La Princesa De Slytherin ||Draco Malfoy Y Tú ||

Capítulo 27

Esa noche no pude dormir, di vuelta tras vuelta en mi cama toda la noche, intente leer un libro: no pude concentrarme; intente escuchar música: ni si quiera la disfrutaba. Estuve asi hasta casi las 3 am cuando me di por vencida y salí de mi habitación, camine silenciosamente por los pasillos hasta llegar a la sala común, me acerque a una de las ventanas y me senté en el alfeizar intentando que la vista del lago negro y el sonido del agua chocando contra las ventanas me tranquilizara. Estuve ahi sentada alrededor de 20 minutos sin hacer ni decir nada y solamente sumergiéndome en mis pensamientos que no eran para nada positivos, mi mente me atormentaba con imágenes del Cáliz sacándo el nombre de Cedric; hasta que una voz conocida me sacó de mis cavilaciones.
-¿Qué haces despierta tan tarde? -preguntó amablemente
-Lo mismo podría preguntarte -respondí sin volverme a mirarlo
Rió.
-Siempre a la defensiva
-Instinto de supervivencia -respondí inmediatamente
Tomó asiento frente a mi en el alfeizar. Nuestra relación había mejorado mucho desde nuestra discusión en la Torre de Astronomía, días después el se había disculpado (asombroso, lo sé) y había aceptado su error (quedé en shock) al querer interferir en mi vida privada y mi relación con Cedric, me pidió que siguiéramos siendo amigos como antes, cosa que agradecí enormemente pues él es el único que siempre ha estado para mi, al único que conozco desde que somos niños, el único que sabe mis mas profundos miedos y yo los de el, conocemos lo que nos hace felices y lo que no, conocemos absolutamente todo uno del otro y aunque ya quedó claro que no le gusto... aun así quiero tenerlo cerca. A pesar de que había hecho muy buenos amigos aquí y con la mayoría había conectado... estoy segura de que en este momento, por nadie podría activar mi alma como escudo a través de un sentimiento intenso como había sucedido con Draco para salvarle la vida
Sí, adoraba al trío de oro, a los gemelos, a Ginny, a Luna, a Neville e incluso mucho más a Cedric, pero con ninguno tenia ese tipo de conexión tan especial, ni siquiera con mi hermano. Draco era alguien sin quien literalmente no podía vivir, aunque teníamos peleas, discusiones y sinfín de diferencias, no me imagino mi vida sin él, sin sus constantes comentarios sarcásticos y mordaces, sus burlas, nuestras competencias absurdas, etc.

-Escuche que tu "novio" metió su nombre en el cáliz de fuego -intervino pronunciando la palabra "novio" de una manera muy rara, casi como si le costará decirla, pero no le tomé importancia.
-Si -respondí cortante intentando que no se me notará en la voz las ganas tan intensas que tenía de llorar
-¿Y cómo estas con eso? -preguntó con genuino interés
Giré un poco la cabeza para no hacer contacto visual con Draco, y sentí como poco a poco mis ojos volvían a empañarse por enésima vez en el día.
-Bien, es su decisión
Pero Draco me conocía demasiado bien, sabía que yo no estaba bien con eso. Se acercó un poco más a mi y me tomó de las manos que tenía sobre mis rodillas.
-Ey, mírame -lo ignoré- mírame -insistió
En el momento en que mis ojos empañados por las lágrimas se encontraron con los suyos inmediatamente una serie de sollozos empezaron a escapar de mis labios sin que los pudiera controlar. Draco se acercó a mi y me encerró entre sus brazos, inmediatamente me aferré a él intentando fundirme entre sus brazos para lograr calmarme.
-Tranquila, el Cáliz no elegirá su nombre -afirmó- hay personas mucho mejores que él para representar a Hogwarts en el Torneo
No pude evitar reírme un poco, pues su argumento para tranquilizarme era desprestigiar a Cedric y hacerlo quedar mal asegurando que había personas mucho mejores que él, era Draco siendo tan... Draco.
-Eso es bueno -interrumpió mis pensamientos
Me separé un poco de él para mirarlo
-¿Qué cosa?
-Al menos ya te reíste un poco -dijo sonriendo
Le respondí la sonrisa y me limpié las lágrimas
-Tranquila, no lo elegirán, no es la gran cosa como él quiere creer -dijo rodando los ojos
Esa era la mejor razón que me habían dado para creer que el nombre de Cedric, así que decidí aferrarme a ella.
-Si, tal vez tengas razón -dije ya un poco mas calmada
-Lo se, siempre la tengo -concordo con sus típicos aires de grandeza y superioridad que le quedaban tan bien.
Sonreí.
Hasta ese momento contemplé la verdadera posibilidad de que no fuera elegido, Draco me contó que muchos chicos y chicas de Gryffindor y Slytherin habían metido su nombre y me dio una pequeña reseña de los mejores de ellos, y aunque me costaba admitirlo había uno que otro que sin problema sería mucho mejor y más capaz que Cedric para competir en el Torneo, y por primera vez en todo el día sentí verdadera calma. Seguimos hablando durante un rato más hasta que a ambos nos comenzó a ganar el sueño, le agradecí a Draco el haberme acompañado y calmado lo suficiente como para que pudiera dormir lo que quedaba de la noche, nos despedimos con un fuerte abrazo y ambos nos dirigimos a nuestras habitaciones.
Pude dormir muy bien el resto de la noche hasta casi las 8 am, bajé a desayunar con el trío de oro y el resto de mis clases pasaron sin la mayor complicación, conocí a algunos chicos y chicas de las escuelas invitadas y me lleve muy bien con ellos. Cedric y yo estuvimos un poco distanciados y cuando nos hablábamos se podía sentir una gran tensión en el aire, pero no discutimos y de vez en cuando intercambiamos miradas nerviosas.
Yo quería con todo mi corazón que hubiera alguien mucho mejor y mas preparado para representar a Hogwarts en el Torneo que Cedric mientras él quería todo lo contrario.