#23

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Un grito hace despertarme al instante, Lara quien esta viendo al parecer un grupo de chicos asiaticos, Ay no, aquí comenzamos.

-CAUSE I' I' I'M START TONIGHT, SO WATCH ME BRING THE FIRE AND SET THE NIGHT ALIGHT  .- canta, mientras una yo somnolienta la mira como bicho raro, ella y sus coreanos.

-Ya dejame dormir.- dije agarrando una almohada y volviendo a tratar de conciliar el sueño.

-Claro que no son las diez y media, ¿Piensas llegar cuando termine el pachangon?.- Siento como me jala de los pies y me tira al piso.- ¡PUTA! ¡YA!, YA, Ya.- trataba de calmarme y evitar mi caída pero fué en vano ya que, pues me caí y que más, lo bueno es que no me dolió tanto por la alfombra. Dios te bendiga querida ojalá y encuentras a tu alfombrón ideal.

-Elije uno de los que te preparé y alistate, yo me cambiaré en el baño.- mientras se dirige al baño de mi cuarto, miro los tres vestidos colgados en mi armario.

El primero el rosa antes mencionado, seguido del blanco ya también anteriormente mencionado y uno nuevo que me llama la atención uno color rojo su tela es de terciopelo, sin pensarlo dos veces escojo el último y elijo unos tacones que convienen.

Lara sale con un vestido al igual que mi, rojo y me sorprendo por el mismo gusto que tuvimos las dos en elección de color. Al verme la comisura de sus labios de elevan drásticamente.

-Sabía que lo elijirías.- mientras camina para ajustar mi vestido tal y como una madre lo haría.- no entiendo como siempre pensamos lo mismo, listo mirate.-

El vestido era pegado, hasta la mitad del muslo, la espalda es descubierta, adelante en la parte del pecho estaba mayormente cubierta las partes intimas por cintas, se ven mis atributos de manera sutil, no es exagerado, pero tampoco algo como para salir a una cena familiar.

Al contrario de Lara, Este era algo volado sin exagerar, y un poco más arriba que el mío, es de manga larga. Su escote era una V bastante pronunciada y abierta, sin dejar a la imaginación tan libre, en la espalda lo mismo solo que al final para no mostrar tanto en la parte de atrá, estaba amarrado solo al final.

-Amiga soy una mierda para el maquillaje sabes que esto siempre lo dejo es tus manos.- digo mientras trato de adivinar que cosa es para cada lugar del rostro.

-Con razón no encontraba todo mi maquillaje si aquí lo tienes.- dice ordenando todo para tener un mejor panorama de los objetos.- tranquila que con costo se ponerme el labial.- mientras nos reimos, Lara comienza a aplicarme todo, menos base, sabe que la odio.

Solo miro como mueve sus manos y siento como si mi rostro fuera un cuadro y es ella quien lo esta pintando.

Luego de varios minutos ella termina el mió y comienza con mi pelo, no tarda tanto ya que mi pelo es naturalmente ondulado (aunque no tanto).

-Listo, ahora solo esperame un momento.- dijo mientra ella comenzaba rápidamente a arreglarse, quisiera saberme arreglar para evitarle ese trabajo. Lo que callamos las inservibles.

Mientras tanto yo busco nuestros bolsos y meto cosas importantes como dinero, toallas humedad, y medicina.

-Ni si quiera te has visto.- cierto, me acerco al espejo y que pasada, sin dudas Lara debería de dedicarse a ser maquilladora es  tán buena y uno aquí que con costo se sabe vestir.

Mis labios se ven más grandes y están adornados con un labial nute, mis ojos son los que más llaman la atención, traigo algún tipo de transición desde el lagrimal  y el resto de la cuenca que ni siquiera me gustaría imaginar como hizo eso, este comienza con dorado y termina en un rojo no tan fuerte para la vista, mis ojos traen un delineado no tan simple, pero tampoco algo llamativo tal y como me gusta, mis pestañas más largas y con volumen, mis cejas retocadas un poco, junto con el iluminador y el bronceador, Estoy alegre de no haberme negado al humectante, aún con la variedad de productos en mi rostro se siente suave.

Utilizando a mi mejor amigo gayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora