Morgana Dumbledore

027: Asuntos del corazón

Morgana estaba feliz, agotada pero feliz. Estaba feliz porque conseguir transformarse en animago era de las mejores cosas que había hecho en su vida. Por las noches disfrutaba de hacer bromas con los merodeadores o de simplemente explorar el castillo, pero si alguna vez no salían, Morgana se transformaba en su zorro y se iba por su cuenta. Además había recibido una carta de Jerry:

¿Es enserio? ¿De verdad lo habéis conseguido? ¡Dios mío y Merlín juntos! Perdona que comience la carta de forma tan abrupta, pero es que estoy muy emocionado por ti y por los merodeadores. Tres malditos años, ¡ya era hora!

Por cierto, este verano, cuando nos vimos no hablamos de la idea que tuvisteis del periódico "ilegal" de Hogwarts. ¿Te gustó la carta falsa que te escribí? Puse muchas cosas que eran verdad y otras que las omití o encripté; si es que soy un genio, igual debería hacerme espía. ¿Tus abuelos se lo tragaron? ¿Y qué te parece lo de Arthur? ¿Seguro que no te quieres casar con él? He escuchado que va a heredar tierras en África, ya sabes podríamos irnos todos allí y abrir una sucursal de las Siete Hermanas.

Debes saber, que he perdonado a Mike y Howard. Ya, ya lo sé, no hace falta que me lo digas; que soy un imbécil por perdonarles casi cinco años de burlas y ataques, pero te juro que han cambiado y no se trata de ningún truco. Han dicho que quieren verte y disculparse contigo, yo les he dicho que tendría que ser en verano, porque todo el año lo pasabas en un internado en Escocia. Por favor, cuando los veas, haz el esfuerzo de escucharles y de ponerte en su pellejo. Ya sabes lo que dice mi libro favorito: "nunca sabes como es realmente un hombre, hasta que te has calzado sus zapatos y has caminado con ellos."

Otra cosa más, es sobre tu forma animaga. No sé si te lo habré mencionado aluna vez, pero mi animal favorito es el zorro. Cuando mi hermano Louis murió, lo pasé bastante mal, ya lo sabes. Una vez fui al cementerio a colocar flores sobre su tumba y entonces un zorro pasó y me miró durante unos instantes y pensé que era mi hermano. Sé que es una chorrada y un poco patético para una persona tan racional como yo, pero es algo que cuando lo pienso me alegra.

Ten cuidado y evita meterte en líos. ¡No me rechistes, Morgana Dumbledore!

Te quiere demasiado.

Jerry.

Jamás pensó que diría esto, pero ser un zorro era lo mejor que le había pasado, ahora lo llevaba con orgullo y no con vergüenza.

El partido de Quidditch contra Slytherin lo ganaron e hicieron una fiesta que se salió de las manos. Unos chicos de sexto afirmaron que estaban todos invitados, menos los de primer año. A Morgana le insistieron muchísimo para que fuera, tanto como James y Sirius, como todo el equipo de Quidditch, y al final aceptó.

Cuando entró en la sala común después de estar en la biblioteca, no esperó encontrarse la música de The Weird Sisters a todo volumen y un grupo de personas cantando y bailando. Su primer pensamiento fue que podría irse de allí, sigilosamente, sin que nadie la notara, desgraciadamente la discreción no fue su mayor virtud.

-¡Morgana!- exclamó James apareciendo a su lado.

-¡Has venido!- gritó Sirius dándole un abrazo.

-¿Estáis...?- preguntó ella, pero fue interrumpida por alguien.

-¿Borrachos?- dijo Remus, sorprendiéndola.- Sí y mucho.

-De ellos me lo esperaba.- dijo señalándolos.- Pero de ti no, Remus. ¿No se supone qué eres el responsable del grupo?

-Hoy es mi día libre.- dijo él encogiéndose de hombros.

-¡Tienes que probar esto!- le dijo Sirius pasándole un vaso con un líquido no muy agradable dentro.- Ya verás, es impresionante.

-¡Venga, Bocón, pruébalo!- dijo James.