Esperando noticias

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YO V

La fría y dura mirada de este conocido atravesaba la blanca y poco bronceada piel de Lana, se veía nervioso al verla ingerir alimentos que otra persona había hecho. Esos labios rojos que desde la primera vez que la vio había deseado probar.

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LANA CASTINGER

Como si fuera unas niñas pequeñas, Yun y Ji tomaban sus manitas delicadas. Wen estaba un poco más sonriente y se veía de una manera distinta, Bey Bey sacaba fotos de su plato de comida para apreciarlas en algún momento, Mateo estaba inmerso en sus redes sociales y qué decir de Jesp, su rostro estaba rígido, su mandíbula tensa, sin embargo, era tan hermoso como el rocío de las hojas en la primavera naciente.

-¿Por qué tenés esa carita?- toqué su mentón- Me gustas más cuando sonreís- miré su mano que todavía no había tocado su comida-

-Estoy algo molesto- sonrió tristemente- Tal vez puedas ayudarme a comer- abrió su boca en forma de "O"-

Sabía que Jesp no estaba bien, lo noté decaído y muy cansado.

-Pero vos también debes alimentarme- tomé algo de comida que estaba sobre su plato-

-Hecho- el color rosado volvió a sus mejillas-

Pude ver que saboreaba el almuerzo, parecía un niño pequeño y muy lindo, en especial por sus mejillas llenas de alimento.

-Sos una cosita tierna- apreté su cachetito haciendo que se ahogara- Lo lamento-

Él comenzó a reír volviéndose a ahogar. Todos se quedaron mirando como si se tratara de algo raro, no sabría explicar sus expresiones con palabras.
Todas sus fans le sacaban fotos, se veía demasiado lindo y tierno con sus cachetitos llenos de comida. No entiendo cómo y cuando, pero sentí un dolor agradable en mi pecho.
Mi teléfono vibró, tenía un mensaje en coreano, no entendía bien lo que decía... en realidad no entendí nada. Por lo tanto, se lo di a Jesp para que lo traduzca en inglés.
-Dice que te va a venir a buscar ahora ¿Quién es Jony?- preguntó haciendo un puchero de azúcar-
¿Me vendría a buscar? ¿Será por las lluvias torrenciales?
-Es mi guardaespaldas y mi amigo obviamente- agarré comida con mis palillos que me había regalado mi papá-
Calculé el tiempo, supuse que Jony vendría dentro de una hora por el tráfico, pero no. Cuando levanté mi vista, estaba al lado de uno de mis profesores. Nuevamente, las hormonas de todas las chicas estaban revolucionadas. Muchas veces, chicas de distintas edades se me habían acercado para preguntar cómo hacía para estar rodeada de chicos tan lindos y bueno... hasta yo me lo pregunto.
A pasos seguros y elegantes, Jony se dirigió a mí.
-Lana-me llamó-Debemos de irnos, necesitamos ir al médico para su revisión- traía en sus manos una gruesa campera de una marca reconocida-
Me despedí de ellos como lo harían en Corea del Sur, excepto con Mateo y Bey Bey que ya teníamos nuestro propio saludo. Jony agarró mi mochila y me cubrió con una manta y sobre ambos llevaba el paraguas. Me había sorprendido como los paparazzi estaban atento a cada movimiento que hacía, no entendía que error había cometido para que me buscasen tanto, yo siempre me había visto y lo sigo haciendo, como una chica normal y común, no era como las hermosas y destacadas de mi país u otras chicas que salieron miss universo. Igual creo que era única de cierta forma, no me amaba, pero si me quería y me hacía respetar. Me pregunto varias veces ¿Por qué debo de seguir las masas? ¿Por qué debo de vestir como los demás quieren que lo haga? ¿Por qué debo de comportarme como tarada y hacer lo que el mundo, las redes sociales hacen? Quiero ser yo, quiero ser yo misma sin ser juzgada o qué la gente me persiga por ser una extranjera, hija de un importante (en Corea) hombre. Muchas veces me siento desgastada por mis pensamientos y más cuando me invade la nostalgia.
-Lana, vamos a ir a un hospital cerca de su escuela, pero vamos a tener que hacer varios recorridos. Abróchese el cinturón- dijo mirando fijamente-
-¿Por qué?- miré hacia los costados-
-Porque nos persiguen- aceleró rápidamente-
Amaba esta sensación, la velocidad era una de las cosas que amaba ¿Lo saqué de mi madre? Mi panza sentía cosquillas y en mi rostro estaba dibujada una sonrisa, lo cual era lo contrario de Jony. Después de un par de vueltas los perdimos en la intersección.
-Jony, ¿Le tenés miedo a la velocidad?- intenté no reírme de su rostro pálido-
-No, no me gusta- estacionó el vehículo-
-Entonces ¿Por qué lo hacés? - me sentí apenada por él-
-Por usted Lana- me miró con dulzura-
-Lamento que lo tengas que hacer- golpeé su espalda en forma de consuelo-
Mis padres llegaron al instante. Un grupo de médicos se acercó entre ellos, divisé a un destacado joven. Se podría decir que tenía uno o dos años más grande que mi hermana, parecía coreano, era alto, tenía una manga de su guardapolvo blanco arremangada en lo que se podía ver un montón de cicatrices de lo que supongo que serían cuchillas o jeringas.
-Señor y señora Castinger, señorita- saludó un médico entrado en edad- Vamos a ser lo más discreto posible, cualquier información que salga de este hospital vamos a tomar la responsabilidad- dijo mientras caminábamos al ascensor-
Mis padres se miraron y me pusieron al medio de ambos, Jony estaba detrás de nosotros junto a otros tres guardaespaldas. El hospital era tan hermoso, se veía que tenían todo lo necesario para poder ayudar a sus pacientes. ¡Si mi hermana estuviera acá! O si mi hermano estuviera en el mundo del periodismo ¡Todo sería tan genial! Bueno, el estar con ellos sería todo mucho mejor.
Una gran cantidad de pacientes estaban amontonados, comentando a fuerte voz sobre quienes éramos, lo intuí por la forma descortés que nos señalaban. Aunque había gente que nos sonreía en manera de apoyo. En lo personal creo que la gente estaba mal informada sobre nosotros.

Ya en una sala muy grande, de alta tecnología, donde el olor del hospital era muy fuerte en cada rincón que estuviera. Los médicos escribieron en sus planillas cada detalle que extraían de los papeles que mi madre había traído.

-Lana, vamos a mandar un mensaje el día que tengan que venir nuevamente. Nos interesa tu caso, no te sientas mal, todo va a salir muy bien. Cuando nos comuniquemos con tus padres vamos a tener todo listo para realizar los estudios correspondientes- nos despidió con su grupo de estudio en una reverencia-

De camino a "casa" me fui con mis padres, tenía justo la oportunidad para preguntarles la salida o mini-vacaciones.

-Ma...pa. Saben que tengo como unas mini-vacaciones, por lo que les quería pedir permiso si pueden los chicos venir acá como para hacer un pequeño campamento- largué la idea-

Mis padres se miraron por un pequeño momento y asintieron con sus miradas perdidas en un punto fijo.

-Sí negra, avisales y si querés mañana los pasamos a buscar a cada uno por sus casas- mi padre me miró por el vidrio retrovisor- Pero cuidado, porque vos sos MI pequeña bebé- remarcó sus palabras-

Solo reí ante la idea de mi padre, al igual que mi madre con su pícara mirada.

Autora:

¡Hola a todos! Gracias por el apoyo de cada uno de ustedes.

Les quería comentar que dentro de poco vamos a realizar un libro con otro escritor, les ruego que sigan apoyando nuestros sueños y proyectos. Gracias de corazón a cada uno de ustedes.

Una argentina en AsiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora