"Ya no soy su luna"

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- Entonces le conté a Irina sobre tu idea e inmediatamente quiso participar e incluso me ayudó a reclutar a otras personas dispuestas a ayudar

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- Entonces le conté a Irina sobre tu idea e inmediatamente quiso participar e incluso me ayudó a reclutar a otras personas dispuestas a ayudar...

     Debo admitir que solo le estaba prestando una vaga atención a lo que me estaba diciendo Ann, mi mente se encontraba un poco dispersa, lo cuál no era tan inusual en mí.

- Me podrías repetir eso último por favor – bufó rodando los ojos.

- Cuándo dejarás de ser tan despistada – no lo tome como una verdadera pregunta – Irina reclutó gente para ayudar con tu idea del refugio.

- Eso es increíble – murmuré mirando por el gran ventanal de la biblioteca.

- Pero por favor no te emociones tanto – dijo con un notable sarcasmo – ¿Qué tienes, Lotte?

     Dejé salir un largo suspiro sin apartar la vista de afuera, ni siquiera yo sabía que era lo que tenía.

     Decidí no responder a su pregunta pero no como un gesto caprichoso sino que así indagara en mis emociones no podía describir bien mi estado actual.

- ¿Cómo es el refugio? – pregunté de repente volteandome a verla – ¿Es acogedor?

- Es tan acogedor como un refugio lo puede ser – me alegré de que dejará de un lado la pregunta que me hizo, Ann era una de las pocas personas que me entendía y sabía muy bien cuando insistir y cuando no.

- Eso significa que no es acogedor – asintió – Pues eso es lo primero en lo que trabajaremos, aparte de hacer un inventario sobre las provisiones y reabastecerlo con lo que haga falta.

- ¿Por qué quieres remodelar el refugio?

- Allí vivirán niños, Ann. Y aunque no vaya a ser de una forma permanente lo mejor es hacer su estancia más llevadera, ya tuvieron bastante con todo el susto del ataque y después ver el lugar donde están creciendo casi en ruinas – sentía una gran empatía hacia todos ellos.

     Digamos que básicamente me recordó al deterioro que atraviesa Venezuela incrementándose cada año más, obligando a muchos –incluyéndome– a dejar su casa.

     Me dirigí hacia la salida de la biblioteca con Ann siguiendome de cerca.

- No podemos perder más tiempo – aclaré – El tiempo es valioso y no queremos que algo valioso se pierda.

     Dejé atrás la desolación que me abrumaba cada vez más, ya había tomado mis medicamentos y aunque me hiciera la tonta e intentara ignorarlo sabía que ese sentimiento tenía que ver con el altercado que tuve ayer con Zac.

- Comunícate con Irina y dile que quiero a todas las personas dispuestas a ayudar reunidos en el patio delantero en una hora – antes de empezar con la renovación tenía que hacer una cosa.

- Comunícate con Irina y dile que quiero a todas las personas dispuestas a ayudar reunidos en el patio delantero en una hora – antes de empezar con la renovación tenía que hacer una cosa

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