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Sakura
Llegamos a la casa de Tillie y Haru tocó la puerta, la cual fue abierta después de un par de minutos por la dueña de la casa.

- Sakura un gusto en verte —la mamá de Tillie me dio un amistoso abrazo. Tengo que decir que al principio la misma persona que me esta abrazando no estaba de acuerdo que yo fuera amiga de su hija, pero después de un tiempo la acepto— también es un placer verte a ti Haru —dijo una vez que se separó de nuestro abrazo y le estrechó la mano.

- Igualmente —dijimos al mismo tiempo, lo cual hizo que soltáramos una carcajada.

- Tillie los está esperando en el patio de atrás —se hizo a un lado para dejarnos entrar.

- Muchas gracias —ella respondió con una sonrisa y con Haru nos dirigimos al lugar que había señalado la mamá de Tillie.

Al abrir la puerta trasera pegue un grito de emoción y sorpresa, ya que todos mis conocidos me habían gritado "SORPRESA", y tengo que admitir que me asuste al principio.

- Ves,  igual te sorprendí —dijo Tillie riendo mientras se acercaba para darme un abrazo.

- Se me había olvidado por completo que dijiste que harías una fiesta —dije correspondiéndole el abrazo.

Después empecé a saludar y agradecerles a todos, pero no pude evitar notar que faltaba Gilbert.

- Debe estar atrasado —salte un poco del susto  y me gire para ver quien me había hablado.

- Bash, me asustaste —dije mientras reía, ya que él se estaba riendo y su risa era muy contagiosa.

- Lo siento, mi culpa —dijo mientras levantaba sus brazos mostrando su inocencia, a lo cual yo le respondí con un pequeño golpe en su brazo— ¡Oye!

- Me asuste enserio, así que te lo merecías —le di un pequeño abrazo— ¿sabes si ya se acordó de algo?

- Lamentablemente mi pequeña, no ha recordado nada, aunque cuando lo haga él vendrá a buscarte corriendo, incluso va a nadar para llegar a Paris —dijo con una sonrisa, pero yo podía notar un poco de pena en su voz.

- Yo igual voy a extrañarte Bash —dije mientras me esforzaba en que no saliera ninguna lágrima de mis ojos, aunque Bash estaba igual que yo— además, voy a volver en dos años más, solo me falta eso para terminar la universidad.

- Lo sé, pero tengo que admitir que todos son un poco más feliz cuando tú estás cerca —giro un poco la cabeza para ver a Delphine y yo copié la acción— es más segura de sí misma cuando está contigo y eso que no han pasado tanto tiempo juntas, incluso le pidió a Muriel que le hiciera unos pantalones.

- Es que mis canciones inspiran —empecé a sollozar un poco y Bash me abrazó.

- Te quiero mucho Saki.

- Yo también Bash —el abrazo era tan cálido y emitía un amor paternal que me alegraba el corazón.

- ¿Sakura? —se separe de Bash y vi a mi tía— oh mi niña —me abrazó y unió a Bash, y un poco después Delphine también se unió, era la mejor familia que pude tener después de perder a mis padres, aunque ellos siguen en mi memoria y siempre lo harán.

- Yaya déjenla respirar un poco —dijo Tillie mientras se acercaba— además, Sakura tiene que cantar una canción —la mire confundida y ella entendió mi mirada altiro— Haru me dijo que te escucho tocar una nueva canción ...puees quiero escucharla —me tomo de la mano y me llevo al lado de los músicos —listo, te deseo suerte —dijo para salir corriendo al lado de Paul, en verdad hacían una buena pareja.

Gilbert
Seguía en mi casa, ya que debía esperar a Lilith para ir y ya me estaba impacientando. Decidí ir por mi cuenta, pero al abrir la puerta la vi.

- ¿Lilith sabes la hora que es? vamos a llegar tarde —ella no me respondió y solo entro a mi casa.

- Por favor Gilbert, enserio creíste que íbamos a ir, ni siquiera es mi amiga y tú no te acuerdas de ella —concluyó para sentarse en la mesa.

- Ella si es mi amiga Lilith, así que si quiero ir a su despedida —me empecé a poner mi abrigo y de reojo vi que frunció sus cejas.

- Yo no voy a ir Gilbert y tú tienes que quedarte conmigo, eres mi pololo después de todo —se paró y puso su mano en mi mejilla.

- Lilith lo siento, pero yo si voy a ir —dije mientras alejaba su mano con delicadeza.

- ¡¿Me estás molestando?! —me quede callado mientras arreglaba las últimas cosas de mi vestimenta— Gilbert, mírame a los ojos y respóndeme.

- No, Lilith, es enserio.

- Ella lo único que ha hecho es insultarme, te perdone esa vergüenza que me hiciste pasar, pero si te vas en este instante no te voy a perdonar, Gilbert Blythe —la mire por unos minutos, no había nada de amor en sus ojos. Después de mirarla un rato fije mi mirada en el espejo que estaba enfrente mío y me di cuenta que tampoco había nada de amor en mis ojos.

- Creo que es mejor que terminemos —se tapo la boca con sus manos como si estuviera sorprendida e indignada a la vez.

- ¡Llevamos tres años saliendo Gilbert no me puedes hacer esto ahora!

- Lo siento, Lilith, pero no puedes negar que ya no hay amor y quizás....no hay hace mucho tiempo.... —ella me abofeteó y la mire sorprendido, sus ojos mostraban lo furiosa que está, nunca la había visto así. Herida, pero enojada a la vez.

- Tienes razón. Ya no hay amor, pero no puedes negar que en algún momento hubo Gilbert —dijo mientras unas lágrimas bajaban por sus mejillas— yo si te ame y después de un tiempo las cosas se enfriaron y lo admito, pero trato de arreglarlo por lo que tuvimos alguna vez.

- Lilith —iba a abrazarla, pero ella me apartó.

- ¿Es Sakura? —la mire confundido— ¿te gusta ella?

- No —¿es verdad lo que le dije?— ella no tiene nada que ver en esto —tengo que admitir que no estoy seguro de eso, pero decirlo tal vez le iba a doler más.

- No soy tonta, Blythe. Desde que llegue a tu vida siempre he sentido que tu familia me odia, pero estaba haciendo mi mayor esfuerzo para cambiar eso hasta que me di cuenta cual era la razón de porque no me aceptaban —volví a mirar al piso— y es que ese puesto ya estaba ocupado por Sakura. Lo supe cuando te vi llorar por la canción o cuando vi que Bash la abrazo con cariño cuando a mi con suerte me dice "hola" —se dirigió a la puerta.

Yo simplemente me quedo callado porque una parte de mí siempre supo que era cierto lo que ella me dijo. Antes de salir se giró y me miro a los ojos.

- Se feliz, Blythe —eso fue lo último que dijo antes de salir de la propiedad.

La flor de cerezo. GBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora