Capítulo 39. Bienvenidas a casa.

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Capítulo 39. Bienvenidas a casa.

Lo efímero de un momento, siempre se hace eterno en una memoria.

—Héctor C. Alcívar.


Estaba exhausta después de que Galia me había entrenado toda tarde en combate cuerpo a cuerpo, hay que admitir que es una luchadora muy buena, demasiado para mi gusto. Me dolía el cuerpo y mi acompañante no me ayudaba.

— ¿Arthur? —pregunto.

Él gruñe en respuesta. Bajo la vista y lo veo muy cómodo con la mitad de su cuerpo sobre el mío. Estoy incluso sudando.

Su cuerpo está siempre caliente.

— ¿Qué haces aquí? —pregunto acariciando su cabellera.

Pero en el momento en el que bosteza me congelo percibiendo el olor a alcohol. ¿Se ha ido a emborrachar?

Suspiro.

El saca su cabeza de mis pechos y se alza, me besa y luego nos da la vuelta haciendo que esta vez yo sea quién quede encima de él.

—Estás ebrio. —musito.

—Shh, duerme ángel, o el coco vendrá por ti. —murmura haciéndome reír. Intento zafarme de su agarre pero es fuerte incluso medio consiente.

Pero escucho aullidos que lo despiertan de inmediato. Arthur se levanta conmigo encima quedando sentada en su regazo, me sostengo de sus hombros.

— ¿Qué fue eso? —pregunto, el arrebato ha acelerado mi corazón.

Otro aullido Arthur se remueve.

— ¡Hey! —me quejo porque me ha arrastrado hasta la orilla.

—Son los chicos. —saca dos abrigos del armario, me pasa uno y sale de la habitación.

— ¿Los chicos? —pregunto aun sabiendo que no me podrá escuchar. Me coloco el abrigo rápidamente.

Dioses, ¿Qué habrá pasado?

Salgo de la habitación rápidamente y veo que Galia comienza a bajar las escaleras con rapidez. La sigo y juntas salimos de la casa. Jack y Arthur corren al bosque.

— ¿Galia? —pregunto asustada. Todo en lo que puedo pensar es en Acacia.

—No lo sé —exhala con fuerza—, no comparto la conexión de ellos y Jack no contesta a la nuestra.

La volteo a ver desconcertada.

— ¿Conexión?

Ella maldice por lo bajo.

—Es algo nuestro. —contesta rápidamente.

Los chicos regresan y corro hacia ellos cuando veo a Bailey sosteniendo a Nessia a instantes de caer ambas en la tierra.

— ¿Qué les paso? —me apresuro a mi amiga abrazándola arrodillándome frente a ella.

Galia se apresura y sostiene a Nessia. Esta inconsciente. Galia retira alguno de sus cabellos de su rostro dejándonos ver su tez pálida y sucia.

Clarke se convierte en humano dejándome ver su cuerpo desnudo baja la tenue luz que ofrecía la luz del porche. Volteo a ver a Bailey. No debí ver eso.

— ¿No te gustan mis partes nobles? —dice en broma pero a la vez tenso.

—No creo que sea tiempo de exhibicionistas. —mascullo.

Dark Academia © LIBRO 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora