Mi pequeña gran ilusión 「Yoonmin」 「Omegaverse」

Capítulo XVIII

No me gusta sentirme así de inseguro, el desconocer mis propios sentimientos es algo patético, el hecho de que ahora tenga un hijo no me hace un conocedor de la vida, no tuve la oportunidad de experimentar muchas cosas, esto no me gusta. El abrazo de el señor Min es tan cálido, su aroma me gusta, él no se separa de mi a no ser que yo me aparte, es demasiado considerado.

— Jimin dime ¿Que pasa?, sé que hay algo más que aún no me haz dicho — me dijo mientras acariciaba mi cabeza que aún seguía en su pecho.

— Yo... no lo sé, si lo supiera se lo diría

— Dime ¿Que es lo que sientes? ¿Que es lo que piensas?

— Me siento extrañamente inseguro pero desconozco la razón

— ¿Crees que sea por Bae y Jongsu?

— ¿Usted cree?

— Es probable, Bae es su hijo por lo que en algún momento tendrás que hablar con él y decírselo

— Hmm... tiene razón

— Tienes que desayunar, después pensaras en eso, por ahora debes comer — besando mi frente.

— Está bien, — sentandome frente a la barra de la cocina — señor, el lunes es mi día libre ¿Usted irá a trabajar ese día?

— Si es tu día libre es mejor trabajar desde casa ¿Por qué lo preguntas?

— E...es solo que el lunes Juwon me invitó a una cita junto a Bae

— Entiendo, — me dijo mientras comía — si es una cita ¿No sería mejor que vayas solo?

— Pero Ba...

— Yo puedo cuidar a Bae, no te preocupes ve y diviértete

— Gra...gracias

Por alguna razón me siento un poco decepcionado, lo tomó demasiado bien, aunque no sé que tipo de reacción estaba esperando. Después de haber desayunado me ofrecí a lavar los platos y los cubiertos, al principio el señor Min se negó pero terminó aceptando, es lo menos que puedo hacer estando aquí. Comencé a ordenar y a limpiar lo que pude, no había mucho que hacer así que terminé muy rápido.

— ¿Jimin puedes dejar de trabajar y hacer esas cosas por favor?, está es tu casa, no te traje para que seas mi empleado

— Lo siento, pero quiero hacerlo, además debo admitir que no me gusta el desorden

— Trataré de ser más ordenado de ahora en adelante ¿Está bien? — preguntó con una sonrisa.

— Está bien

— Ahora por favor descansa

Hice lo que me pidió y me senté junto a él, seguía trabajando, me pregunto muchas veces si el señor Min descansa en algún momento.

— Señor ¿Usted en qué momento duerme? — pregunté mirando su rostro.

— Hmm... cuando tengo tiempo — respondió mientras trabaja en su computadora.

— ¿Y cuando es eso señor?

— Jimin, puedo pasar varios días sin dormir no porque no quiera hacerlo sino porque puedo, cuando sienta la necesidad de dormir lo haré

— Pero esta mañana usted estaba durmiendo en el sofá con la computadora encendida

— Lo sé, lo lamento, no quise ir a la cama así que decidí dormir en el sofá

— Pero seño...

— Estoy bien Jimin no te preocupes, soy capaz de cuidar mi propio cuerpo, el que me preocupa eres tú