∆°•~Pillados~•°∆

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Rubius cogió su mochila del suelo y se colgó la chaqueta en el brazo , listo para salir .

- Bueno...me lo he pasado bastante bien - dijo riendo , Vegetta le devolvió la sonrisa .

- ¿Como llevas lo de la nariz? - preguntó el pelinegro , ya que los dos tenían las marcas de la pelea de la noche anterior .

- No me duele...casi . ¿Y tu ojo?

- Bien , tampoco me duele tanto - el castaño asintió .

- Me voy ya , supongo que nos veremos mañana en clase .

- Sí . - la situación ahora era algo más incómoda .

- Adiós - se despidió el castaño algo nervioso , dándole la espalda a Samuel y abriendo la puerta para salir .

- Hasta mañana - correspondió el pelinegro .

Rubén atravesó el marco de la puerta con la mirada baja , hasta que los rayos de sol lo golpearon en los ojos y al levantar la vista se paralizó . Conocía muy bien esa cabellera blanca .

- ¡Mierda! - reaccionó antes de que Willy lo pudiese ver y volvió a entrar en la casa y cerró la puerta , confundiendo al pelinegro .

- ¿Te has dejado algo? - preguntó .

- Willy viene hacia aquí - dijo exaltado . Vegetta abrió los ojos como platos , comenzando a ponerse nervioso también .
¿Porqué? En realidad no lo sabían , pero ambos sentían que estaba mal el que los viese juntos...suena extraño , pero tal vez podría...¿Ponerse celoso?

Vegetta lo apartó de la puerta y observó por la mirilla cómo el rubio se acercaba a la puerta .

- ¡Escóndete rápido! - dijo en un susurro .

- ¿¡Donde!?

Vegetta lo cogió del brazo y lo llevó hasta la sala .

- Métete detrás del sofá - le ordenó , Rubius lo miró mal .

- ¿Pero como se supone que voy a caber ahí?

- ¡Que te metas! - dijo levantando un pco la voz . Rubius se quitó la mochila y la chaqueta de encima y se metió donde le había dicho , luego Vegetta le pasó la mochila , tirándose la a la cara . 

Se escuchó el timbre de la puerta y Samuel pegó un brinco .

- Voy a abrir , no hagas ningún ruido - avisó .

Corrió de nuevo a la puerta e intento regular su respiración antes de abrir .

- ¡Willy compañero! ¿Y eso que has venido por aquí? - dijo intentando ser lo más natural posible , y al parecer no lo consiguió , ya que el rubio lo miró algo extrañado .

- Eh...pasaba a ver cómo estabas .

- ¿Yo? Pues perfectamente , fresco como.una lechuga , como siempre ...pasa hombre , no te quedes en la puerta - dijo de forma amable . La verdad era que esa actitud estaba asustando un poco a su amigo , que nunca lo había visto de esa forma , parecía algo...¿Ansioso?

Se hizo a un lado para dejarle pasar y caminaron ambos hacia el salón .

- Pensé que estabas mal o que te había pasado algo...como te has ido de clase sin avisar a nadie - dijo Willy confundido .

- Ah sí...eso...esque estaba...- se sentaron en el sofá mientras Vegetta buscaba rápido un escusa y Willy esperaba una respuesta . - Porque tenía algo que hacer...muy importante...

- Oh...esque me pareció extraño , como tú no te perderías una clase ni estando a las puertas de la muerte - Vegetta comenzó a reír para disimular , aunque su risa sonaba un poco sicópata .

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