Kamaria es una hábil cazadora de nivel dos, la cual entrena diariamente para devolverle el favor a aquellos que la salvaron. Con este mismo fin, se interna en una misión suicida para salvar a su mejor amigo. Deja su vida con tal de que él pueda esca...
El Alpha de la manada es aquel que se encuentra a cargo de la misma. Sin embargo, por respeto y estatus, los antiguos Alphas y Lunas siguen siendo llamados por el mismo titulo. En cuanto a las hembras, son Alphas aquellas cuyo poder recae en sus manos. Una vez con su mate, si es hombre, ella pasa a ser la Luna; en el caso de ser otra mujer, continua con el titulo de Alpha.
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╔═══════════╗ ║ Ｋａｍａｒｉａ ║ ╚═══════════╝
Alexei abrió mi puerta y extendió su mano para ayudarme a bajar del coche. La tome y me removí incomoda al sentir el ambiente lobuno en el que estaba a punto de introducirme. Estaba por entrar a la verdadera boca del lobo...
El morocho había intentado tranquilizarme diciendo que no tenía porque preocuparme, pero estando a escasos pasos de una sala repleta de Alphas, me encontraba muy preocupada.
Alexei colocó una de sus manos en mi cintura y comenzamos el camino hacia el recinto mientras me repetía que en el momento que quisiera irme, lo haríamos. Los guardias a cada uno de los extremos de la entrada hicieron una breve reverencia y me miraron de reojo. Mantuve mi rostro sin expresión y caminé junto con el Alpha de manera confiada. Estaba que moría de nervios, sin embargo, me negaba a mostrarme débil frente a todos esos lobos.
Una joven hizo una leve reverencia y dijo que nos llevaría a la sala donde se realizaba la fiesta. Cuando nos íbamos acercando a la gran puerta de roble se lograba escuchar el gran bullicio de gente, junto un fuerte olor a lobo que inundó mis fosas nasales. Evite hacer una mueca y Alexei dio un suave apretón en mi cintura. Lo mire y él realizó una suave sonrisa en mi dirección antes de volver la vista al frente de manera seria.
El morocho me había explicado que odiaba estas fiestas, puesto que siendo una manada poderosa muchos se acercaban por interés. Sin embargo, como Alpha, había cosas que debía hacer para mantener el respeto y la paz entre las manadas.
El acercamiento por interés no era lo que me preocupaba, el que me creyeran hija de la luna y estuvieran dispuestos a asesinarme, sí.
—... y su luna, Begonia Hunt. —Fruncí el ceño al escuchar al presentador desde el otro lado de la puerta. Hunt... ¿De donde me sonaba?
— Alpha Alexei. —Una mujer de al menos veinticinco años hizo una leve reverencia y nos miró seriamente. Se encontraba vestida con un traje del cual colgaba una tarjeta que marcaba su puesto de trabajo como una de las organizadoras. —Debo de admitir que pensábamos que no vendrían. Necesitaria el nombre de su acompañante para la presentac...
— No quiero presentación. —Mi voz sonó dura, a pesar de que los nervios no se iban de mi interior. Como cazadora, iba a morir con la frente en alto si fuese necesario. Me negaba a realizar esa extravagante presentación. La razón principal era la negativa a dar mi nombre completo.
