CAPITULO 35
Había otro reality en el televisor de la salita.
Este iba solo de un grupo de personas conviviendo, Eric no entendía como demonios alguien podía tener tiempo solo para ver a un grupo de personas siendo personas.
Él a veces no tenía tiempo para ver su propia vida menos la de un grupo de desconocidos por Tv.
Bastante tenía con la mierda de vida de sus pacientes, eso era algo así como un show en vivo todos los días con muchas lágrimas e historias de vida de mierda de por medio.
Sí, Eric adoraba su trabajo.
De cualquier forma odiaba los malditos realitys. Eran de esas mierdas que siempre había odiado, eso y los jodidos programas de chismes.
¿Qué demonios le importaba a él quien salía con Camila cabello?
Pero su estrellita, AMABA esas mierdas, de verdad, y parecía tener una afición insana por los reality shows, vamos que había encontrado este en un jodido canal australiano y ahora veían como un tipo llamado Tom hacía un sándwich.
Solo eso, un jodido sándwich, untar un pan con mantequilla.
¿Y quién demonios era ese Tom?
¿Y por qué Jesse lo veía con tanto interés?
Si se lo preguntaban a él, Tom el australiano un acedor Master cheff en sandwichs de mantequilla ni siquiera era guapo.
Pero para el poli parecía ser el tipo más impresionante del planeta, vamos, que sus bonitos y amplios ojos verdes observaban la pantalla como si fuera lo más interesante que hubiera pasado en los últimos 200 años.
Eric se limitaba a observar a Jesse, estaba desarrollando una afición extraña por observarlo.
Parte de Él aún estaba esperando el momento en el que el chico reaccionara y saliera huyendo diciéndole que aquello era mucho para él.
Que él era un cabron demasiado intenso en el mejor de los casos.
Pero Jesse…
Jesse seguía ahí, como si nada.
La mente de Jesse funcionaba de una manera extraña incluso para él.
Fascinante, quedaba corto, Jesse podía darle un día de campo a cualquier psiquiatra.
Se habían cambiado después de compartir una corta ducha en la que Eric se encargó de limpiar con cuidado las partes donde la piel de Jess se había cortado.
Después de que el rubio le prestará algo de ropa limpia habían pedido piza para cenar con el niño, que gracias al cielo se había mantenido en su cuarto entretenido mientras jugaba con el teléfono de Eric.
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El legado de Caín (GAY +18)
Teen FictionEric McGraw lo tiene todo, una carrera exitosa, dinero, y un legado de estrechas relaciones con el narcotrafico. Jesse Rogers, es el detective a cargo del caso, recién salido de la academia vive con un solo objetivo en mente: limpiar el nombre...