sería un recuerdo, muy bonito, pero al fin y al cabo, sólo recuerdo.

"La vida es un reto; vívela, siente, ama, ríe, llora, juega, gana, pierde, tropieza. Pero siempre levántate y sigue."

Las cosas cambian, a lo mejor los recuerdos siguen intactos, y ahí seguirán por siempre, pero ya nada volverá a ser igual. Y si, cuesta olvidar y duele, pero los seres humanos somos capaces de enfrentar retos y salir adelante. Mi momento de enfrentar el mio, había llegado.