Las nagas son serpientes semidivinas hindúes con torso y cara humana, generalmente de mujer. Son seres de sangre fría que poseen bonitas escamas, ojos grandes y brillantes, casi luminiscentes, y miden entre 3 y 6 metros. Tienen un gran encanto, cualidad que las hace muy poderosas sin necesidad de recurrir a la violencia. Son enormemente inteligentes, sabias y pacientes. Las nagas acuáticas son neutrales, por lo que rara vez atacan, a no ser que se vean amenazadas.
~IMAGEN CON FINES ILUSTRATIVOS~
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║ Kamaria ║
╚═══════════╝Sin dejar de correr, llegue a la cascada de la que me había tirado en uno de mis intentos de escape. Me detuve en seco al pensar en esos ojos azules, y más al escuchar una rama partirse a mis espaldas.
Note como detrás de la cascada había una especie de caverna, y sin pensarlo, me adentre en busca de un refugio. Aguante mi respiración mientras intentaba ver a través del agua, sin embargo, no se podía observar nada por el movimiento de la misma.
Suspire y me di vuelta, encontrándome con una oscura caverna. Me interné lentamente en el lugar, contemplando a las luciérnagas que adornaban las paredes, dándole un toque de vida al interior, además de que funcionaban como una leve luz que permitía ver.
Había rocas por todo el lugar y parte de la cascada golpeaba suavemente el interior, formando una laguna. Aun así, de manera inexplicable, el agua se encontraba serena, sin movimiento, como si la caída de la cascada no afectará de ninguna manera.
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║ Narradora║
╚═════════════╝— ¿Qué hace una bella criatura como tú por estos lares? —Una melodiosa voz retumbó por el lugar, causando que Kamaria se tensara, puesto que no esperaba que hubiera alguien más. Sin embargo, la voz no parecía ameritar peligro. Su tono era suave, delicado y le causaba intriga, además de llenar su corazón con un sentimiento de calma.
— ¿Quien eres? —cuestiono con un poco de desconfianza la pelinegra. Volteo en todas las direcciones y solo percibió un suave movimiento proveniente del agua, pero de una de las esquinas en las cuales no tenía visual.
— Soy una naga. Tranquila, loba. No te haré nada, apestas a Alpha, y lo que menos queremos en nuestro territorio son discordias. — Nuevamente su voz llenó el lugar con una sensación de calma.
— No soy una loba. —Frunció el ceño mientras intentaba forzar su vista y ver más allá de la oscuridad. Sabía que se encontraba una mujer, por su voz y la parte de su silueta que podía contemplar por la oscuridad. Sin embargo, no sabía más allá de eso.
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The Alpha's Huntress ©
WerewolfKamaria es una hábil cazadora de nivel dos, la cual entrena diariamente para devolverle el favor a aquellos que la salvaron. Con este mismo fin, se interna en una misión suicida para salvar a su mejor amigo. Deja su vida con tal de que él pueda esca...