Missing [Dazai y tú] COMPLETO

[🎃Especial Halloween🎃]

⚠️⚠️⚠️Esto NO afecta en la trama de la historia PARA NADA. Pues según la línea temporal del libro para Halloween aún faltarían un par de meses⚠️⚠️⚠️

Narra Autora

Luego de organizar sus horarios y tener una charla al respecto, Dazai era el encargado de escoger (junto a Kalem, claro), los disfraces que usarían para el Halloween de este año.

Así pues fue que, el día correspondiente, una media hora antes de las 7PM el mayor de los castaños llegó a la casa del pequeño con una gran bolsa entre manos, en la que se escondían tres disfraces de los que Kalem en ningún momento habló, ya que quería que fuera una sorpresa para su mamá. Cosa que, también, había sido difícil para él, pues el menor no era bueno manteniendo secretos, y especialmente a su madre.

─¡Holaaa!─. Saluda Osamu, un momento después de que Sahori le abre la puerta y encuentra con la mirada a su hijo, quien salta a darle un abrazo.

Al oirle, ____ cierra el grifo del lavaplatos y seca sus manos, realmente curiosa y con una sonrisa ya asomando por su rostro. Hecho esto, trota fuera de la cocina, y su repentino llegar atrae la atención del varón, quien gira a verle notoriamente emocionado.

─¡Muéstraselos, muéstraselos!─. Pide Kalem, apuntando a la bolsa con uno de sus deditos mientras mira al rostro de su padre, aunque este observe en otra dirección.

Al escucharle, Dazai asiente con acelero, y _____ se acerca unos pasos.

Entonces, el mayor deja la bolsa sobre el suelo y se inclina para así meter sus manos en su interior

Pero, y antes de sacar cualquiera de estos, alza la cabeza hacia la madre de su hijo y le pide algo;─ Cierra los ojos─. Cosa que _____ obedece de inmediato, cerrando a sus ojos para posteriormente tapar su rostro con ambas manos.

Pasan dos minutos, gracias a sus oídos puede sentir el rápido mover de las manos de su compañero, su emoción aumenta y su sonrisa se amplía un poco. Ahí, Osamu toca delicadamente su hombro, provocando en ella un cosquilleo que disimula con fallo, y atrayendo a él un rubor que pasa por encima de la emoción, y le genera un revoltijo de sensaciones en el interior de su pecho. Delicadamente, y aún sintiendo la gran y cálida mano de Dazai sobre su hombro, relaja ambos brazos, y abre los ojos.

─¡Sorpresa!─. Canturrean al unísono ambos castaños.

Kalem esta en brazos de su padre. Mirando, al igual que él, a los ojos de la madre del niño, que expresan una sensación nostálgica, como si la alegría fuera tanta que estuviera a punto de llorar.

Osamu se toma ese instante de silencio para mirar a su niño. Al sentirse tan pleno, automáticamente lleva una de sus manos hacia el rostro del niño, y acaricia dulcemente su mentón.