C43: La vida es un minuto

72 10 1
                                    


Querido Steve Horvat;

Hace unas semanas me enteré que no eres mi padre.

La noticia obviamente me tomó por sorpresa y te juro que en ocasiones pensé que quería morirme para no tener que lidiar con el dolor de saber que toda mi vida fue un engaño. Probablemente tú lo sabías y decidiste callar para no ocasionarme un dolor como el que siento en estos momentos. Tal vez si tú hubieses estado acá las cosas hubiesen dolido menos, me habrías tomado de los hombros, me habrías sacudido con fuerza y me habrías dicho que el dolor es pasajero, que en poco tiempo no sería más que un mal recuerdo y que vamos a reírnos de esto.

Fue realmente impactante para mí saber que además de no ser tu hija; mi padre es un hombre que estuvo casado. ¿y sabes que es lo mejor? ¡Que estuvo casado con la madre de mi mejor amiga! Somos medias hermanas ¿puedes creerlo? Es decir, tal vez la idea en el fondo puede llegar a sonar linda, Danna es increíble de pies a cabeza, tiene los sentimientos más puros que te puedas imaginar y carga en sus hombros un pasado realmente tormentoso y horrible. La conocí de casualidad cuando mamá enfermó y tuve que tomar su lugar con los chicos. Al principio me daba algo de pánico ser su amiga pues ella es la hija adoptiva de mi jefe pero lo superamos, quiero decir. Y ahora saber que ella es mi media hermana es demasiado abrumador.

Sé que no tiene la culpa de absolutamente nada de lo que pasó, ella ni siquiera había nacido cuando yo vine al mundo pero no puedo mirarla a la cara sin pensar que mi madre estuvo con su padre cuando ellos aún estaban casados. Que es mi hermana menor, que pasé de tener una hermana menor a tener dos. Me asusta demasiado pensar que la relación que tenía con Danna se dañó mucho más de lo que puedo llegar a ser capaz de pensar. Me aterra la idea de saber que probablemente las cosas no volverán a ser como antes entre nosotros. Me aterra pensar que nuestra amistad se pudo haber roto y me aterra mucho pensar que por mis decisiones perdí a la única amiga real que he tenido en mi vida. A mi hermana.

Tal vez mi comportamiento está siendo algo exagerado pero no puedo parar de pensar una y otra vez que mi vida se terminó en el momento en el que descubrí que todo fue una mentira. No puedo dejar de pensar que siempre admiré a mamá, que siempre tuve una idea errónea sobre ella, para mí siempre fue una mujer entregada y dedicada a su familia, siempre fue una buena mujer que hizo hasta lo que no pudo para mantener unida y a salvo a su familia, a sus dos hijas. Siempre tuve la idea de que ella había amado tanto a su esposo hasta que la vida se lo arrebató, que había sido la mejor esposa para él; sé que no tengo derecho a juzgarla porque al final de cuentas se preocupó por mí, me cuidó y me crio de la mejor manera posible pero cuando uno tiene el corazón hecho pedazos es muy difícil no hacerlo.

Me haces mucha falta ¿sabes? Siento que cada segundo que pasa solo me pierdo más y más en el camino. Siento que con cada segundo que pasa estoy peor que en el anterior y todo lo que quiero hacer es salir corriendo y no volver más. Tal vez las cosas serían mucho más fáciles si tú estuvieses aquí. No tienes ni idea de la manera en la que te echo de menos, papá.

Te ama para siempre, Cam.

Camila dejó el bolígrafo sobre la mesa y ancló sus ojos marrones en la fotografía que descansaba sobre su mesa de noche. La Camila de seis años en brazos de su padre que parecía completamente feliz le devuelve la mirada y pequeñas lágrimas escurrieron de sus ojos.

-Tal vez las cosas en serio serían mucho más fáciles si tú estuvieses aquí.-repite en voz baja.

Camila soltó un largo suspiro y se acurrucó más contra las almohadas de su cama pensando en lo que haría en dos días. Hacía dos semanas que se había enterado que era la hermana de Danna y huyó como una verdadera cobarde, con Zabdiel las cosas tampoco estaban bien y ahora que lo pensaba mejor había actuado de una manera infantil y exagerada ¿Qué era lo que había hecho? Le había pedido que la dejara en paz cuando en realidad lo único que quería hacer era esconderse en su pecho y rodearse con sus brazos...no volver a salir de ahí hasta que su vida estuviese en orden de nuevo y es que la vida de Camila Horvat se había vuelto un caos puro, permanecía en su habitación la mayor parte del tiempo contemplando el techo y pensando en todo lo que había pasado.

LA CHICA DEL VESTUARIO|ZABDIEL DE JESÚS|CNCO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora