Encontrando el amor (Mario x Rosalina)

El héroe y la princesa

Mario y Geno terminaron sus turnos y regresaron a su hogar, el cual era una enorme mansión que quedaba fuera de la ciudad central. Vivian allí junto a su tutor, maestro, y a veces irritable padre: Polari. Él los habia tomado bajo su tutela cuando sus padres murieron debido a viejas heridas. Mario y Geno no eran los únicos a los que Polari entrenaba, pues él se encargaba de entrenar a todos los hijos de las estrellas que posean magia. Además, es la mano derecha del rey.

Mario (entrando) : ¡Polari, ya llegamos!

Geno : Conociendo al viejo, seguro esta dormido en su habitación.

Mario : Tal vez, pero nunca esta de más avisar.

Geno : Como sea, vamos a la cocina, muero de hambre.

Mario : ¿Como es posible que tengas el apetito de un yoshi?

Geno : No lo sé, a lo mejor esa es mi habilidad mágica.

Mario (sonriendo) : Ya quisieras.

Ambos entraron a la sala, por la que tenían que pasar si querian llegar a la cocina, y allí se toparon con una chica sentada en uno de los sillones. Al verlos entrar, ella se paró y caminó hacia ellos. Sostenía un pañuelo ensima de su nariz e iba con la cabeza levantada.

Lana (adolorida y aliviada) : ¡Chicos, llegaron!

Mario (fingiendo alegría) : Hey, Lana ... que tal.

Geno : Genial, y yo que pensaba tener una tarde tranquila y me encuentro contigo (Mario le da un codazo) ¡Auuu!

Lana (triste) : ¿Porque siempre eres tan rudo conmigo Geno?

Geno : Respuesta corta, no me agradas. Respuesta larga, no me pinches agradas. Y por cierto ¿que te paso en la cara? ¿Al fin alguien decidió partirte la cara por lo castrosa y engreida que eres?

Mario (aguantando la risa) : Geno, eso no fue nada cortes, pero aún así ¿que te pasó? (Le sostiene la cara) ¿Estuviste en una pelea con un luchador profesional? Porque te dio una paliza y eso que solo es un golpe.

Mario removió el pañuelo de su cara y la hizo sentarse, sentandose a la par de ella.

Lana : No, me tropece cuando iba en la calle.

Mario : No, no lo hiciste. Reconozco un puñetazo cuando lo veo, el daño esta demasiado concentrado y si te hubieras caído tendrias raspones en algun otro lado de tu cuerpo, los cuales no tienes.

Geno : Tranquila princesa, no vamos a juzgarte por no saber pelear.

Lana : ¡Ugh! Esta bien, sí, me pelee con alguien ... pero que más da.

Mario : Pues que no deberías pelearte con nadie, seras reina muy pronto y debes saber solucionar las cosas con el dialogo.

Mario colocó sus manos sobre su nariz y esta se arregló después de un breve destello de luz. Lana pudo bajar el rostro y vio a Mario de forma pícara.

Lana : Tienes razón, dentro de dos años sere reina ... y tu seras mi rey.

Lana se inclinó para besar a Mario en los labios, pero él puso su mano en los labios de ella y comenzó a alejarla poco a poco.

Mario : Eso aún no pasa.

Lana : Oh vamos Mario, estamos comprometidos, vamos a casarnos cuando cumpla 18 ¿porque te sigues negando a besarme?

Mario : Porque aún no me siento capaz de tener una relación formal con alguien, y fueron Polari y tu padre quienes hicieron los arreglos, no yo.