La Princesa De Slytherin ||Draco Malfoy Y Tú ||

Capitulo 33

Al día siguiente Draco y yo estábamos muy cansados pues nos habíamos quedado despiertos hasta tarde. Salí rápidamente de su habitación y me dirigí a la mía para bañarme y cambiarme, en menos de 20 minutos ya estaba lista y me encontré con Draco a la salida de nuestra sala común.
Fuimos juntos al Gran Comedor y nos sentamos junto a los demás chicos y comenzamos a platicar animadamente hasta que alguien me tocó el hombro.
—¿Podemos hablar?
Draco se levantó de inmediato y lo obligó a dejar de tocarme
—Largo de aquí Potter, ya dijiste suficientes estupideces ayer
—No vine a hablar contigo Malfoy
Me levante y me puse en medio de ambos.
—¿Quieren dejar de comportarse como niños de 5 años? —pregunte irritada— ¿Que es lo que quieres Harry?
—Sólo vine a pedirte perdón por haber actuado así contigo ayer —dijo Harry realmente afligido— lo qué pasa es que todo se me vino encima, lo del Cáliz, lo de Ron y básicamente lo de todo Hogwarts
—Lo se Harry, han pasado muchas cosas en pocos días
—Entonces ¿me perdonas? —preguntó esperanzado
Fingí que me lo pensaba mejor, pero obviamente lo perdoné. Harry me abrazo y me preguntó si quería dar un paseo después de clases para platicarme lo que Hagrid le había dicho, a lo que por supuesto acepté.

—Y bien, ¿que fue lo que te dijo Hagrid anoche?
Estábamos caminando por el pasillo que daba hacia el patio y tratamos de alejarnos lo más posible, al parecer nadie mas podía escuchar lo que Harry tenía que decirme.
—Ya se cual será la primera prueba del Torneo
—¿Qué? ¿Cómo? ¿Cual?
Harry rió y me platico primeramente como fue que se enteró que Hagrid lo buscaba y luego como fue que Hagrid le enseñó los dragones que el hermano de Ron había traído de Rumania.
—¿Así que dragones, eh? Aunque no lo creas eso no ayuda mucho a mi nerviosismo
—Jaja ya lo sé, pero es mejor saberlo desde antes e intentar prepararnos lo mejor posible, tenemos apenas poco más de una semana...
—Lo se, aunque la verdad aunque tuviera hasta el día del juicio nunca podría estar lista para enfrentarme a un dragón
Ambos nos miramos y soltamos una carcajada, no nos quedaba más que reírnos.
—¿A donde irás? —me preguntó
—Supongo que a mi sala común, quiero alejarme un poco de todo esto
—Lo se, entonces te acompaño y supongo que yo igual me iré a mi habitación
Íbamos caminando para entrar al castillo cuando un grupo de chicos pasó a nuestro lado riéndose y en cuyas capas pude ver un broche mágico que tenía la cara de Cedric junto a una inscripción que decía "el mejor" o "ganador", pero que mágicamente cambiaba a la cara de Harry y en cambio tenía una inscripción que decía "tramposo". Voltee a ver a Harry y pude ver en su cara que también él se había dado cuenta de los broches. Seguimos caminando y de la nada Harry me detuvo y me dijo que lo esperara.
—¿A donde vas? —pregunte cuando vi que iba en dirección a Cedric
—Le avisaré sobre los dragones
—¿Es enserio? Después de eso —dije señalando el broche de un chico que pasaba por ahí— ¿piensas avisarle sobre los dragones?
Harry se acercó a mi.
—Tal vez él no haya hecho eso
—A veces se me olvida que eres un Gryffindor que nunca piensa mal de los demás y que siempre perdona todo —dije rodando los ojos
Harry me miro con culpabilidad y bajo la cabeza.
—Está bien si es lo que quieres —dije caminando hacia Cedric— pero que sepas que si fuera por mí dejaría que los dragones se lo comieran.
Era cierto aunque la verdad con los últimos acontecimientos que habían pasado desde lo del Cáliz no había tenido mucho tiempo de pensar en Cedric, pero sinceramente no podía olvidarlo ni dejar de quererlo de un día para otro, había soñado varías veces con él y en cómo sería nuestra reconciliación pero me había negado a aceptar mis sentimientos, era una Riddle y nosotros no damos segundas oportunidades... aunque tal vez esta sería la excepción.

Ambos nos acercamos a donde estaba Cedric y sus amigos, pero él estaba de espaldas así que los primeros en vernos fueron sus amigos quienes empezaron a decir estupideces, a insultar y a burlarse de Harry, aunque curiosamente de mi no decían nada acerca de lo del Torneo sino simplemente le dijeron a Cedric "mira Ced, ahí viene la causa de tu insomnio", mientras se reían.
Al parecer Cedric sabía exactamente a quien se referían cuando dijeron "la causa de tu insomnio" porque inmediatamente volteó y dijo mi nombre.
—Nessa...
Lo ignoré.
—¿Podemos hablar? —le preguntó Harry
—Amm si claro —respondió Diggory como apenas notando la presencia de Harry
Los 3 nos alejamos un poco y Harry comenzó a decirle lo que sabía sobre cómo sería la primera prueba del Torneo, sin embargo Cedric a penas le prestaba atención pues no me quitaba los ojos de encima.
—Espera ¿qué? ¿dragones? —preguntó Cedric apenas procesando lo que le había dicho Harry
—Si dragones, esas criaturas mágicas que vuelan, lanzan fuego y que nos mataran a todos —dije burlona
—¿Viktor y Fleur lo saben? —preguntó Cedric a lo que Harry le confirmó que sí.
—Está bien, gracias por avisarme Harry
Ambos nos disponíamos a irnos cuando Cedric volvió a hablar.
—Ah y sobre los broches... les pedí que no los usaran
—Si claro —dije burlona sin creerle una palabra, era obvio que Cedric disfrutaba ser el centro de atención a costa de Harry
—¿Podemos hablar? —me preguntó Cedric
Voltee a ver a Harry pidiéndole ayuda, pero Harry solo sonrió levemente.
—Los dejare solos
Harry se fue dejándome a solas con Cedric.
—En verdad lo siento
—¿Ah si? ¿Por cual de todas las cosas?
—Por todo, desde haberme portado como un idiota cuando salió tu nombre en el Cáliz, hasta esos estúpidos broches
Parecían sinceras sus disculpas, pero aún así no era suficiente.
—Bueno si eso es todo, yo me voy
Cedric me cortó el paso y me recargo suavemente contra un árbol.
—Por favor Nessa, ya no se que hacer para que me perdones. Ya se que fui un idiota y lo acepto, pero en verdad no consigo dejar de pensar en ti, en todo lo que hacíamos juntos y... mis amigos no mintieron, en verdad eres la causa de mi insomnio, llevo días sin poder dormir y atormentando a mis amigos al hablar todo el día de ti y en intentar crear un plan para recuperarte —dijo con los ojos llorosos haciendo que los míos igual se empañaran de lagrimas
—Cedric yo...
—Por favor, sólo te pido una última oportunidad, te juro por la vida de mi padre que jamás volveré a hacerte sentir mal, nunca volveré a dudar de ti y siempre me mantendré a tu lado y te seguiré a donde sea que vayas... te lo juro
No me di cuenta en que momento Cedric que acercó tanto a mi, pero no pude resistirlo más y acabé con el mínimo espacio que nos separaba para encontrar sus labios húmedos y suaves que no me había dado cuenta cuánto los había echado de menos.