24

492 35 0
                                    

Sakura
-Hola Gilbert —estábamos en el colegio, ayer recién había sido el baile y no habíamos hablado tanto.

-Hola Sakura, ¿qué pasa? —su voz era neutra, no estaba feliz ni enojado, parecía un zombie.

-Te venía a decir que hoy voy a ir a ver a Delphine y a Bash, para que nos vayamos juntos.

- Oh lo siento Sakura, pero le dije a Anne que la iba a acompañar a su casa hoy —sonó triste cuando mencionó a Anne.

-¿Está todo bien con ella? Te ves raro como triste —me miro a los ojos, yo en verdad estaba preocupada.

- No pasa nada, enserio, solo que ayer me quede hasta tarde —sonó la campana para volver a clases así que no pude decirle nada más y me fui a sentar con Tillie.

- Bueno niños vamos a hacer un trabajo en parejas —no sé por qué, pero mire a Gilbert de reojo esperando que él quisiera ser conmigo, pero eso no pasó, miro a Anne, así que mire a Haru, que se dio vuelta justo cuando lo empecé a mirar— El trabajo se trata de expresar sus sentimientos hacia la otra persona con algo creativo. Aunque sea en pareja, ustedes tienen que pensar de manera individual como se van a expresar y tienen dos semanas —Al terminar de decir eso empezó con las clases y después de esta teníamos el reforzamiento para Queens, ya que quedaba menos de dos meses para hacer la prueba. Yo ya había mandado mi solicitud a algunas universidades y estás me decían que estaba en lista de espera hasta saber mis notas del examen.  Yo no quería ir a Queens, pero el reforzamiento me ayudaba mucho. Terminaron las clases y me acerque a Gilbert

- ¡Gilbert! —estoy segura que me escucho, pero no paro, así que empecé a adelantar mi paso hasta que pude agarrarlo del brazo— ¿qué te pasa?

- Nada, simplemente no te escuche —me estaba enojando o frustrando, uno de los dos, no me miraba a la cara.

- No te creo —agarre su cara para que me mirara a los ojos— ¿por qué estás así? —sus ojos me transmitían pena o enojo, no sé pero me daban un sentimiento que no me gustaba— ¿fue algo que te dije el martes....te enojaste porque no te di espacio?

- No todo tiene que ver contigo Sakura —su voz sonaba dura, frío y distante, no me gustaba eso, se me erizaba la piel con tan solo escucharlo.

- Entonces no deberías enojarte conmigo —lo solté y me fui, él estaba enojado y si yo me enojaba no íbamos a llegar a ninguna parte.

Camine con paso rápido a la casa de Gilbert porque tenía que hablar con Bash, tal vez él sabía por qué pasaban estos cambios tan repentinos con Gilbert.

- ¡Es que no entiendo por qué se pone así! —ya había llegado a la casa de Bash y le he estado gritando por unos 15 min sobre lo infantil que se estaba comportando Gilbert.

- Porque no mejor te sientas Sakura y te calmas, Delphine está durmiendo —es cierto, me estoy desquitando con él.

- Lo siento —me senté en frente suyo y me tomo la mano.

- Gilbert es alguien....complicado, pero te aseguro que no está enojado contigo, yo creo que está enojado con él mismo y se desquito con la primera persona que encontró, en este caso fuiste tú.

- Pero no es justo, además se comporta extraño desde que está Haru, se aleja de sus amigos y dice que estudia, eso no es sano.

- Lo sé, pero que le podemos hacer, él es un cerebrito y es muy terco —los dos soltamos una carcajada, aunque es cierto— ya se le va a pasar.

- Está bien —me acerque y le di un abrazo, pero no duro mucho, ya que nos dio hambre y empezamos a prepararnos un té.

Gilbert
Soy un tonto, un tonto que no sabe qué hacer, me desquite con Sakura y ella no tiene la culpa de que yo haya sido un cobarde, lo peor es que lo sigo haciendo. Ahora mismo estoy con Anne para llevarla a su casa y la verdad no sé si el plan que tenía pensado ayer sigue en marcha.

Hablamos de muchas cosas durante el camino, cosas sin sentido, pero en mi interior siento que con Sakura, todas esas cosas si hubiesen tenido sentido. Para cuando vi la granja de Anne ya había tomado una decisión.

- Anne antes que entres tengo que decirte algo —su cara cambio a una preocupada, aunque era obvio, ya que el tono con el que dije estas palabras no fue el más tranquilo.

Anne
Escuchar esas palabras y con ese tono me hicieron quedar paralizadas, algo en mi sabía que era lo que me iba a decir, pero no quería escucharlo, me dije que me la iba a jugar, pero nunca pensé que no iba tener tiempo.

- Anne mira yo....

- ¿Quieres ir a la feria conmigo? —esas palabras hasta a mi me sorprendieron y Gilbert de quedó mudo— falta aún un par de semanas, pero estoy tan emocionada que quería preguntártelo —él seguía sin decir nada, lo cual me dio a entender que había acertado con lo que me iba a decir, iba a terminar esto que teníamos. Con solo pensar eso mis ojos se cristalizaron y yo no quería que él me viera así— mañana me respondes —le di un beso en la mejilla y entre corriendo a mi casa.

Sé que está mal alargar lo inevitable, pero tengo fe, fe de que él va a sentir lo mismo que yo de nuevo, al menos lo tengo que intentar.

Gilbert
¿Por qué esto siempre me pasa a mí? Me devolví a mi casa a paso lento, necesitaba pensar, la feria va a ser la próxima semana, pero tampoco es justo para Anne que este con ella solo para llevarla a la feria, tal vez si le digo indirectamente que iremos como amigos no se lo tome mal.

Estaba tan sumergido en mis pensamientos que no me di cuenta que ya había llegado a mi casa.

- Bash necesito tu ayuda —dije eso una vez que entre, sin fijarme en quien estaba presente. Nos quedamos mirando unos minutos, en el aire se podía sentir la tensión.

- Yo mejor me voy —tomo sus cosas y se acerco a Bash— adiós Bash, dale un beso a Delphine de mi parte —le dio un beso en la mejilla y a mi me evitó para salir por la puerta en la que yo había entrado unos minutos antes.

- Ve con ella —Bash se acercó y me dio un pequeño empujón, y eso fue lo único que necesité para ir atrás suyo.

- ¡Sakura espera! —me sorprendió cuando ella paró, la verdad tenía pensado correr un poco más para formular una buena disculpa.

- Ahora si me hablas —esas palabras tan crudas que salieron de su boca me hicieron sentir una punzada en el corazón, aunque me lo merecía.

- Lo siento, no sabes cuánto.....

- No soy un juguete Blythe, no me puedes tratar como te plazca, en un momento me tratas bien pero al otro soy una total desconocida, ni siquiera eso, soy alguien que detestas, que no te importa dañar con tus palabras y no es la primera vez —me siento como un cretino.

- Lo sé y lo siento, la verdad no tengo ninguna excusa, siempre me pasa que me desquito con la primera persona que veo cuando estoy enojado y es algo horrible, algo que quiero cambiar de mi y te juro que trabajo para cambiarlo, pero.......lo siento —no podía perderla, no me importa si la pierdo por Haru, lo que me importa es perderla a causa de mis estupideces y cambios de actitud, eso no lo puedo permitir.

Empezó a caminar de nuevo, no sabía si seguirla o no

- ¿Vas a quedarte parado para siempre? —me apure para quedar a su lado— es la última vez Blythe, no habrá una tercera.

- Lo prometo.

Empezamos a caminar hacia su casa y hablo de muchas cosas, cosas que no tienen sentido como de las plantas, de pájaros, de estaciones, de esas cosas, pero cada palabra que salía de su boca trataba de que quedara grabada en mi mente, quería grabar todo el momento que ella estuviera a mi lado porque un sentimiento, una sensación de que no podría estar así con ella por mucho tiempo más me comía por dentro.

-.-.—.-.-.—.-.-

Holaaa, bueno les quería decir que estoy muy feliz porque me di cuenta que esta historia tiene muchas lecturas o al menos muchas más de las que yo pensé llegar y me motiva mucho a seguir escribiendo, y por eso les quería dar las gracias ❤️🥰😻

La flor de cerezo. GBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora