Capítulo 12

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Llegamos a Hogwarts, me recibieron el profesor Dumbledore y la profesora McGonagall y me explicaron que tenía 2 horas libres antes de la cena en el gran comedor, donde me presentarían ante todos y donde el sombrero seleccionador me asignaria una casa. Les agradecí y se retiraron dejándome con el trío de oro.
—¿Quieres recorrer el castillo? —preguntó Hermione entusiasmada
—Claro —le sonreí— ¿Vienen chicos?
—Me encantaría pero debo ver a Hagrid —se excuso Harry
—Y yo muero de hambre así que iré a ver que puedo comer—dijo Ron mientras se iba
—Bueno, entonces supongo que los veo en la cena —dije
—Claro Vanessa ahi nos vemos –aseguró Harry despidiéndose de mi con un beso en la mejilla.

Hermione me enseñó los jardines, varios de los salones, el gran comedor, su sala común, mi probable sala común (Slytherin), la torre de Astronomía, etc.
—¿Qué te parece? —preguntó cuando estábamos por llegar de nuevo al Gran Salón porque ya casi era hora de la cena.
—Es hermoso Hermione —sonreí— solo espero no perderme —reí
—Jajaja ya verás que no, además no te preocupes iremos juntas a todas las clases —aseguró
—Gracias Hermione —la abracé
—No hay de que Vanessa, y dime Her —dijo amable
—Esta bien Her, y tu dime Nessa
—Jaja esta bien Nessa —dijo— ¿En qué casa te gustaría quedar?
—La verdad no sé, espero que en la misma que ustedes —mentí
—Ojalá si, para poder estar más tiempo juntas —dijo emocionada

La verdad quería TODO menos quedar en Gryffindor, pero debía mentir y decirle a Hermione que ojalá me quedara en su casa para que viera que soy inofensiva.

—Espero lo mismo Her, aunque ¿no dejarás de hablarme si quedo en otra casa verdad? —pregunté fingiendo tristeza.
—¡Por supuesto que no! —aseguró— la verdad me caíste muy bien, eres muy linda y de verdad espero que podamos ser muy buenas amigas.
—Yo también espero que seamos grandes amigas Her, adoro tu gran personalidad —dije sonriendole condescendiente.
Dio la hora de la cena y la profesora McGonagall se acercó a mi y me dijo que esperara afuera del Gran Comedor, a que el profesor Dumbledore diera el anuncio de mi llegada. Vi como todos comenzaban a entrar y al final Hermione ingresó también al Comedor y yo me quedé afuera esperando a que me llamaran.
Pasaron cerca de 10 minutos hasta que el Sr. Filch se acercó a mí y me dijo que ya podía entrar para que el Sombrero Seleccionador me asignara una casa.
Suspiré.

—Bueno Vanessa aquí vamos —me dije a mi misma

Las puertas se abrieron y todo el mundo volteó a verme, caminé muy segura de mi misma, y con autoridad para que desde ese momento les quedara claro a todos quien era yo y quien era la que mandaba a partir de ahora.
Pude escuchar uno que otro comentario de varios alumnos que decían que era muy bonita, que como podía ser que yo fuera una Black, que ojalá quedara en su casa, etc.
Llegué hasta el profesor Dumbledore y me pidió que me sentara en un banquillo, lo hice y me colocó el Sombrero Seleccionador.

—Vaya, vaya... —comenzó a decir el Sombrero— ¿qué tenemos aquí?

Me tense en ese momento, porque creí que revelaría mi verdadero apellido, pero gracias a Merlín no fue así.

—Eres astuta, inteligente, valiente, ambiciosa, una líder nata... —me describió el Sombrero— quedarías excelente en Slytherin... aunque también muy bien en Gryffindor...
—¡No! Gryffindor no —dije en voz baja para que sólo él pudiera escucharme
—¿Estás segura? —insistió
—Sí
—De acuerdo... Entonces yo elijo: ¡SLYTHERIN!

Todo Slytherin celebró, me quitaron el Sombrero y me ordenaron que me dirigiera a mi mesa. Busqué un lugar desocupado y para mi desgracia, el único lugar que había era al lado de Draco, suspiré y caminé imponente hasta el lugar. El profesor Dumbledore ordenó que se sirviera la comida y esta apareció sobre las mesas.
—Con permiso —dije tomando asiento
—Adelante —respondió un chico de tez morena oscura, ojos marrones y pelo negro, que estaba sentado frente al lugar que ocupé.
—Gracias —le sonreí, ignorando a Draco que me miraba con ganas de decir algo.
—¿Asi que Black eh? —preguntó el chico
—Si, Vanessa Isabelle Black, mucho gusto —dije arrogante
—Mucho gusto, Blaise Zabini —dijo tendiendome la mano por encima de la mesa.
Se la estreche y le sonreí. Al parecer Draco no sabe seguir instrucciones pues interrumpió presentándose también.
—Yo soy Draco, Draco Malfoy —dijo volviéndose hacia mí
Respiré profundo tratando de controlar mi irritación ante su desobediencia y terquedad. Me volví hacía él y le sonreí forzadamente.
—Mucho gusto —dije mientras ponía mi atención en la comida, la verdad moría de hambre.
Otra chica de cabello negro y ojos verdes que estaba sentada frente a Draco también se unió a la conversación.
—Yo soy Pansy Parkinson
—Un gusto —sonreí forzada y me dispuse a comer.
Pansy comenzó a hablar con Draco y la verdad ni siquiera puse atención a su conversación.
— ¿Se puede saber de quién eres hija? —interrumpió Blaise
Lo miré con cara de pocos amigos por haber interrumpido mi comida pero suspiré y supuse que debía hacer amigos de mi propia casa.
—Mi madre es Andromeda Black —aclaré
—No sabía que había una Andromeda en la familia Black
—Lo sé, casi nadie lo sabe mi madre fue borrada del árbol genealógico de la familia —expliqué
—¿Por qué? Si se puede saber —preguntó
—¿Cómo que eres muy curioso no? —bromee
—Jajaja algo... —reconoció Blaise
—Pues mi madre fue declarada traidora a la familia por no defender la pureza de nuestra sangre y ayudar y defender a sangre sucias y muggles —dije fingiendo molestia
—Ohh ya... ¿Y tú que piensas sobre eso? —preguntó muy interesado
—¿Sobre la pureza de la sangre?
—Sí
—La verdad no me interesa, no pierdo mi valioso tiempo con temas tan absurdos y sin importancia. Yo soy de sangre pura y es lo único que me importa —le aseguré con soberbia
—Definitivamente nos llevaremos bien —aseguró mientras me dedicaba una amplia sonrisa la cuál compartí.
Seguimos hablando durante el resto de la cena, le expliqué lo mismo que al trío de oro sobre los años que mi “madre” estuvo desaparecida, de mi educación hasta ahora y el porque de mi llegada tan repentina a Hogwarts; mientras teníamos la mirada furiosa de Draco sobre nosotros, a la cuál no le tome ni la más mínima importancia. Blaise me cayó muy bien, supuse que seríamos buenos amigos y grandes aliados, que era justo lo que necesitaba en esos momentos.
Terminó la cena y Snape se acercó a mi para guiarme a mi habitación.
—Bueno chicos gusto en conocerlos, los veo mañana —me despedí de los tres, guiñandole un ojo a Zabini.

Seguí al profesor hasta las mazmorras del Castillo, donde me condujo por un largo pasillo mientras me explicaba.
—Debido a que regularmente no tenemos alumnos nuevos a estas alturas, no hay habitaciones compartidas disponibles, así que tendrá una para usted sola un poco más alejada de las demás a petición de su padre.
—¿Cómo lo hizo?
—No pregunte, sólo lo hizo y se aseguró que su habitación sea la más cómoda y equipada.

Rodé los ojos, pues creí que exageraba.

—Está bien
—Bien, sus cosas ya están dentro —dijo mientras nos parábamos frente a una puerta— espero que esté cómoda y cualquier cosa que necesite no dude en avisarme ¿si?
—Por supuesto profesor —respondí con algo de burla en mi voz.
—Descanse, mañana será un día largo—dijo— su horario y uniformes ya están listos, buenas noches señorita Black—se despidió
—Gracias, buenas noches —respondí entrando a mi habitación

Quedé muy sorprendida, pues Snape no exageró mi habitación era enorme y completamente equipada con todas las comodidades que podría necesitar, era casi del tamaño de dos habitaciones normales, tenía una cama de cuatro postes con cobijas y almohadas color esmeralda en diferentes tonalidades, un escritorio color negro donde estaba mi horario de clases y un hermoso tocadiscos mágico, un armario del tamaño de toda la pared donde ya estaban varios uniformes, un tocador, un gran espejo de cuerpo completo y un baño privado sencillo pero elegante, además de un pequeño mueble junto al escritorio con todos mis libros, pergaminos y útiles que había comprado en el Callejón Diagon. Lo que sea que haya hecho mi padre al parecer resultó.

Mis tres maletas estaban junto al armario esperando a ser desempacadas pero no tenía ganas de acomodar todas mis cosas, ya las arreglaría mañana. Así que saqué una pijama, me meti al baño y me di una deliciosa ducha caliente, mientras pensaba en cual sería el plan para mañana, debía mantener el equilibrio entre mi relación con el trío de oro y mis nuevos amigos de Slytherin, además debía mantener mi distancia con Draco pero sin que se viera sospechoso. Sabía que debía vigilar y acercarme más a Potter y sus amigos, pero también debía hacer mis propios amigos y seguramente futuros aliados sea cual sea la decisión que tome: Salvar o destruir el mundo.
Además de que también me preocupaba el uso de mis poderes, aún no sabía todo lo que podía hacer y me daba miedo que algo se manifestara frente a todos, no estaba segura de querer que todo Hogwarts se enterara de mis poderes.
Aún...

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Les quiero aclarar que solo haré las dos versiones de los capítulos (de Vanessa y de Draco) solamente algunas veces cuando sea importante ver sus dos puntos de vista sobre un mismo hecho.

Sin más espero que les esté gustando y le sigan dando mucho love. L@s amo! 🤗 ❤️

Recuerden que pueden dejarme sus sugerencias y peticiones.

La Princesa De Slytherin ||Draco Malfoy Y Tú ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora