Muerte en vida

Peso

Una semana antes de Navidad.

-Peridot: No me gusta Navidad.- dijo con pesadez.

-Larimar: Pero es bonito, las luces, la comida, el incienso, la música,...la comida.- dijo muy alegre.

-Lapis: Sabes que a tu papá no le gusta, aún así hace su mayor esfuerzo para pasarla bien en familia.

-Turquesa: Muchas personas se sienten tristes en fechas así por diversas razones.

-Lapis: Es verdad, por lo menos a mí me gusta ya que la pasamos juntos, además es el primer año con Esfena.- dijo haciendo que la pequeña quisiera saltar con alegría.

-Peridot: Nooo, me duele el bolsillo todas las navidades.- se volvió a quejar.

-Lapis: No decías eso cuando eran niños, así que no te quejes.- defendió.

Iban paseando por el centro de la ciudad para no hacer las compras a tan último momento.

-Turquesa: Papá, ¿La tía Ópalo?

-Peridot: Con los abuelos y su saliente.

-Lapis: Me sorprende bastante.

-Peridot: A mí igual, nunca me la imaginé con alguien, pero bueno, es su vida.

-Larimar: Al igual que tía Romina y tío Julián, solo bromeaba pero esos dos se traen algo desde hace tiempo.- sonrió.

-Peridot: Son parecidos en cierto aspecto, creo que estarían bien juntos.

-Lapis: Estoy de acuerdo.

El resto de la tarde se la pasaron comprando adornos puesto que los anteriores se estropearon, incluso hubo un pequeño corto circuito que casi provoca un incendio.

Una semana antes de Navidad.

-Julian: Todo está en orden, se encargaron de algunas promociones y la ambientación.

-Peridot: Eso es bueno, supe que incluso aumentó la cantidad de visitantes.

-Julian: Así es, fue buena idea la de las mascotas, aunque eso requirió de mayor inversión.

-Peridot: Es bueno que esté en orden, a pensar de una cuantas quejas.

-Julian: ¿No viajarás para fiestas navideñas? Solíamos hacerlo antes.

-Peridot: No creo, los chicos prefieren quedarse, quizá después visite a mis padres y a los de Lapis.

-Julián: Buen plan, buen plan.- dijo tranquilo.

-Peridot: En fin, debemos hablar.- dijo dirigiéndose a la oficina de Julián.

Él entendió y lo siguió.

En Navidad pasaron muchas cosas, algunas cosas quemadas, la comida quemada, corto circuito nuevamente...

-Peridot: Que...

-Lapis: No lo digas, es tentar al destino.- dijo más como una amenaza.

-Turquesa: Aquí está, el delivery llegó, aún está caliente.- dijo llevando una caja en manos.

-Larimar: Y Peridot decía que no debía poner una mesa y toldo.- dijo para luego traer platos.

Lapis y Peridot colocaron todo lo necesario en la mesa y se sentaron a ver los fuegos artificiales.

-Peridot: Saben.- dijo deteniéndose al comer.- creo que es costumbre para nosotros que pase esto, el próximo año no hay que pedir nada, a último momento hay que pedir delivery, bueno, una hora antes de las 12 para que el repartidor pase en casa.