Templo Hikawa.
— ¡Me niego a dejarla ir sola! — Arger y Seiya se encontraban enojados, Serena usaba su ropa de invierno, guantes azules de lana, un pequeño gorro y bufanda, ella conocía el frío de ese lugar, su abrigo la mantenía lo más caliente posible. Luna y Artemis habían dicho que la orden de Chronos era que su hija debía ir sola, nadie más podía interferir, en dicho caso si alguien la acompañaba sólo podían ser las sailor que el mismo escogería, por ese motivo, esa mañana se encontraba tomando el té en la parte trasera del templo, comía sus galletas sin darle mucha importancia a la discusión que mantenían su hijo y Seiya sobre la idea de dejar ir a Serena sola, un tic nervioso se hacía presente en su ojo derecho. Dejó la taza a un lado y alzó uno de los dedos de su mano derecha creando un pequeño botón de luz que salió disparado contra Seiya y Arger, ambos acabaron cayendo de rodillas por la fuerza de la descarga que estremeció sus cuerpos.
— Lo siento mi señor. — Dijeron ambos en perfecta sincronía manteniéndose cabizbajos al darse cuenta del enojo del rey del tiempo. Hotaru dio un paso adelanté sorprendiendo al rey.
— Permítame ir con la princesa. — Se inclinó en señal de respeto.— Se que le traicione y pocos confían en mi por haber ayudado a sets...es decir; Eris. Pero juro cuidarla.
— Lo sé. — Mordió una de las galletas. — Estás cosas son muy buenas, Júpiter no ha perdido el toque al cocinar.
— Gracias. — La castaña no pudo evitar sonrojarse al oír aquel halago. — pero mi rey, creo que Hotaru sería la mejor para ir.
Negó. Todos lo miraron, los titanes bajaron la cabeza, ellos conocían a su señor, él era impredecible y dejaría ir a Serena sola para enfrentarse a Galaxia. Sin embargo, también sabían del amor de él por su hija, aunque lo veían tranquilo estaban seguros de que ya tenía a las guardianas que irían para cuidar de ella.
— Quiero que vaya Sailor Mars. — Rei dio un paso al frente inclinando su cabeza en señal de respeto. — Sailor Uranus, sólo ellas.
— ¿Por qué no puedo ir yo? — Todos miraron a Mina. — Soy la líder de mi grupo.
— Lo sé y conozco tus capacidades, pero por eso no te dejó ir, si mi hija no está tú debes ser la responsable de cuidar a los inocentes. — La rubia asintió al entender sus razones. — Además ellos están por llegar y necesito que ustedes hagan algo por mi.
Las sailor se miraron sin entender a que se refería. Sin embargo fue Taiki quien se acercó para aclarar la situación.
— Ellos están por llegar y es por eso que nosotros debemos ir con Chronos a la puerta original, ustedes crear una barrera que pueda proteger a la ciudad. Deben hacer lo que sea para que las personas se mantengan dentro de ella, todos confían en las sailor scout y sólo ustedes pueden lograr que la población se mantenga oculta, tienen que lograr que confíen en ustedes.
Las sailor se miraron entre sí, recordaban la última vez que crearon una barrera que logrará proteger la ciudad, sus vidas casi acabaron en la pelea contra la dama 9, observaron a Hotaru, aquella pequeña niña que volvió para ser la luz en la vida de Haruka, Michiru y Setsuna, sin embargo está última solo las usaba. Amy asintió, había tomado la decisión de proteger a los inocentes aunque tenga que exponer su vida de nuevo.
— Sí tengo que dar mi vida nuevamente para protegerlos lo hare. — Lita la tomo de la mano seguida de Mina. — Somos las guardianas de la princesa Serenity.
— Serena y éste mundo es nuestra prioridad. — Lita pensaba en Andrew, en verlo nuevamente. — La persona que amo vive en este hermoso planeta no dejaré que Eris haga lo que quiere.
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Destellos de Luna
FanfictionHan pasado dos años desde la última vez que Serena Tsukino uso el poder del cristal de plata, su resplandor se hace cada día más débil, sailor Uranus teme que su princesa enferme y el cristal de plata absorba su poca fuerza. Tokio de Cristal se obse...