WO | ❝Oh, cariño, yo me vuelvo salvaje cuando estoy contigo.❞
Dónde Naga llega a Beacon Hills junto a la manada de alfas, en busca de un nuevo miembro. Aunque era Deucalion él que lo buscaba, él por su parte, había llegado al pueblo sin mucha...
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¿DECUALION SIENDO FELIZ? NAGA JAMÁS HABÍA VISTO ESO, lo único más cercano que vio a eso fue la satisfacción en su rostro cuando le arrancó la garganta a su alfa con los dientes a los catorce, después de previamente ser ayudado por Kali y Ennis a acabar con el resto de la manada de Balto; y sus ojos se tornaron de rojo rubí que avivo la sangre tibia en sus colmillos.
Podía parecer un cuento de terror, pero esos eran de los mejores recuerdos que tenía. Aunque fueran tétricos. Deucalion había sido el único que se había preocupado por él cuando quedo huérfano, así que no sólo se sentía unido a él por una deuda, sin por lazos más fuertes.
Como el de un padre y un hijo. Así era el de un alfa con su beta.
— ¿Dónde la encontraron? — Deucalion les había hecho un interrogatorio cuando le mostraron a Cora Hale.
— Estaba en la Clínica Animal hablando con Deaton — Naga respondió — Buscando información de la manada de su hermano. Al parecer no tiene idea de que Derek es el alfa, ya que sólo vino por escuchar que había un alfa Hale.
—¿Con qué buscas un alfa?
Cora le gruñó a Deucalion cuando este intentó tocar su cabello, pero Kali la reprendió encajando sus garras al tomarla bruscamente de la cara, Naga entrecerró sus ojos y elevó su barbilla en silencio. No era bueno molestar a la mujer lobo, pues poseía garras más grandes en manos y pies que cualquiera que hubiera visto antes, eran tan letales, que un rasguño suyo fácilmente podría rasgar la garganta hasta el hueso.
— Busco a mi familia — Cora logró decir con dificultad, pero el pelinegro podía percibir su furia en cada letra.
— Todos nosotros somos tu familia. La manada está sobrevalorada — Deucalion le aseguro, haciendo que más de uno de sus alfas frunciera su ceño ante el último comentario, incluyendo Naga; pues él siempre replanteaba el hecho de que una manada unida era eficiente y mortal en sus ataques, por eso el lobo es solidario.
Deucalion no necesito demasiado tiempo para decidir el destino de Cora.
— Enciérrenla con los otros — Ordenó restándole importancia, puesto que el Lobo Demonio ya tenía sus planes para ella, aunque serían la sorpresa a revelar para Derek.
Naga recordaba como supervisó a Ethan entrando a la bóveda con él, para evitar que Erica o Boyd trataran de atacarlo. Las rondas de vigilancia desde entonces seguían como siempre, aunque de vez en cuando, Naga cerraba los ojos y volvía a recordar los cálidos orbes verdes de esa pelirroja que había salvado en la calle, parecía tener un aura diferente. Casi podía decir que no humana.
Nunca había tenido tiempo para "cosas normales de adolescentes." Se excusaba con el hecho de que no era normal, así que no tenía que pensar en relaciones, amigos o la escuela; pero a veces, hablando con Ethan y Aiden, sobre cómo era sus vidas antes de la mordida, le hacía replantarse todo lo que había pensado e incluso, por minutos tenía la decidida idea de salir a otros lugares del condado que no fueran la reserva.
