Esta historia estara protagonizada por la descendiente de Salazar Slytherin: Vanessa Isabelle Riddle, hija del Señor Tenebroso y heredera de Slytherin, quien por órdenes de su padre debe infiltrarse en Hogwarts, ganar la confianza de alumnos y maest...
Y ahí estaba, el Ironbelly Ucraniano rugía y lanzaba fuego por todos lados, aún no lograba verme pues me mantuve oculta por unos segundos tomando valor para llevar a cabo la locura que se me había ocurrido. Desde que salí a la arena había localizado el huevo, el cual estaba justo debajo del Ironbelly, por lo que hiciera lo hiciera no había manera de recuperar el huevo más qué haciendo que el dragón se moviera de ahí... Cuando por fin agarre valor, aún oculta tras unas rocas y sin que el dragón me viera lance un hechizo y transforme una roca en un ciervo que distrajo al dragón mientras yo caminaba sigilosamente hacia la parte trasera del dragón. "¿Que mierda estas haciendo Vanessa?" "Ya lo verás"
Mientras el dragón continuaba distraído con el ciervo intentando devorárselo, escale cuidadosamente por una roca enorme que llegaba casi hasta un lado de donde estaba la cabeza del dragón, estuve apunto de resbalar un par de veces pero logré llegar a la cima, y sin pensarlo más di un salto para situarme en la cabeza del dragón. En el momento en que el dragón notó mi presencia sobre su cabeza comenzó a revolverse violentamente intentando tirarme, pero logré sujetarme fuertemente y me mantuve firme sobre su cabeza. Sólo podía escuchar los vítores en todo el estadio y uno que otro grito que no podía entender. En ese instante escuché una voz completamente extraña, fuerte y rasposa, que no sabía de donde venía pues la había escuchado muy cerca como si me la hubieran dicho al oído. —Ya estoy harto ¡déjenme en paz! Al mismo tiempo que el dragón lanzaba una fuerte y poderosa llamarada de fuego, mientras seguía revolviéndose violentamente. —Agh ¡por favor, para! —grite, aunque ni siquiera yo sabía a quien se lo había dicho Como por arte de magia el dragón cesó todos sus movimientos y se quedó quieto como... esperando. Lo único que pude escuchar fueron las expresiones de asombro del público. Me incline hacia un lado intentado buscar la mirada del dragón, quien me miró fijamente y una vez más esa extraña voz se volvió a escuchar. —Lo lamentó mucho, mi señora. No tenía idea que era usted. Mi cerebro entró en shock, seguramente me estaba volviendo loca al creer que estaba hablando con un dragón. —Amm... no, no te preocupes —dije apenas pudiendo articular palabra —¿Se encuentra usted bien? —preguntó "Nessa ¿qué está pasando?" —irrumpió la voz de Tom en mi mente Ni siquiera pude responderle a Tom, en verdad estaba en shock. —Si... si, estoy bien —respondí—ahora si no te importa debo recuperar ese huevo... —Por supuesto mi señora, sujétese bien —advirtió antes de extender sus alas, y alzarse en vuelo rompiendo las cadenas que lo sujetaban con extrema facilidad. Ahogue un grito al momento en que sentí la presión del aire al ir subiendo cada vez más, sin embargo decidí relajarme y disfrutar el momento, sentirme viva al sentir el frío viento golpeando mi cara. No supe en que momento ni exactamente como fue, pero de mi boca salió la palabra: "Dracarys". En ese momento el dragón emitió una enorme llamarada de fuego, la cual pasó muy cerca de las gradas donde estaban mis amigos.
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"¡Carajo Vanessa! ¿Qué estás haciendo?" De nueva cuenta no pude responderle a Tom, pues el dragón me volvió a hablar. —¿Está lista para recoger su huevo, mi señora? —Claro —respondí con renovada confianza y seguridad. El dragón, que había estado volando alrededor del estadio, se encaminó al lugar donde yacía el huevo dorado, cuando estuvimos casi sobre el huevo sin pensarlo más di un salto y aterrice perfectamente sobre el suelo, me incorporé y tome en mis manos el huevo dorado haciendo que una ola de vítores y gritos de júbilo estallaran por todo el estadio. Camine hacia el centro para levantar el huevo y que todos lo vieran, cuando sin darme cuenta tenía detrás de mi al dragón quien me rodeaba y parecía que me protegía...
