𝐀𝐕𝐀𝐃𝐀 𝐊𝐄𝐃𝐀𝐕𝐑𝐀 |𝐒𝐚𝐠𝐚 𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫|

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Fue el primer año donde todos los alumnos pasaron sus vacaciones en el castillo ya que les daba curiosidad el dichoso baile que era el tema principal en Hogwarts, era extraño si alguien no hablaba de ello, incluso muchos profesores como Snape estaban irritados de oír sobre eso en su mente solo pasaba "baile, baile y más baile" pero agradecía que pronto su pesadilla acabaría, solo faltaban horas para el evento.

— Hay algo que me estoy perdiendo? — Pregunto Samantha al ver a su tía con una enorme caja de parte de Thomas.

— Le alegró saber que eres amiga de su hija y bueno Gryffin le dio la idea en comprar un vestido por lo que él no tuvo problema, sabes me ha ganado pensaba comprarte uno — Dijo Julia abriendo la caja viendo el hermoso vestido que traía.

La rubia chillo de emoción y lo tomo con cuidado para verlo encima de su sobrina y con verlo de esa manera sabía que era perfecto creando las ansias en verla con ese vestido. La pelinegra sonrió un poco para su tía pero la mujer noto la tristeza que había en sus ojos.

— Aún no te ha respondido, verdad?

Para que fingir frente a ella si la conocía mejor que nadie, Samantha rompió en llanto ante la angustia que sentía su corazón y no solo por Oliver sino por las cosas que estaban sucediendo, aún se preguntaba cómo podía estar de pie después de los últimos años incluyendo este.
Julia la abrazo acariciando su cabello mientras que la pelinegra se desahogaba, aún que le costara admitir la leona temia por las barbaridades que Rita Skeeter escribiera sobre ella y no por que se dejaba llevar por sus comentarios sino por lo que creerían sus más cercanos.

— Mi princesa, Rita es una basura de periodista y jamás por más que me hechice creeré en las patraneas que dice sobre tí porque se quién eres y se que eres una persona estupenda — Dijo su tía animando a la muchacha mientras limpiaba sus lágrimas —. Ahora arriba ese ánimo hoy será una noche inolvidable.

La mujer haría todo para ver bien a Samantha, inclusive si debía enfrentarse con Rita Skeeter o con cualquiera que intentara meterse con su niña.
En ese momento se hizo presente Angelina quien vio con cierta incomodidad a Samantha, aún no se habían vuelto hablar después de esa pelea pero por un instante la pelinegra creyó ver como su compañera quiso hablar con ella pero se arrepintió y termino abandonando la habitación.

— Amigas — Resoplo Julia al recordar las tantas peleas con Cassandra pero siempre se volvían amigar creando una relación aún más fuerte.

Pero entendía el tiempo de las dos chicas y por eso solo les daría su espacio, siempre y cuando no dejen que una tontería destruya esa amistad por siempre.

Se veía una y otra vez, y no lograba reconocerse, con ayuda de su tía y de sus dos amigas, Hermione y Gryffin, Samantha se veía increíble con aquel vestido que fue un obsequio del señor Rosier junto a su hija. Estaba más que nerviosa de tan solo pensar que debía abrir el baile, le erizaba la piel.

— Ya entiendo porque Ron y Serpent están encantados contigo — Dijo Gryffin haciendo reír a las chicas —. Y no te preocupes por mi hermano, mi papá ya te aprecia por esa razón le dio una advertencia a pesar que sea su hijo.

— Thomas, nunca cambia — Dijo Julia mientras negaba.

Las dos chicas terminaron de arreglarse al igual que Julia quien también asistiría para pasar un buen rato en aquel baile junto a sus conocidos como algunos profesores, incluso el señor Rosier quien había sido invitado por Dumbledore para que pudiese asegurarse que todo estaría bien con respecto a los dos eventos.

— Bien chicas, es tiempo de irnos — Dijo la mujer retocando un poco su maquillaje.

Al menos Samantha debía estar a tiempo para el baile, aprovechando que aún quedaban unos minutos fue con Serpent y Thomas.

— Quería agradecerle por el obsequio — Dijo Samantha a Thomas.

— A sido un placer, sabía que te verías muy bella — Dijo Thomas sonriendo —. Eres mi hijo, pero si le haces algo a esta chica tu y yo tendremos una charla que jamás te olvidaras — Le dijo a Serpent quien trago en seco y asintió —. Buen chico, ahora diviertanse tengo que hablar con Gryffin.

— Le dirás a Neville que no le haga daño? — Pregunto el pelirrojo a su padre.

— Que? No, todos amamos a Neville él es incapaz de romperle el corazón a alguien — Dijo Thomas haciendo sonreír a Samantha quien estaba de acuerdo con ello —. A la que le daré una advertencia será a Gryffin.

Los dos chicos se vieron entre sí con cierta diversión viendo como Thomas hablaba con Gryffin siendo de igual de pacífico que con Serpent pero con total autoridad a lo que su hija asintió mientras rodaba los ojos y más aún cuando Samantha la vio con burla.

— Tenemos suerte que tu padre está cerca — Dijo Samantha al ver que Thomas permanecia al lado de Gryffin por unos minutos —. Sino vendría por nosotros ahora.

— Es cierto, mejor vámonos — Dijo Serpent tomando la mano de la pelinegra para irse con los demás campeones.

Allí cruzo miradas con Cedric quien sonrió un poco pero al ver que venía acompañada se sintió algo desilusionado y molesto consigo mismo por no haberla invitado a tiempo.

— Todos los alumnos a dentro por favor, y los campeones junto a sus parejas por aquí! — Los mencionados siguieron a Mcgonagall cuando está los llamo.

Samantha sería la última en ingresar al salón junto con Serpent pero el muchacho le dio cierta tranquilidad al saber que estaba junto a ella.
Cuando las dos puertas se abrieron dejando ver a los alumnos, profesores e invitados allí no pudieron evitar sentir un poco de nervios por ello y más aún cuando tenían la atención de todos.
El profesor Flitwick dio comienzo con la orquesta anunciando a los campeones que era hora de bailar, Serpent tomo la cintura de Samantha con total timidez y respeto, ambos no se creían los mejores bailarines pero creían que estaban en buen camino por esa razón se dejaron llevar por la música. Luego Dumbledore y Mcgonagall se unieron a la pista para enseñar aquel talento que guardaba Gryffindor, de esa manera lograron que más alumnos fueran a bailar rompiendo con alguna tensión que en algún momento se creo.

Luego de lo formal inicio lo divertido, los chicos pudieron bailar ante la música alocada de la banda "Las brujas de Macbeth". Samantha había pensado que no podía divertirse tanto como esa noche.

— Vamos Herms, Viktor está loco por tí — Dijo Gryffin haciendo sonrojar a la chica.

Las tres amigas habían ido al baño y a descansar un poco mientras hablaban respecto a la noche que estaban viviendo. Caminaron por los pasillos encontrando diferentes escenas como besos, bofetadas o hasta llantos de chicas que le rompían el corazón y entre ellas Samantha logro ver a Angelina llorando sola.

— Es lindo que estén aquí pero necesito libertad — Dijo Gryffin al ver a uno de sus tíos acercarse a ellas.

— Que tal Granger? — Dijo viendo a Hermione y luego poso sus ojos en Samantha quien la vio de pies a cabeza —. John Rosier, un gusto — Dijo tomando la mano de la chica para depositar un beso en sus nudillos.

— Samantha...— Gryffin rodó los ojos y empujó un poco a John para que continuará caminando.

John era muy apuesto y muchas de las jóvenes suspiraron al verlo pero Gryffin rogaba para que Samantha fuese la excepción y no cayera ante los encantos de su tío por qué amaba la pareja que hacian con Oliver.
La pelinegra se despidió de ellos para ir con Angelina quien al verla intento fingir estar bien pero no logro hacerlo.

— Con George, peleamos — Sollozo.

Samantha la abrazo mientras le decía que todo estaría bien y que estaría ahí para ella a pesar de todo porque eran amigas.