amistad.

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- tía - hable para llamar su atención, ella se encontraba sentada en una mecedora, mientras que yo estaba frente al estante que portaba las fotografías por las que Dawson había estado tan curioso. -¿cómo es que tú tienes estás fotografías?- Debía saberlo, necesitaba saberlo.

- tu padre quiso deshacerse de ellas y yo se las quité.- no me sorprendía. - Alison siento mucho si te incomode, cuando trate de abrazarte. - su voz pesarosa me causa malestar y la sensación incrementa cuando soy consiente de que estuve evitando el tema, se que ella no lo había hecho a propósito pero no pude impedir mi reacción y la culpa me atormentaba por eso. Luego de acomodar las cosas en mi ahora habitación me quedé dormida, razón por la cual no hablamos ayer, sin embargo sabia que este era el momento para tener esta conversación - se que para ti no debe ser fácil estar cerca de mi sabiendo que tengo la misma cara de tu madre.

- tía, no es por eso. - trato de justificarme pero no funciona ella no me cree, su expresión me lo dice.- ¿de acuerdo?- admito al sentirme expuesta. - contigo si es un poco difícil por qué eres la gemela idéntica de mi mamá, pero no tiene nada que ver con eso. Simplemente no me gusta que me toquen.- me sincero, y le hago saber que la situación va mas allá de lo que ella imagina.

- claro. - suelta con una expresión repentina de diversión en su rostro, lo cual me confunde. - Pero con Dawson no dices eso.- ¡Claro! ella tenía que salir con algo así. Sus palabras le dan un giro inesperado a la conversación, lo que me ayuda a respirar mejor. Sin embargo sus palabras me hacen sentir como si me hubiera atrapado haciendo una travesura

- si, tienes razón - admito rendida. - y aunque no lo creas me he estado preguntando ¿por qué? no se, hay algo en el que me hace sentir tranquilidad.- trato de explicar algo que me he estado cuestionando en los últimos días

- mmm, eso es amor, se gustan.- definitivamente ella estaba desesperada por encontrarme un novio.

- ¿es enserio? ¿vas a empezar con eso?- le reprocho. Su cara de diversión me hace saber que no parara ahí, pero el sonido de mi celular no la deja continuar.

- ¿hola?.- digo frunciendo el ceño después de descolgar, ¿Cómo me contacto?

- ¡hola!- por alguna razón Dawson se escucha feliz.

- ¿Cómo es que tú tienes mi número? - pregunto con curiosidad, yo tengo agendado su número, pero yo nunca le he dado el mío.

- Sara me lo dio.- debí suponerlo.

- ¡genial!- mi tía estaba atenta a mis reacciones y por cómo me miraba parecía intuir con quién hablaba.

- quería invitarte a ir a un lugar conmigo hoy. - eso me dio curiosidad.

- a si, ¿a donde?- lo escuché soltar una pequeña risita, y sin darme cuenta yo hice lo mismo

-bueno.... te lo diré cuando te vea.- ¿Que? Genial piensa dejarme con la intriga- Paso por ti a las 6pm.

- pero... Dawson. - no pude refutar nada pues con lo último que dijo colgó.

- ¿Qué paso?- mi tía tenía una sonrisa radiante en el rostro, yo había mencionado a Dawson y al parecer eso la puso más Feliz.

- dice que quiere llevarme a no sé dónde.- le informo evadiendo su buen humor.

- ¡uy, uy, uy! eso me suena a cita.- definitivamente ella estaba exagerando.

- por supuesto que no tía.- digo enseguida tratando de quitarle la idea de la cabeza.

- si, lo que tú digas.- genial, no logre hacer que me creyera.

Horas mas tarde...

Dawson había llegado puntual a casa de mi tía, la cual nos hizo difícil la tarea de salir, pues le busco plática a mi acompañante, cuando por fin logramos escabullirnos nos montamos al auto y salimos disparados a no sé dónde, Dawson seguía sin decirme a donde me estaba llevando y estaba empezando a desesperarme.

prueba de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora