Capítulo 32. Secuelas.

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Capítulo 32. Secuelas.

Angel y demonio por igual.


Acacia

Me duele la cabeza, el pecho, la piel... Me duele cada centímetro de mi cuerpo. Las imágenes no dejan de repetirse en mi cabeza una y otra vez como un disco rayado que no puedo sacar.

Necesito hablar con la madre de Jack, ella conoció a mi madre.

— ¿Y bien? ¿Valió la pena? —La seriedad de Jack haría que cualquiera le temiera. Es alto e impone carácter. Pero también es un idiota.

—Tranquilo, campeón. ¿Seguimos vivos, no? —Nicholas se acerca a él y lo abraza por los hombros sonriendo con su perfecta dentadura.

— ¿Sabes en el lío que estaremos todos si se enteran, Young? Rompimos la primera y única regla que nos impuso Cowen. No salir de la villa.

Me cruzo de brazos, entender la cabeza de Jack Allen es todo un enigma. En parte, si, no debíamos salir. Pero tampoco es que haya pasado la gran cosa, los lobos están bien entrenados, ya lo han demostrado.

—Las reglas se hicieron para romperse, cariño. —Se mofa Clarke encendiendo un cigarrillo. Cigarrillo que Jack toma entre sus dedos apagándolo y tirándolo al suelo.

—Esto es serio. —Jack se aleja de Nicholas y camina hasta mí hasta inclinarse un poco ya que él es muy alto, y yo no. — ¿Valió la pena pequeña, Leatherwood? —La ironía amarga hace que me den ganas de golpearlo.

—Estamos bien, gracias. —Me enderezo, aunque sigo siendo más baja que él por mucho. —Así que ya puedes sacarte el palo del trasero y ver que puedes hacer para ayudar.

Sus ojos se engrandecen por unos segundos antes de volver a esa mirada fría. Las burlas de parte de los chicos llegan mientras Nessia solo sonríe.

—Deberías de dejar que te influencien, fue una estupidez arriesgarse así. Tu hermana no es mi persona favorita, pero sabes que si algo te llegaba a pasar, quien más lo sufriría sería ella. —Y sin más se la da la vuelta en dirección a la casa.

Galia sale de la casa y por su expresión, sé que hay problemas en el paraíso.

— ¿Qué hallaron? —habla ignorando por completo a su novio.

Éire. —Anuncia Nessia. —Tendremos que visitar las criptas de After Flames y ver si encontramos algo. Luego iremos a Irlanda.

— ¿Irlanda? —pregunto confundida.

Galia suspira y asiente.

¿En qué momento dijeron el lugar al que debíamos ir?

—En Irlanda está el refugio de las criaturas; es un edificio que sirvió de refugio para nosotros hace mucho tiempo durante las guerras que se presentaron.

Sigo sin entender bien, pero no me dan tiempo a pensar.

—Tenemos que movernos rápido. —Contesta la morena antes de darse vuelta.

Entramos a la casa y noto que todo está en silencio. Ni Jack ni Bastian están cerca, mucho menos la pareja del momento.

El dolor regresa a mi cien cuando veo el suéter de Hilarie sobre el perchero.

—Los Adders querrán seguirnos el paso. ¿Creen que podrán llegar a Éire? Las conejitas deben venir. —Masculla Clarke.

— ¿Qué demonios significa eso? —Protesto.

Dark Academia © LIBRO 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora