Capítulo Extra (I)

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* Los capítulos extra no son obligatorios leerlos, pero se aconseja ya que contiene información relevante para el desarrollo de la historia además de la perspectiva de personajes secundarios *

Dylan

Eran las dos de la madrugada, la fiesta había logrado su apogeo, la música era ensordecedora, había alcohol mirases a donde mirases y la gente bailaba como si no hubiera un mañana. Debía de haber más de cuatrocientas personas, la mayoría de St. Jons. Hannah se había superado con esta fiesta.

Tayler se había marchado hace una hora con Kayla, mi amigo no podía evitar sacar su instinto protector con ella. Lo conocía lo suficiente como para saber que ella le interesaba, no sé de que forma pero de lo que estaba seguro era de que Kayla no le era indiferente.

Al principio pensaba que se trataba de que Kayla iba a ser su prometida pero en menos de dos semanas pude comprobar que mi teoría era falsa. Tayler siempre le preguntaba a Cat qué había estado haciendo Kayla durante el día, si ya se había adaptado a la mansión o si le parecía que ella se sentía a gusto.

Comprendí que mi mejor amigo realmente se interesaba por la chica con quién debía casarse, supongo que eso me tranquilizó. Nunca fui partidario del matrimonio concertado, sin embargo, ambos parecían haber adaptado a la situación y realmente creía que podrían llegar a ser como mínimo amigos.

-Hola, chicos- Suspiré al escuchar su voz.

No tenía nada en su contra, a parte de lo mucho que molestaba a mi cuñada, por lo que había adquirido un sentimiento de repulsa hacia Sophia. Recordé lo mucho que le molestaba a Kayla que la llamase cuñada, supongo que es por eso que ahora no puedo evitar llamarla así.

-¿Dónde está tu inseparable amigo? - Me preguntó Sophia.

La miré, llevaba un disfraz de moja sexy y había venido con una chica morena, esta iba vestida de azafata sexy. La reconocí, ella estuvo en la fiesta tras el partido de fútbol. El disfraz de ambas mostraba el inicio de sus pechos aunque el de Sophia era más revelador, los chicos del equipo que se encontraban a mi lado en el sofá tenían los ojos fijos en ambas.

-Si te refieres a Tay, está huyendo de acosadoras como tú- Respondí con una sonrisa.

-No estoy bromeando- Dijo molesta.

-Yo tampoco- Me encogí de hombros.

En realidad si que lo decía en serio, esta no era la primera vez que Sophia me preguntaba por mi amigo y eso no me gustaba en absoluto. No se lo había contado a Tayler porque conozco sus formas de resolver los problemas o las cosas que lo molestan, antes quería saber que tramaba Sophia.

-¿Alguien quiere jugar al juego de la botella? - Preguntó Sophia y su amiga la miró sorprendida y desconcertada.

No me gustaba nada la mirada que tenía, si algo había aprendido era nunca subestimar a mi enemigo y quisiera reconocerlo o no, Sophia podía llegar a ser uno poderoso si se lo proponía.

-Me largo- Espeté poniéndome en pie y largándome antes de que alguien se opusiera.

Me dirigí a la barra que estaba al otro lado de la sala, mi organismo pedía alcohol. Eran pocas las veces que podía permitirme beber sin control puesto que estar en el equipo de fútbol requería estar limpio, además de que con los ataques recientes debía mantenerme alerta.

Sin embargo, esta noche iba a ser la excepción. Había pasado el último mes trabajando junto a Tayler para encontrar información del enemigo, yendo a los entrenamientos del equipo y estudiando para mantener mi media de 9.5 en los estudios.

Las Reinas de la MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora