36

376 31 1
                                    

Sakura
Nunca imaginé que al despertarme a la primera persona sería esa.
- ¡Jerry! Es una broma —me puse a reír, era obvio que la noticia saldría a la luz.

- Relájate Tillie, solo es mi amigo.

- ¿Desde cuándo lo conoces?

- Desde ayer —no sabría describir la cara que tenía si les soy sincera.

- ¿Y ya se abrazan?

- Por favor Tillie deja de ser tan dramática —me puse a reír de nuevo— es solo mi amigoooo

- Pues dile eso a Gilbert —deje de reírme con solo escuchar ese nombre

- ¿Por qué lo mencionas?

- Hubieses visto lo enojado que se puso al escuchar eso —ahora era ella quien se ponía a reír— ¿cuándo le vas a decir que sus sentimientos son correspondidos? —su voz era burlesca y yo lo único que pude hacer fue lanzarle una almohada.

- Por favor, ya sabes que él está con Anne y después de lo del otro día de seguro se enojo conmigo o no quiere saber nada más.

- Sakura sabes que él no es así, por eso nunca se alejaría.

- Lo sé, pero....—y fue en este momento en el que me di cuenta que estaba hablando con Tillie— ¡Tillie! —me puse nerviosa, hace días que no la veía y nunca le había contado nada.

- Sakura relájate —se acerco y me abrazo— nadie se va a alejar de ti por lo qué pasó en tu pasado, ni Gilbert ni yo —mis ojos se llenaron de lágrimas.

- Lo siento, tuve que habértelo dicho, pero no sabía cuándo o dónde....

- Sakura no es un tema fácil y estás en todo tu derecho en si quieres o no contárselo a alguien.

- Pero son mis amigos, yo tuve que habérselo dicho —ahora yo le correspondí el abrazo.

- Nos conocemos hace tan poco y si, el cariño que se formó entre nosotras es inmenso, pero eso no quiere decir que tengas que contármelo todo, además —hizo una pequeña pausa y yo me asusté— ya había visto tus cicatrices.

- ¿Qué?

- No te quise decir o preguntar nada porque supuse que querías dejarlo en el pasado o no estabas lista.

- Gracias —fue lo único que pude decirle, ya que las palabras no bastaban, pero el abrazo en el que estábamos si lo hacía, con solo este abrazo nos transmitimos todo el cariño que nos teníamos. Estuvimos así un par de minutos— ¿y tus clases?

- Un día que falte no me hará nada, además hay que ponernos al día.

- La verdad no he hecho mucho —nos separamos y ella se puso de pie.

- No habló de eso, sé que has estado encerrada la mayor parte del tiempo, me refiero a.....

- Ya te dije que Jerry es mi amigo —me apresuré en decir, pero algo en su cara me decía que no hablaba de eso.

- ¿Qué son estas cajas y por qué hay muchas Sakura? Eso quiero saber —se me había olvidado que ya había comenzado a empacar para irme y yo solo le di una sonrisa que me delató— ¡Te vas!

- Shhhh te van a escuchar —no quería que todos se enteraran— y si, me voy después del examen.

- Pero ¿por qué?

- Porque ya terminó el colegio y no me siento cómoda, quiero partir de cero Tillie, por favor entiéndeme —me paré y le tomé las manos— por favor.

- Esta bien, pero que sepas que nadie te está echando Sakura, nadie quiere que te vayas.

- Esos todos son sólo Charlie, Moody y mi tía. Nadie más me hablaba, así que no me van a extrañar tanto.

- ¿y yo? —me lo dijo con sus ojos cristalizados— ¿y Gilbert o Bash? Si, tal vez no son tantas personas, pero llegaste a nuestras vidas y las cambiaste Sakura —ahora si tenía lágrimas cayendo por sus mejillas y yo estaba en las mismas condiciones— me cambiaste, me mostraste una parte de la vida que es hermosa, una donde yo puede ser yo misma, una donde sé que es amar a otra persona o que es preocuparse por el otro sin querer tener nada a cambio y ahora te vas y yo....—la volví a abrazar.

- Tillie tú eres mi mejor amiga y estoy segura que nadie podrá ocupar ese lugar, y te prometo que me voy a mantener en contacto y que voy a volver en cuanto me necesites, pero necesito esto.

- Lo sé y lo siento por ser tan sentimental, pero tú me enseñaste a decir que siento, así que de cierta forma es tu culpa —ahora nos reímos un poco— te quiero Sakura y siempre lo haré.

- Yo también te quiero y mucho, tanto que duele

- ¿Ahora quien es la dramática? —nos volvimos a reír.

Así pasamos todo el día, entre risas y llantos. La verdad la iba a extrañar mucho, pero algo dentro de mi sabe que esto no va a ser una despedida, sino un hasta luego, ya que en el futuro nos vamos a volver a encontrar y nuestra amistad seguirá igual que hasta ahora, incluso más profunda.

La flor de cerezo. GBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora