C6: Una roomie loca.

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—¿Puedo saber a qué se debe esa sonrisa maliciosa que no augura nada bueno?—cuestionó Camila observando a Danna.

—Joel me contó que saliste con Zabdiel—inquirió la castaña moviendo sus cejas de manera divertida un par de veces. Camila entornó los ojos y negó.

—Que comunicativo que es Joel—se quejó y luego rieron.—Además, en sí no salí con él—decretó. Danna se quedó quieta observándola y Camila se ruborizó.—Bueno, sí. Si salí con él pero no en una cita...sólo fue porque se ofreció para acompañarme al centro comercial...necesitaba un portarretrato para tu regalo...pero eso es todo...—explicó llevando su mirada hasta las perchas de ropa que tenía encima de un silla.

—Aja, claro...—susurró Danna.

—Es la verdad—replicó Camila con las mejillas un poco más sonrojadas que antes.

—Pero si yo no estoy diciendo nada—reprochó la castaña. Camila dejó escapar el aire de sus pulmones y le sonrió un poco.—¿Cómo fue?—cuestionó.

Camila rio.—Se me hacía demasiado raro que no me preguntases esto...—comentó sentándose junto a Danna.

—Entonces... ¿Cómo fue...?—insistió.

—No fue una cita, Danna...es decir, sólo fuimos juntos a comprar tus regalos de cumpleaños. Dudo mucho que eso cuente como una cita, la verdad—exclamó Camila soltando un largo suspiro.—Además, ¿Por qué estás preguntándome esto?

—Porque creo que te gusta Zabdiel y no lo sé, tal vez también le gustes a él—hilvanó.

—Deja de decir tonterías, amiga—se burló la pelinegra.

—Dame una buena razón por la cual no le puedas gustar a un chico como Zabdiel—pidió la castaña.

—Mejor tú dame una buena razón por la cual yo le podría gustar a un chico como Zabdiel—replicó Camila.

—Yo pregunté primero—se quejó la chica en medio de una risa divertida.

—Si hay alguien aquí que se robó el corazón de los chicos fuiste tú, y déjame decirte que da la impresión de que a Christopher se lo robaste más a que todos—le informó la pelinegra.

Las mejillas de Danna se sonrojaron y negó.—Muy buena manera de cambiar de tema, Camila—se quejó—Y eso no es cierto y tampoco importa en este momento. Estamos hablando sobre ti...—replicó.

—¿Te gustó el regalo?—cuestionó Camila ignorando el comentario de la chica. Danna entornó los ojos pero prefirió cambiar de tema, ya tendría más tiempo después de seguirla molestando.

—Está increíble...de verdad no me puedo creer que hayas vuelto con el dibujante de la calle para que lo hiciera. Es hermoso. Es algo que definitivamente va a estar en mi habitación—explicó con decisión. Camila sonrió.

—Me gusta que seamos amigas—confesó Camila mientras Danna cruzaba sus piernas y le sonreía ampliamente.

—También me gusta que seamos amigas y si entente halagada porque eres la primera amiga verdadera que hago en mi vida...o por lo menos la primera de mi edad.—susurró y Camila rio.

—Pues entonces es todo un honor, Danna Francis...

(...)

Las Vegas era lindo, pensó Camila mientras caminaba en dirección al restaurante del hotel. Realmente no le había puesto demasiada atención al lugar puesto que habían llegado de madrugada y todo lo que quería era dormir pero ahora que por fin despertaba –gracias a su estómago que no dejaba de protestar por un poco de comida- se daba cuenta que inclusive el hotel en el que se encontraban hospedados los chicos era completamente hermoso.

LA CHICA DEL VESTUARIO|ZABDIEL DE JESÚS|CNCO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora