La flor de cerezo. GB

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Gilbert
Después de estar vagando por horas en el bosque decidí que ya les había dado suficiente tiempo a Bash y a Muriel, y por eso regresé a la casa, pero cuando llegue a la puerta me encontré con un papel que decía:

"Gilbert si vuelves a la casa te sugiero que te vayas a caminar por más tiempo si no quieres que te golpee. No le digas a Muriel que te dije eso. Ah y Delphine está en la antigua casa de Muriel. Adiós"

Negué con la cabeza, estoy cansado y no puedo estar en la casa, que decepción, pero que le voy a hacer, están recién casados. Di media vuelta y empecé a caminar hacia la casa de Muriel, aunque sigo sin entender porque no la vende, si nadie vive ahí. Espera... si nadie vive ahí, entonces ¿con quien está Delphine?

Empecé a caminar más rápido al darme cuenta que no dejo a Delphine con Anne como siempre y que está con una desconocida.  Al llegar toque la puerta y alguien llena de pintura morada me abrió

- Hola Gilbert, ¿qué pasa? —me sorprendió la tranquilidad con la que me hablaba si estaba así de sucia.

- Mmm vine a buscar a Delphine —su cara cambió a una triste y confundida.

- ¿Por qué? —su tono era mucho más serio que el anterior— Bash y mi tía me dijeron que se iba a quedar a dormir —ahhh yo no sabía eso.

- ¿Enserio? No lo sabía —su cara se tranquilizó un poco, pero nos quedamos en un silencio, no en uno incómodo, al decir la verdad era muy cómodo, nos veíamos a los ojos. Los suyos son hermosos y tienen un brillo en esos que emanan tranquilidad y que alegran el día.

- ¿Necesitas algo más? —era muy directa lo cual me impactaba, en general las mujeres eran más calladas, aunque pensándolo bien se parece bastante a su tía.

- No, ¿puedo ve...—me interrumpieron.

- ¡Tío Gilbert! —por detrás de Sakura apareció una pequeña cubierta de pintura rosada y con pantalones. Mire a Sakura y ella solo evito mi mirada, era obvio que sabía que le iba a decir algo por la forma en la que estaba Delphine— Vienes a pintar con nosotras —de reojo vi que Sakura se aguantaba la risa.

- Por favor Delphi, tu tío nunca a tomado un pincel —¿cómo sabía eso? La mire serio y ella lo noto, creo que se puso triste al ver que yo no recordaba algo— Igual ya no queda espacio en mi pieza para pintar algo —su voz cambio y ahora estaba triste— Ven Delphi vamos a ducharte —tomo a Delphi en brazos— Gilbert si te vas a quedar serías tan amable de cocinar la cena. Muchas gracias —se fue al segundo piso mientras yo seguía confundido en la puerta principal. Después de un rato para procesar lo que había pasado pase a la cocina para cocinar como ella me había dicho.

Mientras cocinaba empecé a escuchar el sonido del agua corriendo en el baño, lo cual significa que alguien se está bañando. En un momento alguien empezó a cantar, era una letra y melodía que yo conocía, era tranquila y me relaja.

Al seguir escuchándola me di cuenta que era una de las canciones de cuna de Delphine y en ese momento me di cuenta de que hablaba Bash cuando me dijo que yo había olvidado algo por culpa de Lilith, él siempre ponía esta canción, será que se refería a Sakura, ¿la había olvidado a ella? Si, Bash ya me lo había dicho, pero, ¿será que teníamos algo? ¿por eso quería que me acordara de ella?

- ¿Tío te encuentras bien? —¿en qué momento llegaron ellas?— estás llorando —me empecé a secar rápido las lágrimas, desde hace un tiempo siempre me pasa esto.

Después de secarme las lágrimas pude ver que Sakura le susurraba algo a Delphine, y una vez que termino esta última vino a abrazarme mientras Sakura me veía con cara preocupada. Después de unos minutos así, Sakura empezó a terminar de cocinar mientras Delphine y yo seguíamos en las mismas posición.

- La comida ya está lista —ella llegó a la sala con una bandeja.

- Déjame que te ayudo —le iba a tomar la bandeja, pero ella la corrió.

- No no no, aquí los invitados comen no trabajan —dijo mientras ponía las cosas en la mesa.

- Eso es no es verdad —puso una pequeña sonrisa en su cara que la delataba de culpable— me dijiste que cocinara —empezó a reír junto con Delphine, ahora que lo pienso Delphi está muy feliz, se ríe mucho con ella, lo cual me hace muy feliz. Con Lilith ella siempre está seria.

- Por fin sonreíste —dijo Sakura, por lo que la mire confundido.

- Nooo ahora volvió a poner esa cara Sakura —genial, se estaban burlando de mi.

- Él siempre pone esa cara —era un dialogo entre Sakura y Delphine donde me molestaban. Delphine es una copia pequeña de Bash, siempre me molesta.

- Alguien me explica de qué hablan —ellas se quedaron calladas mientras tenían sonrisas burlescas en sus caras, son iguales a Bash.

- ¿Por qué mejor no nos sentamos a comer? ya tengo mucha hambre —Sakura era buena para cambiar de tema y lamentablemente lo logró porque eran dos contra uno.

Hablamos hasta muy tarde y después nos fuimos a acostar. Sakura y Delphine durmieron juntas en la habitación que estaba enfrente de la mía. Podía escuchar las risas, no las conversaciones, pero las risas eran suficientes porque de una manera me hacían muy feliz, la risa frágil de Delphine y la risa armoniosa de Sakura se mezclaban y lograban hacer una canción perfecta. Cuando las risas por fin pararon yo logré quedarme dormido con una sonrisa en mi cara.